La Terreta Gourmet reabre con el doble de aforo y potenciando la cocina de autor

ALICANTE. Se cumple ahora un año de la apertura de La Terreta Gourmet, en la calle Castaños. El segundo establecimiento que abría el chef Pascual Torregrosa y su socio Rubén Fernández. Un local enfocado a la alta cocina que, además de ser todo un desafío en los tiempos que corren, era también una apuesta personal del propio chef tras el éxito de La Terreta Gastrobar, en la calle Pablo Iglesias. "Mientras en el primer restaurante hemos mantenido un estilo clásico y mediterráneo, siempre con algún toque de autor, aquí he querido potenciar eso, mezclando las diferentes cocinas que he aprendido durante mis experiencias profesionales en varios países", explica Pascual Torregrosa. 

"Creamos platos y sabores que no dejan de ser bien conocidos para el público general, pero a los que en ocasiones trato de dar una vuelta de tuerca fusionando otros elementos", describe. "Se mantiene la misma línea y se hace hincapié en el estilo mediterráneo más evolucionado, con cocina de autor, pero sin 'esnobismo' innecesario", sentencia. Unos platos con los que indudablemente han conquistado al público por el estómago, ya que la demanda les ha obligado a ampliar el restaurante añadiendo el local colindante para poder doblar el aforo, rondando ahora las ochenta personas, con un local que ahora ocupa unos 170 metros cuadrados aproximadamente. 

El establecimiento reabría este miércoles sus puertas para recibir de nuevo a su clientela tras los dos meses de reforma, dispuestos a afrontar desde ya la campaña Navideña. Restaurante que ha crecido también por la cocina, donde el chef ha querido ganar comodidad y fluidez para poder ofrecer mejor servicio. Además, cuenta ahora con una terraza cubierta, ubicada en la propia entrada al local, creando un acogedor lugar de espera antes de las reservas. Espacio en el que se potenciará la coctelería con una barra independiente. 

Los distintos ambientes han sido diseñados, como en todas las anteriores ocasiones, por Deco Studio, del arquitecto interiorista Javier M. Podio. "La Terreta Gourmet mantiene así su estilo cool vintage en la decoración, con aires muy botánicos, pero esta vez separando ambientes mediante una iluminación muy cálida en el salón y más fresca en la terraza interior", explica el arquitecto. 

El restaurante se abrió hace un año con la previsión de que se pudiera requerir una ampliación, en función de la demanda, algo que se al final se ha cumplido. Para ello habían adquirido el compromiso con el local colindante, que ha permanecido cerrado —a la espera y con el proyecto encima de la mesa—. Unos meses después, como sucediera en el primero de sus restaurantes, se ha tenido que ejecutar el proyecto de ampliación, contando ahora con un salón que dobla la capacidad, además de un semi-reservado para diez personas.