Clásicos almuerzo de VillalobosELCHE. Estaba previsto que el próximo mes de agosto, Vicente Villalobos Esclapez, regente del emblemático y prácticamente mítico Bar Casa Villalobos, bajara la persiana definitivamente por jubilación tras décadas sirviendo en Elche ese clásico bocadillo de atún junto a encurtidos y un litro de cerveza. Un almuerzo, o casi almuerzo-comida que ha ido pasando de generación en generación y que todo el mundo conoce. Sin embargo, como con tantas otras cosas, la covid-19 se ha llevado al traste los planes. El Villalobos no volverá a abrir.
Aunque con la situación, como tantos otros establecimientos, muchos tenían la inquietud de si volvería a abrir tras el confinamiento, el factor de la jubilación ha acabado por adelantar el cierre, dando al traste con el plan de muchos, que querían despedirse del bar como se merece, con el bocadillo de atún y olivas. Como señalaban en un comunicado de Facebook este martes:
Siento profundamente tener que deciros esto después de 88 años de existencia de nuestro bar en la familia más otros 31 años en la familia Barceló, en total 119 años de historia viva en Elche.
El bar casa Villalobos no volverá a abrir sus puertas para recibir a sus clientes y amigos. Hemos tomado esta decisión por dos motivos: primero porque nos jubilamos mi mujer y yo, y segundo porque debido a las circunstancias que estamos viviendo no merece la pena abrir de nuevo las puertas para dos meses. Espero que nos recordéis con cariño.
Así finaliza un pedazo de historia popular y gastronómica de la ciudad, y cuyo mensaje se ha visto inundado por cientos de comentarios y reacciones por la noticia. Aunque ya se sabía que el negocio no seguiría porque los hijos no quieren seguir con el bar, muchos aún tenían la esperanza de poder darse y rendir un último homenaje. Pero no podrá ser. Junto a Bar Fina o el cierre del original Bar Nóbel, uno de los tres locales clásicos que se van en este 2020.
