ELCHE. El edil de Mantenimiento del Ayuntamiento de Elche, Héctor Díez, ha presentado este jueves las conclusiones del estudio geotécnico de estabilidad de taludes realizado para conocer el origen de los socavones aparecidos en los últimos meses en el barrio Porfirio Pascual. Tal y como ha recordado el concejal, el objetivo del Gobierno municipal a la hora de encargar este estudio era dar solución a los socavones aparecidos y a una situación de aparente inestabilidad del terreno de la zona.
Díez ha explicado que el estudio, que se centra en el margen derecho del Vinalopó y realizado por la empresa ImasaLab, consta de más de 200 páginas en las que se concluye que el origen de los problemas se encuentra en el inadecuado relleno que en su día se utilizó en la zona.
“El estudio realiza una importante recopilación e interpretación histórica de la zona y de su situación de partida. En los años 50 y 60, se empieza a modificar la ladera del río a consecuencia del desarrollo urbanístico del barrio de Carrús Este. Los escombros sobrantes de las obras de las edificaciones se utilizaron como relleno en ladera del río”, ha explicado Díez, quien ha añadido que “esto ha provocado que tengamos una ladera rellenada desde los 4 metros en la cota más baja hasta un relleno que alcanza los 18 metros en la parte del colegio Ausias March”. Estos rellenos se aportaron en su día sin ningún tipo de atención a la calidad del material, ni a la forma de compactarlo.
Para el reconocimiento del terreno se han realizado 11 sondeos mecánicos y tres penetraciones dinámicas, además se han tenido en cuenta los estudios que se llevaron a cabo ante la construcción del Valle Trenzado.
Tal y como especifica el estudio, las causas de las patologías son la existencia de un terraplén, de 4 a 18 metros de relleno, en el que se han detectado materiales inadecuados que no están compactados correctamente, además, se han detectado numerosas casas cuevas, cavidades huecas. Y junto a todo ello se pone de manifiesto que el arbolado de la zona, de gran tamaño, tampoco ayuda a la estabilidad del terreno.
El estudio se ha dividido en cinco tramos. El primero de ellos, el comprendido entre el Parque de Porfirio Pascual hasta la calle Gervasio Torregrosa Boix, no cuenta con daños significativos.
El segundo tramo, calle Gervasio Torregrosa Boix y Francisco Miller Giner, se observa una fisura longitudinal que se debe a la separación del relleno con la estructura que hay enterrada que son unas antiguas escuelas municipales. En esta zona se propone la sustitución de los rellenos actuales por un terraplén con materiales de mayor calidad y mejor compactados.
El tramo tres es el que presenta más problemas. Se trata de la zona en la que se produjeron los socavones, entre la calle Miller Giner y las pistas de petanca. En su día, la vaguada existente se rellenó con restos de construcciones, además hay en la zona multitud de casas cuevas (ubicadas bajo de las pistas de petanca). Para este tramo, el estudio habla de estabilidad precaria en cuanto al talud y al terreno, por tanto, no hay que descartar posibles movimientos.
“La empresa propone rellenar los taludes mediante una técnica de encepado y pilotado. Al mismo tiempo actuar sobre la zona más cercana al río mediante la instalación de un sistema de gaviones o un muro de escollera”, ha explicado Díez. En el tramo 4 (Pistas de petanca y aparcamiento calle Padre Palau) no se han detectado problemas considerables.
Por último, en el tramo 5, el del colegio Ausias March hasta la pista de baloncesto del centro, es la zona de mayor cantidad de relleno y se vuelve a hablar de que no está adecuadamente compactado. Aquí se han detectado filtraciones de agua en el subsuelo. En este caso se dice que la mala compactación se encuentra, sobre todo, en la pista polideportiva del sur, según ha explicado Díez. El edil recuerda que el centro escolar está cerrado a la espera de que la conselleria de Educación decida su posible derribo, y no se descarta tener que actuar en este tramo en un futuro.
Díez ha explicado que el contenido del estudio ya ha sido trasladado a los vecinos y se les ha comunicado además las actuaciones que se van a emprender a partir de ahora.
“Vamos a proceder a dar una solución provisional para garantizar la seguridad en la zona de las pistas de petanca, ya que, aunque están valladas, se producen saltos continuos por parte de menores a la zona. Para evitar algún accidente se van a rellenar esos socavones”, ha indicado Díez, quien ha añadido que “además, fruto de este estudio, el Gobierno Municipal ha puesto a trabajar a los técnicos municipales para que redacten los pliegos de condiciones técnicas para redactar un proyecto de ejecución del tramo 3, que es el que más nos preocupa. Este proyecto de ejecución recogerá las propuestas de solución que propone el estudio”.