ALICANTE. La Cámara de Comercio de Alcoy tampoco tendrá que celebrar votación para elegir a los miembros del Pleno. Tal como sucedió en el caso de Orihuela, los empresarios alcoyanos han logrado pactar tantas candidaturas como asientos disponibles para cada grupo, aunque en este caso no hubo suficientes aspirantes para el de Industria (cuatro aspirantes para siete plazas), por lo que se sorteó la entrada de tres empresas más, que han aceptado.
Así, la Cámara alcoyana ha publicado la resolución de la junta electoral por la que quedan proclamados los nuevos vocales del pleno: un total de 20 empresarios, a los que se sumarán los que designe la CEV y aquellos que entran por razón de su aportación económica. Así, solo habrá que votar para terminar de completar el Pleno en el caso de la Cámara de Alicante, aunque solo en dos subgrupos y para elegir dos de los 40 vocales elegibles, como ha contado este diario.
Con todo, en el caso alicantino hay quizá menos incertidumbre que en el alcoyano en cuanto al nombre del próximo presidente. Una vez garantizada su entrada en el pleno, nadie duda que Juan Riera (el único que ha anunciado su intención de optar al cargo) será quien reciba el respaldo de la mayoría de los vocales, aunque para ello probablemente tenga que negociar una vez más con el sector crítico de Facpyme y Fempa. En cambio, en Alcoy el nombre del próximo presidente es toda una incógnita, toda vez que el actual, Enrique Rico, ha decidido retirarse. En cualquier caso, deberá ser uno de los 20 vocales ya elegidos.
[Consulte aquí el listado de vocales proclamados para la Cámara de Alcoy]
La Cámara de Alcoy, como la de Orihuela, ha atravesado momentos complicados por la caída de los ingresos, aunque no llegaron a ser tan dramáticos como en su 'hermana' de la Vega Baja. Hace un mes, la Cámara de Alicante le permitió también empezar a prestar servicios en la comarca, fuera de su demarcación (que es la ciudad de los puentes), aunque bajo supervisión y con el visto bueno previo de la Cámara de Alicante. Un convenio de colaboración que permitirá a la entidad local captar algunos ingresos adicionales.