ALICANTE. Una nueva familia de moléculas para combatir bacterias, virus y cáncer. El grupo de investigación de procesos catalíticos en síntesis orgánica de la Universidad de Alicante ha desarrollado un novedoso procedimiento para sintetizar compuestos que son potenciales agentes antibacterianos, antivíricos, antifúngicos y anticancerígenos. Es, en la práctica una nueva batería de fármacos que minimiza la resistencia de los patógenos a los actuales tratamientos. Esta familia de moléculas es capaz de intercalarse en las hebras de ADN e inhibir el desarrollo de las células tumorales. Los compuestos se han sintetizado en laboratorio y ha realizado estudios preliminares con, según afirman desde el grupo, "resultados excelentes" en la inhibición del virus del herpes simple (HSV-1), la bacteria escherichia coli y en la línea celular de cáncer de mama MCF-7. Ahora buscan empresas interesadas en adquirir esta tecnología para su explotación comercial.
Las ventajas de esta innovación desde la UA pasan por la síntesis de compuestos, a nivel laboratorio, los nuevos compuestos homólogos de azanucleósidos. Y lo hacen utilizando aldehídos similares a los que se encuentran en el material genético de los seres vivos. Así lo explican desde la UA en el documento en el que exponen su invención. Los compuestos finales y sus posibles derivados son totalmente novedosos, y en la mayor parte de los casos, los aldehídos no se han descrito en la bibliografía científica. Se trata por tanto, de una nueva variante de fármacos que son, potencialmente, más letales que los actuales, y que dificultan los mecanismos de defensa de bacterias, virus y otros agentes patógenos, por ejemplo, hongos.
Otra ventaja de estos nuevos productos consiste en la eficiente capacidad que tienen para intercalarse en las hebras de ADN y provocar inhibiciones en el desarrollo de las células tumorales.
El grupo de investigación de procesos catalíticos en síntesis orgánica de la UA está formado por un equipo multidisciplinar comprometido en la búsqueda de las soluciones científico-tecnológicas más adecuadas para resolver los problemas y las necesidades técnicas relacionadas con la Química Farmacéutica.
Para comprobar la efectividad de los compuestos creados se han realizado una batería de ensayos preliminares. En las pruebas han reducido el herpes simple en un 15%; la escherichia coli con una media de inhibición del 13%; también la inhibición del crecimiento de la línea celular de un tipo de cáncer de mama en un 8%. Además, el grupo de investigación dispone de una planta piloto que trabaja en condiciones de completa trazabilidad y es posible el escalado a nivel pre-industrial e industrial.
Entre las posibles aplicaciones, además de potenciales tratamientos para los virus, bacterias y cánceres descritos, esta familia de compuestos también se puede aplicar en agricultura. En concreto, en tratamientos fitosanitarios, preferiblemente en infecciones causadas por hongos y en la industria alimentaria -por ejemplo, para films de recubrimiento de alimentos con el fin de evitar su contaminación microbiana-.
Ahora, buscan organismos interesados en adquirir esta tecnología para su explotación comercial a través de acuerdos de licencia de la patente, búsqueda de oportunidades de financiación para desarrollar nuevas moléculas, nuevas aplicaciones, llevar a cabo el escalado industrial, adaptarlo a necesidades específicas de las empresas y para acuerdos en materia de transferencia de conocimiento.
Desde el documento donde el grupo de investigación de la UA expone su invento afirman que los microorganismos -sobre todo bacterias, virus y en menor medida hongos- desarrollan mecanismos evolutivos que les permiten ser resistentes a los fármacos inhibidores de su vida. En este sentido, la sociedad necesita urgentemente nuevos fármacos capaces de combatirlos.
Recientemente, se ha demostrado que existe una amplia familia de antibióticos nucleosídicos que atacan directamente a las distintas fases de control durante la formación de la membrana bacteriana y la de los hongos. Además, se ha demostrado que la resistencia de un virus a un fármaco que contiene una estructura nuclesídica tarda bastante tiempo en producirse.
Existe por tanto, la necesidad de proporcionar al mercado nuevos compuestos con actividad antimicrobiana, antiviral, antifúngica y anticancerígena que solucionen los problemas anteriormente descritos.