ALICANTE La ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha asegurado este jueves que "se va a mantener" el trasvase Tajo-Segura, una infraestructura que ha calificado de "esencial", pero que se debe "adaptar al nuevo contexto" con una gestión "más inteligente y sostenible", junto a otras alternativas que permitan una menor dependencia del agua trasvasada.
Así lo ha manifestado durante su intervención en el Foro Alicante que se celebra en la Casa Mediterráneo, donde ha impartido la conferencia 'Transición ecológica e inclusión: un reto y una oportunidad de país', tras la que ha tenido que responder a numerosas preguntas de los asistentes sobre este tema por parte de regantes, agricultores, empresarios y políticos que le han reprochado disminuciones en el agua trasvasada que llega a la provincia alicantina.
La ministra ha explicado que una comisión técnica la evalúa las condiciones del agua en la cabecera del río e identifica el "volumen razonable" para cada una de las aportaciones mensuales. Este "cambio en las reglas del juego supone mejor gestión sin picos que llevaban a situaciones extremas que a continuación hacían descender enormemente la cuota en cabecera", ha defendido.
Según Ribera, ahora se "aplanan" estos picos pero "no hay una disminución del volumen de agua trasvasado" en el cómputo anual, ha asegurado, y a su entender esto "ayuda a abordar con responsabilidad y con un enfoque solidario" las inquietudes aguas arriba y aguas abajo.
Para la ministra, "es importante definir un regímenes de caudales ecológicos en la cuenca del Tajo; nos lo piden sentencias Tribunal Supremo y el derecho de la Unión Europa, es imprescindible para una gestión correcta del agua disponible", ha insistido.
Asimismo, ha defendido que la nueva 'hoja de ruta' para la gestión del trasvase Tajo-Segura 2022-2026 está "adaptada a los nuevos escenarios climáticos", -con episodios extremos de sequía e inundaciones a consecuencia del cambio climático-, y "previendo las necesidades aguas arriba y aguas abajo, sabiendo que la disponibilidad en cabecera ha ido disminuyendo en los últimos años", ha apuntado.
Ribera, que ha asegurado que la nueva planificación busca adaptar el uso de recursos a nuevos riesgos y aprovechar las innovaciones tecnológicas, ha subrayado la necesidad de "pensar en el resto del alternativas de agua" y de hacer un "esfuerzo por aumentar la eficiencia y la circularidad" en el uso del agua.
En este sentido, ha instado a "tener en consideración de todos los volúmenes de agua, procedan de donde procedan", además de "asegurar que la calidad aguas arriba y abajo está garantizada" y de acelerar la inversión en infraestructuras y nuevas formas de energía, como la fotovoltaica. De este modo, ha apuntado, se reducirá la dependencia del agua trasvasada y a su vez disminuirán su coste para lograr precios más "asequibles".