El CEO de Centauro, Erik Devesa, durante un congreso en Alicante en 2017. Foto: RAFA MOLINA ALICANTE. Si hay un sector que vio impactado su volumen de negocio en 2020 por la irrupción de la pandemia, ese es sin duda el turístico. Mientras otras empresas destacadas de la provincia, del sector industrial o agroalimentario e incluso servicios lograban mantener o incluso mejorar sus cifras de negocio en plena pandemia, como ha venido contando este diario, la falta de movilidad castigó duramente al turismo. No solo al alojamiento.
La firma benidormense de alquiler de vehículos sin conductor Centauro Rentacar vio cómo la covid se 'comió' casi el 40% de su facturación en 2020, dados los meses de confinamiento total y la escasa afluencia de turistas internacionales durante el resto del año. Según reflejan las cuentas anuales de dicho ejercicio, depositadas ahora en el Registro Mercantil y consultadas por Alicante Plaza, Centauro facturó algo más de 45 millones de euros en 2020, frente a los más de 72 millones de 2019. Es decir, un 37% menos.
La pandemia cortó así la espiral virtuosa en la que había entrado en los últimos años la empresa de la familia Devesa Sik, hasta llamar la atención del fondo Portobello Capital, que adquirió la mayoría del capital en 2017, y luego de la aseguradora Mutua Madrileña, que compró la parte del fondo en 2019. No solo eso, sino que el resultado neto al cierre del ejercicio se resintió especialmente, al pasar de los 9 millones de beneficio de 2019 a los 6 millones de euros de pérdidas que recogen las cuentas individuales de Centauro en 2020.
Pese a todo, la firma benidormense siguió con sus planes de expansión, y durante 2020 abrió cuatro nuevas sucursales en España, todas en Madrid, para cerrar el año con 21 oficinas en nuestro país. Además, reforzó su presencia internacional en los países donde cuenta con filiales desde 2016: Portugal, Italia y Grecia.
Para hacer frente a la situación originada por la pandemia, además, el informe de gestión adjunto a las cuentas recoge que Centauro formalizó varias líneas de financiación con el ICO a largo plazo, así como varias pólizas de crédito por valor de 23 millones que no se llegaron a disponer, y un contrato de financiación adicional para renovación de la flota avalado con los vehículos. A todo ello se sumó una aportación de 5 millones de euros de su socio único (la sociedad de cabecera Sildoscan Spain, participada al 80% por Mutua Madrileña y al 20% por la familia fundadora). A su vez, Centauro reforzó con 6 millones de euros el patrimonio de sus filiales.
La firma ha elaborado un plan de negocio a cinco años que contempla que durante 2021 la cifra de negocio sea aún inferior a la de 2019, con una progresiva recuperación del nivel de actividad, y mantiene abiertas todas sus sucursales (además de haber inaugurado otras, como la nueva oficina frente a la estación del AVE de Alicante). Las nuevas aperturas en Madrid, asegura el informe, han permitido reequilibrar el peso del cliente nacional frente al internacional.
