ELCHE. La tasa de ocupación hotelera en Elche ha llegado en marzo al 46,6%, un dato anómalamente reducido para un año turístico anterior a la pandemia ocasionada por el Covid-19. Si llevamos la comparación a la tasa de 2019, que logró un 65,0%, se percibe con más claridad la abultada diferencia que separa el dato de 2021 con la antigua normalidad. Valorado en relación con contexto de crisis sanitaria actual, el valor de marzo supone un ascenso de 6,9 puntos porcentuales respecto al mes precedente y es 8,1 puntos inferior al mismo mes de 2020, que se situó en un 54,7%. Hay que recordar que fue entonces cuando comenzaron las medidas extraordinarias que se tradujeron en el cierre del sector.
En cuanto a la rentabilidad, con un precio medio en marzo de 45,46 euros, hay una mejora de 1,50 euros respecto a febrero. Sin embargo, el dato interanual es negativo, 4,33 euros menos que en aquel ya difícil marzo.
En la evolución respecto a febrero ha incidido positivamente el final de las severas restricciones que impedían en la Comunitat Valenciana la salida y entrada en municipios de más de 50.000 habitantes en fines de semana y la reapertura de la hostelería y que ha supuesto la recuperación de la clientela de ocio de proximidad.
Sigue, sin embargo, imposibilitado el turismo vacacional nacional por el cierre perimetral de las comunidades autónomas y muy restringido el turismo internacional por las exigencias y limitaciones impuestas a los viajes desde fuera de nuestras fronteras.
Las mermadas tasas de ocupación se corresponden fundamentalmente con clientela nacional de negocios. Apenas reseñable ha sido la incidencia que han tenido algunos eventos que se han llevado a cabo en la ciudad, como el Campeonato de España Absoluto de Natación con Aletas, los días 13 y 14 o el puente de San José.
La situación en el contexto nacional (con datos de febrero) es también negativa. Las pernoctaciones retroceden un -86,5% respecto al mismo mes de 2020, el gasto total de los turistas internacionales cae un 93,3% en el dato interanual y la tarifa media por habitación ocupada se retraer en un -28,20%.
Por su parte, el aeropuerto de Alicante-Elche ha cerrado marzo con 61.938 pasajeros, que supone un retroceso del -86,9% respecto al mismo mes de 2020.
La situación del sector turístico en Elche sigue siendo agónica. A pesar de los positivos datos de evolución de la pandemia en la Comunitat Valenciana, el paulatino incremento de incidencia en el conjunto nacional y la preocupante situación sanitaria del entorno europeo no hacen prever la recuperación de la movilidad a corto plazo.
Seguimos dependiendo de un avance significativo en la vacunación que permita lograr una inmunidad de grupo y ofrecer una razonable certidumbre respecto a los viajes. Es imprescindible que las autoridades aceleren el ritmo de vacunación para dejar atrás esta situación insostenible para el turismo. De la misma forma, es necesario que el pasaporte sanitario europeo sea una realidad cuanto antes, como fórmula para ir recuperando poco a poco la normalidad.