ELCHE. El bipartito ilicitano se ha metido de lleno en el Plan Centro, o al menos así lo asegura después de anunciar otras actuaciones previstas en los primeros meses del año, además de la principal, que sería la peatonalización de la Corredora en los presupuestos municipales (para 2020) por cuarta vez. Sería una obra por un importe de algo más de 700.000 euros, que además iría aparejada a 142.000 euros para la reordenación del tráfico del Plan Centro y 278.572,25 para la señalética de aparcamientos. Sin embargo, por los plazos que calculan, es más que probable que la obra coincida con la procesión del Misteri d'Elx que tiene lugar por la Corredora el 1 de noviembre. En ese caso, la procesión se realizaría por la calle Hospital.
El calendario que tiene previsto el bipartito para la intervención en una de las principales arterias del centro de la ciudad, ahora que considera que sí se realizará la actuación, es licitar la obra en los primeros meses del año, puesto que el pliego de condiciones ya está redactado. Eso supondría adjudicar la obra en algún momento antes de verano para después poder empezar la actuación tras el 15 de agosto, después de las fiestas patronales, para no entorpecer el comercio ni las celebraciones. Su objetivo es que en la navidad de 2020 la Corredora ya sea peatonal.
Sin embargo, la intervención en estas fechas tiene sus daños colaterales: está previsto que dure al menos tres o cuatro meses, lo que presumiblemente coincida con la procesión del Misteri d'Elx por La Vespra, algo que tiene lugar los años pares. Es decir, cada dos anualidades. Aunque el equipo de gobierno tiene establecido en el pliego de condiciones que habrá una mejor puntuación para aquellas empresas que ofrezcan acortar los plazos, habrá que ver finalmente a cuánto asciende el total de la intervención y si esos plazos se pueden acortar tanto.
Con todo, el bipartito se reserva ese as en la manga, el de desviar la tradicional procesión por la calle Hospital en lugar de por una Corredora levantada. Asimismo, no sería la primera vez que tiene lugar, puesto que en 1996 con las obras de ampliación de las aceras de la céntrica vía, el entonces gobierno de Diego Macià optó por que la procesión pasara por la calle Hospital. Así pues, hasta el año que viene, habrá que ver qué sucede finalmente, si el elenco de actores y cantores del Patrimonio de la Humanidad tienen que desfilar por la concurrida calle comercial si se desarrollan los obras, o no.