ALICANTE. Destinar una vivienda para alquilarla sigue siendo, a pesar de los altibajos del mercado residencial, una buena inversión en Alicante. Esta es una de las principales conclusiones que se desprende del informe Rentabilidad del alquiler 2020 de la tasadora Euroval y su Instituto de Análisis Inmobiliario (INSTAI). Para el cálculo de esta variable, Euroval y el INSTAI se han basado, por una parte, en la media de las medianas del importe de los alquileres y, por otra, en los precios de la vivienda del Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana expresados como valores medios anuales
Ni siquiera la covid-19 ha afectado de manera significativa el dinámico mercado del alquiler en Alicante (capital más provincia). Tanto es así, que en 2020 la vivienda nueva en alquiler (aquella con hasta cinco años de antigüedad) rentó de media un 4,7%, con un mínimo descenso de dos décimas respecto a 2019. El alquiler de una vivienda usada (con más de cinco años de antigüedad) resulta, incluso, más beneficioso: en 2020, su rentabilidad media fue del 6,1%, apenas tres décimas por debajo de la obtenida un año antes, Solo a afectos de comparación, baste recordar que la última subasta de letras del Estado a cinco años se negoció con un tipo de interés medio del 0%.
“Aunque la rentabilidad es el cociente entre el precio alquiler y el de la vivienda –se afirma en el informe de Euroval y el INSTAI–, resulta mucho más determinante este último dato. Los alquileres pueden ser relativamente altos o bajos, pero su rentabilidad va a depender, sobre todo, del denominador; esto es, del precio de la vivienda”. Esto explica porqué la rentabilidad de la vivienda usada es en Alicante claramente superior a la de la vivienda nueva. Se trata de una realidad que también se observa en las otras provincias de la comunidad y que, con mínimas excepciones; también puede extrapolarse al resto del territorio nacional, En el caso de la vivienda nueva, la rentabilidad del 4,7% se obtuvo con un alquiler mediano anual de 10.512 euros y un precio medio de compra de 222.683 euros, mientras que para la vivienda usada estos valores fueron de 7.612 euros y 124.293 euros, respectivamente.
Las anteriores rentabilidades del alquiler en Alicante, tanto de vivienda nueva como usada, confirman una cierta estabilización en los retornos de la inversión, sin apenas oscilaciones destacables en el medio plazo. De hecho, la media en el trienio analizado en el informe, 2018-2020, para la vivienda nueva es del 4,8% y del 6,2% para la usada.
A nivel del resto de las provincias de la Comunidad Valencia, Alicante es la que presenta menores rentabilidades, con independencia de que el alquiler sea de una vivienda nueva o usada. Para Valencia, las rentabilidades en 2020 fueron del 5,6% (nueve décimas más que en Alicante) y del 7,9% (1,8 puntos más), respectivamente. Para Castellón estás fueron del 5,7% (un punto porcentual más) y del 7% (nueve décimas más), respectivamente.