ALICANTE. El Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) y el Hércules negocian desde hace una semana un nuevo arrendamiento del estadio Rico Pérez que extienda su vigencia hasta que el primero le ceda la instalación a la Generalitat y esta pase a ser la titular del derecho de propiedad sobre el mismo.
Las partes declinan ofrecer detalles sobre la marcha de los contactos, pero lo que está claro es que por ahora no hay acuerdo y es que la demanda de resolución del contrato suscrito en 2007 por el club y Aligestión Integral no se ha retirado y con ello la celebración de la vista fijada para dentro de un mes: el 17 de noviembre en elJuzgado de lo Mercantil nº2 de Alicante.
La misma fue interpuesta por el administrador concursal de la citada mercantil en 2017 a instancia del IVF: los bienes y derechos de Aligestión salían a subasta libres de cargas, pero el plan de liquidación de la misma facultaba al adjudicatario para decidir sobre cada una de ellas (como es el caso del arrendamiento). Una vez se le confirmó por el juez como ganador de la subasta, el IVF le trasladó al liquidador de Aligestión que no deseaba que siguiera vigente el contrato de arrendamiento del estadio pero, como los lectores de Alicante Plaza conocen, el Hércules plantó batalla judicialmente, contando con el entonces titular del Juzgado de lo Mercantil nº 2 como aliado, pero no con la Sala Octava de la Audiencia Provincial de Alicante. Lo anterior ha hecho que el partido siga a estas alturas jugándose. El interés de la Generalitat en adquirir al IVF el Rico Pérez para desarrollar en él el bautizado como 'Arena Alicante' debería conducir a un acuerdo que ponga fin al litigio de manera amistosa antes de la celebración del juicio, pero al mismo todavía no se ha llegado y de ahí que el banco del Consell no haya trasladado al administrador concursal que retire la demanda. Esto último es lo único que el IVF manifestaba este martes a este medio respecto al asunto.
El Hércules, por su parte, decía desconocer si se había retirado o no la demanda y la Generalitat sigue sin ofrecer dato alguno sobre su proyecto, dando aire al mensaje de la oposición (a la que Ximo Puig pilló con el pie cambiado) de que estamos ante un anuncio electoralista: "Tengo un saco de anuncios formulados por el señor Puig y lo que no tengo es la confirmación de que se haya ejecutado ninguno", decía el alcalde de Alicante, Luis Barcala, hace unos días.
