ALICANTE. Este lunes de debate la primera moción de censura del mandato 2019-2023. Será en el municipio de La Torre de les Maçanes, en el que el PP, junto a dos ediles no adscritos, un ex PP y otra ex PSPV, cuatro en total, han presentado un voto de censura para relevar al alcalde, el socialista David Espí, que gobernaba con el respaldo de otro concejal socialista -dos en total- y uno de Compromís. Si no ocurre ningún contratiempo, y fructifica la moción de censura, el popular Cristóbal Sala recuperará la vara de mando que perdió en 2019, cuando el PSOE ganó las elecciones en La Torre con dos votos de ventaja sobre la lista del PP y con el pacto con Compromís, recuperó la Alcaldía.
El voto de censura, más allá de suponer el relevo de un alcalde, en este caso, del PSOE, tiene un significado político más amplío. Es el primer cambio avalado por la nueva dirección del PP de Alicante que lidera Carlos Mazón, y que podría tener más réplicas.
Sin ir más lejos (territorialmente) está el caso de Sant Joan d'Alacant, en el que ahora gobiernan PSOE y Ciudadanos, pero que el PP hace tiempo que tienta al candidato de Ciudadanos, Santiago Román -ex concejal popular- y futuro alcalde si se cumple el pacto de alternar la Alcaldía en 202, que tiene suscrito con los socialistas. El PP ha sondeado esa opción, pero la necesidad de que sea necesaria la participación del concejal de Vox en la suma ha rebajado las expectativas. PP tiene seis concejales; Cs, cuatro y es necesario el voto favorable del único regidor de la formación de Abascal para que fructique, algo que la dirección naranja no estaría por validar.
Ya más lejos, hay otros pactos que no pasan por un buen momento, o alcaldes que gobiernan en minoría y tienen dificultades para aprobar medidas de calado o los propios presupuestos. Pero esas hipotéticas mociones de censura tienen, por el momento, rivales antagónicos. Normalmente, coincide en municipios en los que la relación entre Compromís y PSPV históricamente no ha sido buena.
En Callosa d'En Sarrià, PSPV y Compromís suman mayoría absoluta, pero gobierna el PP porque en su día no se pusieron de acuerdo los dos partidos del Botànic en el pleno de investidura. Desde hace meses que los socialistas buscan convencer a los nacionalistas, que gobernaron la pasada legislatura, para posibilitar el cambio. Pero de momento no hay acuerdo. Es más, en muchas ocasiones, ambos partidos han sumado mayoría, pero sus desavenencias han permitido que el PP mantuviera la Alcaldía. En este caso, el primer edil es el popular Andrés Molina (en la imagen superior).
En El Verger también existen diferencias históricas entre PSPV y Compromís. Ahora gobierna el socialista Ximo Coll (en la imagen superior), pero Compromís y PP suman mayoría. Es más, el pasado 30 de julio, el alcalde se sometió a un voto de confianza para poder aprobar los presupuestos, y la perdió, por lo que hasta el 30 de agosto, populares y valencianistas podrían aprobar una moción de censura, o los presupuestos quedarán aprobados automáticamente. Por el momento, los protagonistas lo ven bastante improbable.
Las otras opciones de mociones de censura pasan por nuevas alianzas entre PSOE y Ciudadanos, que ya gobiernan juntos en Benejúzar, Granja de Rocamora, Sant Joan y ahora en Xixona, pero sólo está la posibilidad de la propia Diputación de Alicante, que da la suma entre los dos partidos, sin intervención de ningún tercero, aunque una opción muy remota, por el momento, debido a las buenas relaciones que mantienen los dos grupos políticos en la institución. Otros municipios en los que podría haber cambios, si un partido rompe el acuerdo que mantiene con el PSOE, y el PP podría aglutinar una nueva mayoría, como podría suceder en La Vila Joiosa (si se suma Cs) o en San Fulgencio (con independientes). Ahora bien si Cs retira el veto a Compromís, el PSOE también recuperar otras plazas importantes.