ELCHE. La lenta y compleja tramitación para la ampliación del Parque Empresarial sigue su curso. De momento, el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) ya ha publicado la versión inicial de la modificación estructural del Plan General relativa a dicha ampliación, que tendrá lugar en el nuevo sector E-49. Durante los próximos 45 días, se abre un periodo de alegaciones y consultas de las administraciones públicas afectadas y personas interesadas en esta modificación. También los planes de estudio de movilidad, estudio acústico, estudio de inundabilidad y estudio de patrimonio cultural. Precisamente, sobre este último se indica que se va a proteger el patrimonio que está dentro del perímetro de la ampliación del polígono.
En ese sentido, con la alternativa de expansión elegida, una de las afecciones a tener en cuenta, más actual que nunca por otra parte, es la que recae sobre el patrimonio local, en este caso, la Casa de la Mina, también conocida como la Torre de Ibarra; un conjunto de edificaciones que formaban el núcleo de una finca dedicada al recreo y a la producción agrícola. En la ordenación propuesta se propone integrar este elemento al entorno, de esta manera se permite conservarlo y protegerlo y aumentar su visibilidad, pues hay que tener en cuenta que es un inmueble protegido por el Plan Especial de Protección de Edificios y Conjuntos del Término Municipal de Elche, perteneciente al PGOU de 1998. Su grado de protección es ‘ambiental’, en el que destacan como elementos principales el porche, las fachadas —donde recae su singularidad— y el esquema organizativo de la vivienda.
En los edificios que cuentan con este grado de protección, se establece que “se permitirán todos los tipos de obra, siempre que se adapten a la normativa apuntada en las fichas específicas de cada edificio”, y en otro artículo se explica que “podrán sustituirse íntegramente estando la composición, color y materiales de la nueva fachada, condicionados a lo que se indique en las fichas particularizadas”. Según Alebus, la empresa encargada de hacer el estudio de patrimonio cultural —la misma que realiza las catas del Mercado Central, de la que algunos arquitectos han mostrado discrepancias por el trabajo realizado—, señala que esta edificación supone “un valioso ejemplo de las casas de campo ilicitanas construidas entre la segunda mitad del siglo XIX y principios del siglo XX”, y que especialmente la torre y la capilla hacen ver que el inmueble goza de un innegable valor patrimonial, “que parece necesario conservar”.
La propietaria de la finca, Pimesa, ya ha señalado que su intención es preservar la integridad del conjunto, por lo que la protección “parece garantizada”. En el caso de que en el proyecto final se decida no incluir alguna de las edificaciones que no forman parte del inmueble principal (cochera, viviendas de caseros o balsas de recreo), será necesario proceder previamente a su descripción pormenorizada y a la redacción de un documento que caracterice minuciosamente estas construcciones. Asimismo, hay otros elementos de valor encontrados, aunque no gozan de protección específica. En las inmediaciones de la finca de la Casa de la Mina se encuentra el “parat” o azud, situado frente al “portell” del Hondo de la Mina. Dado que está parcialmente enterrado y hay vegetación, la construcción no es totalmente visible, por lo que se plantea como una prioridad, antes de abordar la ordenación de la zona, la documentación completa de este bien patrimonial. Se habrá de redactar un proyecto de intervención en el que se incluya la limpieza y excavación con supervisión arqueológica de los rellenos que impiden la visualización completa del parat. Los datos obtenidos se enviarán a la Dirección Territorial de Patrimonio Cultural de Alicante.
El otro elemento, propiedad del Ayuntamiento, es un yacimiento arqueológico, “evidenciado por la presencia de materiales arqueológicos en superficie”. Para él se propone la realización de sondeos arqueológicos previos a la ejecución de cualquier movimiento de tierras en el área de dispersión de materiales arqueológicos descrita. En el caso de que se compruebe la existencia de yacimientos, se valorará la necesidad de efectuar la excavación en extensión. Completan el conjunto de hallazgos otros bienes etnológicos de menor entidad, entre los que se cuenta una pequeña edificación relacionada con la explotación agropecuaria de la zona, un pozo y una balsa de acumulación de agua para riego. Se propone la limpieza y documentación de estos bienes patrimoniales para la obtención del modelo 3D mediante fotogrametría, así como la redacción de un informe en el que se describan de manera exhaustiva, de forma que, con anterioridad a la ejecución de las obras previstas, se recabe la totalidad de los datos posibles que definen estas construcciones.
Asimismo, el informe también tiene en cuenta varios factores en diferentes ámbitos. Para evitar inundaciones, se van a crear dos áreas de laminación situadas en los extremos Este y Oeste, un canal rectangular con vertedero lateral en margen izquierda que permite repartir los caudales procedente de la serra Llarga hacia las dos áreas de laminación y dos encauzamientos (superficial o soterrado) desde la ubicación del vertedero lateral hasta las zonas de laminación situadas en los extremos Este y Oeste. Siguiendo también con el impacto medioambiental que puede tener la ampliación del polígono, esta versión inicial señala que “en el ámbito específico en el que se pretende implementar la modificación del Plan General no existe elemento alguno de la infraestructura verde del territorio afectado por el mismo”. Además, explica que en la futura ubicación, de acuerdo con la distribución del terreno, permite un impacto paisajístico bajo.
Sobre el modelo urbano, el área de nuevo crecimiento se ordenará de forma que se pueda materializar una ordenación flexible que permita disponer de parcelas de diferente tamaño y/o configuración que permita, en su caso, la implantación de actividades industriales singulares. En la integración paisajística, la implantación de usos en el territorio preservará la calidad de los paisajes y su percepción y las construcciones se deberán adaptar al medio en el que se sitúen. Además, se garantizará la funcionalidad de la infraestructura verde con el diseño de los espacios públicos y el viario, así como el mantenimiento de las principales vistas y perspectivas que caracterizan el paisaje.
Otro aspecto importante es que la ordenación de la edificación y de su uso se ajustará a criterios de eficiencia energética, de reducción de emisiones y residuos, y a la implantación de las energías renovables, algo que se está trabajando de forma más amplia en el Plan Estratégico. Asimismo, se establecerán plazos efectivos de desarrollo de los sectores de nuevo desarrollo previstos, por lo que se trata de una actuación integral que mira también hacia el futuro del Parque no sólo a nivel económico, también tecnológico, medioambiental y sostenible.
En cuanto a la propuesta de ampliación elegida, abarca un ámbito territorial de una superficie aproximada de 569.651 metros cuadrados y generaría una edificabilidad de aproximadamente 304.000 m², un menor consumo de suelo, así como una menor afección a edificaciones residenciales. La oferta de techo edificable se situaría en torno a los 300.000 m². Además, tal y como se aprobó en el pleno de marzo, se suspende la tramitación y el otorgamiento de licencias y autorizaciones para la ejecución de obras e instalaciones de nueva planta, ampliación y reforma, así como las licencias de segregación y la tramitación, en lo que corresponda al Consistorio, de expedientes de declaración de interés comunitario, en el ámbito delimitado para la ampliación de Elche Parque Empresarial.
Esta versión inicial sobre la modificación para la ampliación del Parque Empresarial, así como los diferentes estudios, ha sido realizada por la bilbaína IDOM, empresa internacional de servicios profesionales de consultoría, ingeniería y arquitectura que ha realizado 30.000 proyectos como los proyectos de alta velocidad en España, Polonia, Brasil, los metros de Ho Chi Minh, Hanoi y Bogotá, el Parlamento Europeo en Estrasburgo, Telescopio Solar de Tecnología Avanzada de Haleakala en Hawai o la actual construcción del metro de Riad en Arabia Saudí.