ALICANTE. Optimizar el uso del agua y regenerarla, comprender los residuos como recursos y buscar soluciones innovadoras para reducir la huella de carbono de la industria y avanzar en una transformación ecológica. Son las misiones de la multinacional francesa de gestión del agua, residuos y energía, Veolia, con presencia en España. Su director de Desarrollo en Levante, José Javier Celdrán, ha estado presente en el II Foro Internacional 'Ciudades y turismo sostenible 5.0' que organiza la plataforma Connect Clean, en colaboración con Distrito Digital y ha hablado con Alicante Plaza sobre los planes de la multinacional en el país, del potencial de la provincia alicantina en materia de eficiencia energética, de las oportunidades de generar biogas para no depender de otros países o de la importancia de descarbonizar, entre otras claves para un futuro medioambiental sostenible.
¿Cómo deben ser las ciudades del futuro, según Veolia?
Tenemos que conseguir que las ciudades sean habitables y para ello, debemos trabajar en diferentes vectores. Nuestro sector tiene que ver con la energía, con el agua y los residuos. Por lo tanto, algo importante es optimizar el uso del agua, tanto en la potabilización como en la depuración. En la depuración se debe poder regenerar y darle un nuevo uso para contribuir a una economía circular del agua. En la parte de residuos, desde Veolia nuestra visión es comprenderlos como un recurso. Se le puede volver a dar un uso en el ciclo técnico. Fundamentalmente, en el uso del plástico para poder reciclarlo y darle un nuevo uso, tenemos una planta en la que gestionamos 40.000 toneladas de PET reciclado al año en Extremadura. En cuanto a residuos orgánicos, se debe generar oportunidades. Hay dos líneas de trabajo muy diferenciadas. Una es la de poder generar biogás con esos residuos, o bien compost para la mejora de los suelos.
¿Cuáles son los planes concretos de Veolia en 2022 de cara a conseguir la sostenibilidad en las ciudades?
En la parte del agua, el tratamiento de aguas industriales y poder tratarlas. También, regenerarlas. Por ejemplo, se hace mucho en la región de Murcia, que se regenera para regadíos u otros usos. También trabajamos en el enfoque a los residuos y la energía. La eficiencia energética y su gestión es esencial. Estamos muy enfocados en optimizar el uso de energía en la parte pública y privada, en las industrias y poder reducir su huella de carbono.
Ante un panorama en el que cada vez son más frecuentes los cortes de suministros de agua -en verano- o el aumento del coste energético ¿Cómo deben actuar las empresas para que no suceda?
No hay una única respuesta. Como en cualquier aspecto de la vida, el trabajo de equipo lo resume y no hay una solución única para cada problema; las soluciones son mixtas y se deben combinar. Las empresas de gestión de recursos apuestan por la transformación ecológica y en Veolia lo hacemos de forma disruptiva. Buscamos soluciones innovadoras que nos permita avanzar más rápidamente y muy enfocados en la reducción de la huella de carbono. Es una de nuestras líneas de trabajo.
¿Cómo se puede reducir es huella de carbono?
Debemos utilizar energías que nos permitan reducirla. El uso de biomasa – la forestal, que viene de residuos de madera-. Además, aprovechar los residuos para generar biogás nos hará menos dependientes de gas de otros países al producirlo con nuestros propios recursos. Al mismo tiempo, reduciremos nuestro nivel de residuos y envío a los vertederos. Estos aspectos harán que la propuesta funcione en el futuro.
En una provincia como la de Alicante, con problemas hídricos, con una gestión de residuos en transformación ¿Por qué campos podría apostar a la ahora de conseguir la eficiencia energética?
Alicante tiene el potencial del sol, evidentemente. Es una de sus bazas, pero muchas veces nos centramos en la fotovoltaica como única solución y hay más. La zona sufre lluvias torrenciales y a veces episodios muy serios como la Dana de 2019. Ha habido muchas zonas afectadas por las lluvias torrenciales y Xixona y La Carrasqueta fue una de ellas. El agua se llevó muchísimos árboles por delante. Con muy buen criterio, el Ayuntamiento del municipio sacó la gestión de ese arbolado que si se quedaba en la zona eran un peligro para el monte. Veolia realizó la recolección de esos árboles muertos y usó ese material para generar energía térmica. Hay otros recursos naturales. El agua es otro vector importante. No está en Alicante, pero un muy buen ejemplo es la EDAR de Tarragona. Es la estación regeneradora de aguas del Camp de tarragona. Es una de las joyas europeas a nivel de regeneración de aguas. Es una estación que permite darle un uso a agua residual que llega de otras poblaciones, se trata y se permite llevar a los polos industriales. Alicante tiene sus polos industriales que también podría utilizar este tipo de iniciativas. Creo que nos permitiría tener menos dependencia de agua superficial para uso industrial.
¿La colaboración entre industria y administraciones ha de ser uno de los motores?
Cada parte tiene su trabajo. La administración, con una buena regulación y normativa que permita impulsar proyectos, agilizarlos y con una burocracia que no entorpezca los procesos, además de apostar por las líneas europeas de descarbonización, es clave. Hay que trabajar en conjunto desde administración y empresa para llegar a los objetivos ambientales de 2050.