La Sindicatura de Comptes audita favorablemente las cuentas de 2016 de la ilicitana Pimesa

ELCHE. La Sindicatura de Comptes seleccionó en 2016 a varias empresas públicas para hacerles la auditoría independiente que suele hacer la institución valenciana, dependiente de Les Corts, a este tipo de compañías, además de a ayuntamientos y otros organismos. Una de las elegidas entonces fue la empresa pública ilicitana Pimesa junto a otra empresa de Valencia. Aunque esta auditoría externa por ley que se hace a sociedades de capital no fue la primera que se le realizó en dicho ejercicio. Previamente ya habían sido controlados por una auditoría externa, Luis Caruana. En cualquier caso, la de la Sindicatura mostró un resultado favorable, aunque con algunas observaciones.

Mientras que la efectuada por Luis Caruana era sólo económica, la de la Sindicatura es económica, financiera y de contratación. La primera incluía un párrafo de énfasis que se solía poner en los estudios de todas las empresas públicas y privadas que se dedicaban al sector de la vivienda, una iniciativa que se realiza desde la crisis. Un párrafo que no está en la de la Sindicatura, y en cualquier caso, ambos resultados muestran una auditoría favorable. No obstante, en el informe dependiente de Les Corts, se realizan una serie de recomendaciones que Pimesa debería adoptar de cara a distintos ejes.

La sociedad pública ya venía mejorando algunas de las cosas que se solicitan

Algunas de ellas por ejemplo era la de reforzar con medios humanos distintas áreas, y ya lo hicieron con dos personas más en el área de contratación y administración. También indican desde la empresa que en 2018 se contratará a un técnico superior para la misma área. Asimismo, son algunas mejoras en las que ya estaban trabajando desde entonces, por lo que independientemente del informe que ahora se ha hecho público, ya estaban en trabajando para la mejora de varios aspectos.

Otro de los que se pide es mayor publicidad en procedimientos restringidos, por lo que se han registrado en la plataforma de contratación del Estado, como hacen las distintas administraciones públicas. Asimismo, a petición de la Sindicatura, también han ampliado la información de los pliegos de cara a que se mejoren y la administración pública pueda tener cada vez más expedientes y documentación, y por tanto más registro de las acciones para poder auditar y comprobar todo lo que se hace de forma más eficiente. Ahora, además del informe técnico y económico del pliego, se añade el jurídico. Otra de las mejoras que se ha realizado es la de que se pueda manejar con aplicaciones informáticas asuntos como la asignación de contratos o la numeración de los expedientes.

El resto de aspectos del informe son observaciones sobre los asientos contables, meros formalismos. Eso sí, en algún caso, como anticipos de clientes a corto plazo del pasivo corriente del balance, donde figuraba una cantidad de algo más de dos millones de euros, se explicaba que debería haberse incluido en el epígrafe de deudas con empresas en el pasivo, algo con lo que Pimesa disentía y por lo que alegó. Otra cosa que llamó la atención a la Sindicatura era la gestión de la estación de autobuses y que hace de gasolinera, por la que se establece que debe cumplir con la norma de estabilidad presupuestaria, y que el día que se deje de gestionar se tendrá que realizar un plan de ajuste. Así pues, desde Pimesa valoran positivamente la auditoría, favorable, que concuerda con la externa realizada anualmente a la empresa. Además señalan que en muchos ámbitos, les sirve para mejorar.