VALÈNCIA (EFECOM). La Comunitat Valenciana fue donde mayor número de embargos de viviendas se llevaron a cabo en 2020, con 4.643, de los que 1.917 fueron en viviendas de personas físicas y 2.726 a personas jurídicas. La valenciana también fue la región con mayor número de certificaciones por ejecuciones hipotecarias sobre el total de fincas, con 7.579.
En el conjunto nacional las ejecuciones hipotecarias en viviendas habituales se redujeron en 2020 un 38,8 % en comparación interanual, un año marcado por la pandemia del coronavirus. Según los datos provisionales publicados este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), las ejecuciones hipotecarias (embargos de una propiedad para su venta tras el impago de un crédito) iniciadas a lo largo del año en los registros de la propiedad sumaron 34.750.
De esa cifra, 9.407 fueron viviendas de personas físicas y dentro de ellas 7.367 fueron viviendas habituales en propiedad (un 37,4 % más que en 2019), en tanto que 2.040 no eran la residencia habitual de los propietarios (un 0,9 % más). Asimismo, el 16,5 % de las ejecuciones hipotecarias realizadas sobre viviendas en 2020 eran nuevas y el 83,5 % usadas.
El número de ejecuciones hipotecarias sobre viviendas nuevas disminuyó un 51,6 % respecto al año anterior y el de usadas bajó un 25 %. Según explica el INE, la especial situación que se vivió en 2020 por la crisis sanitaria de la covid-19 provocó que la evolución del número de inscripciones de certificaciones por ejecuciones hipotecarias iniciadas en los registros sobre viviendas fuera distinta en los diferentes periodos del año.
Durante los meses que duró el estado de alarma para la gestión de la situación de la crisis sanitaria, la atención al público en los Registros de la Propiedad se realizó exclusivamente mediante correo electrónico o por teléfono, con lo que las inscripciones bajaron notablemente, sobre todo en el segundo trimestre (-64,3 %). Con la desescalada y la llegada de la "nueva normalidad" se produjo una progresiva recuperación del número de certificaciones por ejecuciones hipotecarias, con lo que, en el tercer trimestre, la cifra aumentó en un 56,3 % en comparación con el segundo.
Entre septiembre y diciembre se iniciaron 10.010 certificaciones por ejecuciones hipotecarias, lo que supone un 15,7 % más que en el trimestre anterior y un 22,2 % menos que en el mismo periodo de 2019. Volviendo a los datos del conjunto del año, las comunidades autónomas con mayor número de certificaciones por ejecuciones hipotecarias sobre el total de fincas fueron la valenciana (7.579); Andalucía (6.257) y Cataluña (6.181).
Por el contrario, las cifras más bajas se registraron en Navarra (116), el País Vasco (178) y Extremadura (375). El mayor número de embargos se produjo en la Comunitat Valenciana (4.643), seguida de Andalucía (3.538) y Cataluña (3.492), en tanto que la Comunidad Foral de Navarra (61), el País Vasco (102) y La Rioja (148) registraron las menores cifras