Red viaria de la Vega Baja. Foto: APALICANTE. A finales de junio, el conseller de Obras Públicas, Arcadi España, anunciaba en una visita a Orihuela que después del verano se licitaría la redacción del Plan de Movilidad de la Vega Baja. Por su carácter "especial y emblemático" en palabras del conseller, se elaboraría un estudio desagregado y específico para la CV-95 con el objetivo de conocer la viabilidad económica, administrativa y medioambiental para la tan demandada ampliación de esta carretera que conecta Orihuela con Torrevieja. Tres meses después de cuando el conseller previó que se licitaría ambos estudios, el único que ha sido publicado es al que se ha denominado como "Análisis de la movilidad motorizada y necesidad de actuaciones en la red viaira de la comarca de la Vega Baja".
El periodo para que las empresas presenten sus ofertas para la elaboración de este análisis ya está abierto y se cerrará el próximo 28 de enero. El precio base de licitación, con el IVA incluido asciende a 229.900 euros. Las condiciones fijan un plazo de 18 meses para elaborar el estudio. El objetivo según recoge el pliego de condiciones técnicas es el de analizar la movilidad autorizada tanto en el plano privaco como de transporte público, diferenciando entre la generada por personas y por mercancías.
Las conclusiones de este análisis, recoge, desprenderán las propuestas neesarias en la red viaria autonómica que optimicen y "mejoren la capacidad de la red". El análisis deberá contener un estudio del tráfico, tanto en términos de oferta de la red viaria como la demanda actual y la proyección esperada dentro del periodo de vida útil. Otro de los aspectos que deberá contener será la definición de alternativas de actuación y su valoración.
La comarca de la Vega Baja cuenta, como ejes principales de red viaria con la autovía A-7, la auotpista de peaje AP-7 (la concesión se otorgó para 50 años, concluiría en 2048), la N-340 y la N-332. Respecto a esta última, que discurre por la costa, Torrevieja viene reclamando desde hace años la duplicación de carriles en el tramo que queda pendiente. En octubre, el alcalde de la ciudad, Eduardo Dolón, mostró su indignación al comprobar que los Presupuestos Generales del Estado 2021 solo incluía una partida de 100.000 euros para la redacción del proyecto, y no se contemplara ningún presupuesto para los años 2022, 2023 y 2024.
Otro de los ejes clave en la comarca, y de titularidad autonómica, es la CV-91 y la CV-95. Esta última es un reclamo, tanto por el Ayuntamiento de Orihuela como el de Torrevieja, desde hace años. La insistencia por la necesidad de una actuación inmediata ha sido constante. Las promesas del Consell también cayeron en saco roto. En septiembre de 2018, en una reunión entre la Conselleria y la Cámara Orihuela, la entonces consellera, María José Salvador se comprometió a desbloquear el proyecto de la CV-95 e incluir una partida en exclusiva en el presupuesto de 2019 para llevar a cabo el proyecto de esta carretera.
Lo único que recoge el proyecto de presupuestos autonómicos para 2021 es una partida de 140.000 euros anunciada como "mejora de la seguridad en la intersección de la CV-95 con la CV-945". De forma genérica incluye una partida de 6,5 millones de euros para "infraestructuras públicas Vega Renhace" y 50.000 euros para el Plan de Movilidad comarcal. El primer borrador del Plan de Acción Territorial de la Vega Baja (PAT) ya identifica la necesidad de hacer mejoras en esta carretera.
También es un reclamo por parte de la ciudadanía. La forma más clara que se ha manifestado ha sido a través del proceso de participación del Plan Vega Renhace. En el eje de desarrollo económico, la propuesta de solución a la CV-95 fue la más votada. En las conclusiones de las medidas propuestas por este plan del Consell se incluyó calificándolo de urgencia alta.
La mejora en la CV-95 no es la única reclamación del alcalde de Orihuela y el de Torrevieja. Reivindican la necesidad de la creación de una conexión ferroviaria entre ambas ciudades. En noviembre presentaron el proyecto del "Trazado Ferroviario Orihuela-Torrevieja/Orihuela Costa" elaborado por el departamento de Ingeniería Civil de la Universidad de Alicante, y a encargo de ambos consistorios.
El proyecto está presupuestado en 277,6 millones de euros. La propuesta proyecta dos opciones en cuanto a estación de origen y destino en la costa. Una opción sería antes de llegar a la urbanización Los Balcones de Torrevieja, junto a la AP-7. La segunda y más costosa, requeriría el soterramiento de las vías 1,5 km más desde el punto anterior hasta llegar al entorno del Hospital Universitario de Torrevieja. La Estación Intermodal y de Alta Velocidad de Orihuela Miguel Hernández sería el punto de partida.
En el trayecto, el proyecto contempla dos opciones. En la primera sugiere un trayecto que discurriría entre los núcleos urbanos de la pedanía oriolana de Arneva y Hurchillo. La segunda opción intersecta con la CV-925 discurriendo entre la pedanía de Hurchillo y el núcleo de Bigastro. Ambas opciones confluirían en una de las dos estaciones intermedias propuestas, Bigastro-Jacarilla y San Miguel de Salinas.
En la presentación del proyecto, ambos ediles anunciaron que trasladarían la propuesta tanto a la administración autonómica como central para que lo sometan a valoración.
