ALICANTE. La Tesorería General de la Seguridad Social ha ordenado el embargo de bienes de la firma textil alcoyana Sociedad Textil Lencera, conocida por confeccionar desde hace años los manteles para las cenas de gala de la Familia Real, para cobrarse el importe de las cuotas que debe la firma, que como adelantó Alicante Plaza el pasado mes de febrero, se ha declarado en concurso de acreedores. La Unidad de Recaudación Ejecutiva (URE) de Alcoy ha embargado un vehículo de alta gama propiedad de la empresa, y lo subastará en unas semanas para recuperar algo más de 5.000 euros, según la convocatoria publicada en el Tablón de Anuncios de la Seguridad Social (TANUSS).
Lencera se declaró en concurso voluntario hace diez meses, poco antes de que estallase la pandemia, pero el juzgado de lo Mercantil 1 de Alicante, que dirige el proceso, no suspendió las facultades de administración de la empresa, aunque está supervisada por un administrador concursal (el abogado alicantino José Luis Ros Castaño, que el pasado mes de septiembre remitió su primer informe al juzgado). Entre los acreedores de la mercantil alcoyana se encuentra lógicamente la Seguridad Social. No obstante, la ley no permite ejecutar embargos en la fase concursal, aunque la Seguridad Social y Hacienda pueden ejercer sus privilegios de apremio antes de la declaración.
La empresa textil se hizo muy conocida tras convertirse en proveedora de la mantelería para la boda de la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarín, y repetir más tarde en el enlace del actual rey, Felipe VI, con Letizia Ortiz. Desde ese momento, Lencera se convirtió en el proveedor habitual de la mantelería para la Casa Real, y por ejemplo sirvió los manteles que se emplearon en la cena de gala ofrecida en 2009 al presidente francés Nicolás Sarkozy y su esposa, Carla Bruni (en la imagen que acompaña a esta información). A la Casa Real, la empresa alcoyana ha sumado con los años otros clientes habituales de postín, como los monumentos de Patrimonio Nacional, el Senado o la red de Embajadas de España.
Fuera de las instituciones, los productos de la firma de la familia Ponzoda se comercializan tanto a clientes del canal horeca (hoteles, restaurantes y cáterings) como directamente para el hogar, con dos marcas: Lencera (distribuida a través de grandes superficies y comercios de decoración) y Les Tissages du Soleil (más exclusiva, a través de comercios detallistas). La firma alcoyana forma parte también de la plataforma Home Textiles from Spain, organizada por la patronal Ateval para facilitar la internacionalización de las empresas del sector.
Las cuentas del ejercicio 2018, las últimas aprobadas antes de la declaración del concurso, reflejan una caída de las ventas del 18% respecto al año anterior, hasta 1,2 millones de euros, y pérdidas de 170.000 euros pese a lograr un Ebitda positivo (23.450 euros). En los dos ejercicios anteriores, con un volumen de negocio similar, la empresa había cerrado con beneficio. El balance de la sociedad en 2018 reflejaba un pasivo de cerca de 2 millones de euros, del que la mayor parte (casi 1,4 millones) era a corto plazo. El activo de la firma superaba sus deudas, al menos al cierre del ejercicio anterior. En Lencera trabajaban al finalizar ese año 12 empleados.