ASPE. La firma de Aspe Grupo Impormotor lleva más de siete años comercializando vehículos eléctricos como patinetes, bicicletas, minimotos, quads y miniquads. Pero no ha sido hasta este 2021, cuando la marca ha apostado por comercializar cuatro modelos de scooters eléctricas matriculables.
Las medidas que ya están proponiendo los gobiernos de los países europeos, a corto y largo plazo, suponen un importante toque de atención al actual modelo de negocio de la industria de vehículos de combustión. Muchas marcas como Impormotor han tomando la iniciativa de reconvertirse y ser de los primeros en entrar en el creciente mercado de vehículos eléctricos.
Así, Daniel Antón, fundador de la marca, reconoce que "es un reto para una marca como la nuestra, con un cliente muy centrado en la competición, entrar con este tipo de producto. Pero somos conscientes de que el futuro va por este camino y queremos ser de los primeros en aportar lo que llevamos haciendo hasta ahora, al mundo eléctrico".
A pesar de que su principal negocio gira en torno a las motos de competición, han decidido dar un paso al frente con estos vehículos para calle, a la espera de que el mercado y la tecnología asociada a ellos, avance lo suficiente como para conseguir precios competitivos.
"Nuestra máxima siempre ha sido la de acercar a todos los bolsillos el mundo del motociclismo; trabajamos con unos márgenes muy justos que nos permiten ofrecer motos de muy buena calidad, a precios muy accesibles. Esto con el mercado de las eléctricas aún es un poco complicado, pero creo que la única forma de poner a prueba al mercado es probando" afirma Antón.
En la marca son conscientes de que lo eléctrico ha venido para quedarse y que el mundo de la competición cada vez más, tiende a lo eléctrico. Y aunque al sector aún le queda camino por recorrer, Daniel tiene claro que "si mañana pusiera en el mercado una Pitbike de competición eléctrica, sé que podría venderla sin ninguna dificultad y hasta podría montar un campeonato en poco tiempo".
Sin embargo, reconoce que a nivel tecnológico aún es difícil llegar a esto, "el mercado de los vehículos eléctricos funciona con otros tiempos, los avances que podemos aplicar en una moto tradicional los podemos aplicar de hoy para hoy, pero en el caso eléctrico aún debe crearse un tejido industrial mucho más consistente para poder trabajar con precios y prestaciones competitivas".
Por el momento, las bicicletas eléctricas infantiles son uno de los productos estrella de la marca. Habrá que estar atentos para ver si este dato se traduce en una futura cantera de pilotos que no hayan conocido los motores de combustión.