ELCHE. Recientemente se ha publicado el nuevo Atlas Nacional de Mortalidad en España (ANDEES), recogiendo datos de la mortalidad en España durante el periodo 1989-2014 a través de 10 millones de fallecimientos. Con toda esta información —que El País ha recogido en un mapa— surge un elaborado informe para comprobar la mortalidad y sus causas en cada municipio, lo que deja patente cómo influye el código postal en la salud: en las regiones mineras hay mayor riesgo de muerte por enfermedades respiratorias, en el sur del país hay mayor mortalidad por la situación socioeconómica, a la inversa que en el norte, cómo afectan positivamente las infraestructuras sanitarias en las capitales o la mayor salud en localidades rurales alejadas de comida basura... En el caso de Elche, su mortalidad con respecto al resto del país es el doble si se habla de enfermedades isquémicas de corazón (al menos +94%) y hay índices bastante altos de mortalidad por alzheimer (+54%).
El análisis elaborado recoge la Razón de Mortalidad Estandarizada suavizada (RMEs), un indicador que estima la relación entre el número de muertes observadas por una causa de defunción en cada municipio y el número de muertes para esa misma causa que se esperarían según sus habitantes y las edades de los mismos. En ese sentido, siendo 100 lo 'esperable' en Elche en otras enfermedades isquémicas de corazón —cuando una arteria se estrecha u obstruye momentáneamente, impidiendo que llegue al corazón un aporte de sangre rico en oxígeno—, que pueden venir por factores tan diversos como la falta de deporte, hábitos alimenticios no saludables, estrés, edad o radiación, en la ciudad ese indicador es de 201. Es decir, el puesto 26 de los más de 8.000 municipios. De cerca están el Alzheimer con 163, trastornos mentales orgánicos, senil y presenil, también por encima de la media con 159.58, o los melanomas malignos de piel con 122.39. También por encima de la media aunque ligeramente se encuentran causas como la úlcera de estómago, tumor maligno de colon, de mama o enfermedades del riñón.
Por contra, entre los datos positivos, hay bajo riesgo de otros accidentes (al menos -44%), paro cardíaco o muerte sin asistencia (-37%), caídas accidentales (-31%) y otras 15 causas de muerte. El índice de muerte en la ciudad por paro cardíaco, muerte sin asistencia y otras causas desconocida de mortalidad se quedan en la mitad de la media, el indicador de fallecimiento por hepatitis vírica está por debajo de lo esperado con un 58.45, insuficiencia cardíaca con un 67 sobre 100, siendo 100 la ratio esperada en una ciudad como la de Elche, y también son pocas las muertes por tumores malignos respiratorios e intratorácicos.
Por sexos, la mayor afección en los hombres registrada es prácticamente la misma que la general, aunque se cuela como tercera causa registrada las enfermedades del sistema genitourinario, hay una ratio de un 33% más sobre lo que sería 'normal'. Superando también la media aunque menos holgadamente están la muerte por envenenamiento accidental por psicofármacos y drogas de abuso o las enfermedades cardíacas reumáticas crónicas. Entre las muertes por debajo de la media, además de la coincidencia en los primeros puestos de las medias por fallecimiento más bajas, están el ahogamiento, sumersión y sofocación accidentales o el SIDA —que como curiosidad, en la vecina Alicante está por encima de la media nacional—.
En lo referido a las mujeres, la media por muerte por enfermedades isquémicas del corazón es incluso mayor que la de ambos sexos en la ciudad, situándose en una ratio de 228, lo que les lleva al puesto 23 de todos los municipios españoles. Al igual que los hombres, también están por encima de la media sus registros por fallecimientos de por enfermedades del sistema genitourinario, y añaden otras propias como enfermedades endocrinas, nutricionales y metabólicas o enfermedades cerebrovasculares. Sin embargo, están por debajo de la media nacional en muertes por causas accidentales, insuficiencias cardíacas, o aterosclerosis. Así pues, un atlas de salud muy interesante al cruzar todos los datos con métodos de Big Data para analizar y extraer conclusiones. Aplicando una brocha gorda y viendo las ratios más altas de los motivos de fallecimiento, se pueden estudiar los motivos: desde el tipo de vida que llevamos y la alimentación, el consumo de drogas, o cuestiones más coyunturales y mundanas como la exposición a tomar el sol durante el verano.