ALICANTE. A una racha negativa de nada menos que 707 días puso fin Jona Mejía este domingo en el Municipal de Cornellà.
Con su tanto en el minuto 12 de partido, el delantero del Hércules daba carpetazo a una sequía goleadora que se extendía por 23 meses y ocho días. Jona, refuerzo de los blanquiazules en el mercado de invierno del curso pasado, había anotado su último gol en partido oficial en la primera vuelta de la temporada 2017/18, concretamente el 19 de noviembre de 2017, cuando defendía la camiseta del Córdoba.
Desde entonces, habiendo incluso cambiado de aires (jugó cedido en el Lugo la primera vuelta de la Liga 2018/19), permanecía inédito, una situación que le llevó durante el verano a estar ya en la rampa de salida del Hércules pese a tener dos años más de contrato: el entonces técnico blanquiazul, Lluís Planagumà, no contaba con él pero la oposición del director deportivo, Javier Portillo, provocó que continuara pese a que contaba con una oferta del UCAM que se hacía cargo de buena parte de la ficha del jugador.
Titular en las dos primeras jornadas con Planagumà, este domingo tenía por primera vez un sitio en el once inicial desde que Jesús Muñoz se había cargo del banquillo. Una confianza que el futbolista malacitano correspondía de la mejor manera, si bien es cierto había hecho méritos en lo que llevamos de curso, tanto con el moteño como con su antecesor, para ver puerta.
El tanto de Jona, por cierto, llegaba justo después de que en el anterior encuentro, en el añadido del mismo, Carlos Martínez se negara a cederle el esférico para ejecutar una pena máxima.
"Han sido tiempos jodidos"
El futbolista no escondía tras el partido de Cornellà su satisfacción tanto por marcar como por la victoria del equipo. En declaraciones a la Cadena COPE, Jona aseguraba haberse quitado "un lastre importante"; decía haber vivido "tiempos jodidos" y confesaba que se acordó de su hijo, mujer y madre cuando marcó.
"Estamos contentos por la victoria, son tres puntos en un campo complicado (...) hemos sabido sufrir, estamos cambiando la cara", señalaba Jona que no escondía que el gol había tardado en llegar, que "al delantero le dan vida los goles" y que su receta es "insistir, no rendirse nunca".
El futbolista, que en Cornellà dispuso de una segunda ocasión para marcar (un disparo desde fuera del área que sacaba un defensa) y se retiró a la hora de partido por una sobrecarga, insistía en que su deseo es devolver con goles a los aficionados su cariño.
Sus números en el Hércules
El curso pasado Jona participó en 12 encuentros (estuvo sobre el terreno de juego 510 minutos), mientras que en el presente ha jugado en diez (365 minutos en el césped).
