ALICANTE. El Principal recibe a uno de los grandes. La célebre obra literaria Moby Dick de Juan Cavestany, basada en la novela de Herman Melville, llega al Teatro Principal de Alicante con el barco ballenero más famoso del mundo, conducido por el aclamado actor Josep María Pou, que vuelve a Alicante después del rotundo éxito cosechado en Sócrates bajo la dirección de Mario Gas. Completan el elenco Jacob Torres y Oscar Kapoya, en esta adaptación de Andrés Lima, destacado director con más de 20 obras a su espalda. Como actor hemos lo hemos visto en trabajos tan destacados como Los lunes al sol, Juana la loca o El viaje de Carol. Actualmente también podemos verle actuando en la serie de televisión La catedral del mar junto a nuestros protagonista, Josep María Pou.
Pou interpreta al capitán Ahab, un ser que evidencia la obsesión humana que va más allá de la razón capaz de consumir la voluntad y eliminar cualquier elemento bondadoso del alma. El público se adentra junto a él en la trepidante aventura hacia la búsqueda de la ballena más popular en la literatura internacional: Moby Dick. De esta obra se han realizado múltiples adaptaciones, algunas más cercanas al original que otras. Este montaje está inspirado en la solitaria figura de Ahab y su lucha contra la ballena, e invita al espectador a hacer un viaje a las profundidades de la locura de un hombre capaz de todo para satisfacer su obstinación. Un espectáculo total, valiente e innovador.
Por otro lado, el grupo musical valenciano Capella de Ministrers, dirigido por el violoncelista y musicólogo Carles Magraner, muy reconocido en su campo, llega el domingo 18 de noviembre al escenario del Teatro Principal de Alicante. Con un viaje al Quattrocento, uno de los periodos más importantes del panorama artístico europeo, en el que ofrece su interpretación de música española anterior al año 1800, haciendo uso de técnicas pertenecientes a cada una de las épocas que trata y salvando así el patrimonio musical español.
El Quattrocento se sitúa a lo largo de todo el siglo XV y es la cuna del Renacimiento. En la Italia no unificada de ese siglo el arte, la danza o la música representaban una ostentación del poder de los gobernantes ante otras regiones. Se vivió un renacer del teatro antiguo y también de la danza. Muchas veces los príncipes y cortesanos eran al mismo tiempo actores, músicos o bailarines en las representaciones o farsas.
El grupo musical pasa por esta época a través de Sara Águeda al arpa, Robert Cases a la guitarra renacentista y a la viola de mano, así como David Antich a las flautas. Juntos crean una atmósfera que conduce a un mágico viaje en el tiempo a través de la música. Capella de Ministrers acaba de recibir el Premio al Mejor Disco de recuperación del Patrimonio Musical, que otorga el Institut Valencià de Cultura en los Premis Carles Santos.