Inma de la Concepción

Tranquilos. No se han perdido mucho. Nostalgia. Un bastonazo de Juan Carlos I a la espinilla de Felipe González. Letizia Ortiz aplaudiendo exorbitantemente excitada y sobreactuada. La entrega del Oscar Constitucional. Las niñas, muy bien gracias, vestidas casi igual, exhumadas de un cuento de navidad de Charles Dickens. 4 Reyes, 4 Padres Fundadores y el Mesías: Pablo Iglesias.  Casi nadie se acordó -ni falta que hace- de Adolfo Suárez y mucho menos de Santiago Carrillo. Ni, claro, de nosotros. Sólo faltaba José Luis López Vázquez gritando descuadrado en la cabina. Aunque sin comparación, qué bien les salen las abuelitas y los entierros a los ingleses. En Alemania Angela Merkel deja -intentando sujetar al neofascismo Bannon- a su favorita AKK: Annegret Kramp-Karrenbauer. Aunque quienes bordan de verdad los funerales son los estadounidenses. Francisco Franco, por la gracia de Dios. Amal Clooney, en la entrega de premios de la Asociación de Corresponsales de las Naciones Unidas en Nueva York, acusó a Donald Trump de dar “luz verde a los regímenes autocráticos que encarcelan y matan a periodistas”. Sancta Shakira, pobreta meua, está en apuros. Han detenido a Meng Wangnzhou, la vicepresidente de Huawei. Y a Carlos García Julia, el asesino de la matanza de Atocha. Manuela Carmena se sale en Instagram con su receta de magdalenas. 

Luis Barcala es, así como un servidor, muchísimo mas fan de de la Inmaculada Concepción que de la Constitución. Ni comparación. Aún así, el señor alcalde se perdió los actos matutinos del patrón de la ciudad de Alicante y asistió en son de tregua navideña -media carga de trabuco acampanado de alarde- al Teatro Principal. El acto y los discursos del Consell, ideales de la muerte. Qué fruición da ver a Carlos Castillo desmarcándose del PP indígena y asintiendo con la gallardía de un monaguillo preconciliar al “constitucionalismo militante” de Ximo Puig. Al president le echaron de menos, para pitarle, lógicamente, en el Congreso de los Diputados. Y se convirtió en pura magia ¡plim! periodística en una entrevista que le hizo Carlos Arcaya -joder es el mejor que tenemos- en Radio Alicante. Recemos a la nostra mareta Mónica Oltra por el millón de À punt y la limosna de las quinielas. César Sánchez siempre distante pensando en el más allá. Fundando la Nueva Generalitat Valenciana en Calp. Isabel Bonig lo celebró recién salida de la peluquería comiendo con su familia y regalándonos un video prenavideño tipo sobremesa familia real. Pero más dulce e impostado. Sin bramidos ni cuñados. Ni un Urdangarín ni el “sutil” Padre de la Cosa, Miquel Roca. Iluminación, cocina y maquillaje celestial. En nombre del padre, del hijo y del Espíritu Santo. Amén.

5 bous embolats. Quim Torra acaba de reinventar la cuaresma, el ayuno de despacho presidencial. Y acaba de romper filas, de acabar, él solito, con lo poco que le quedaba del ejército nacional catalán. España no acaba de digerir la salida Vox -tatatachán- Nacho Vidal de -el lado oscuro del PP- la tarta. Los socialistas en general, Susana Díaz -la clave del enigma de la catedral del futuro sacramental del socialismo español- y Pedro Sánchez en particular, mandados al rincón de matar, coño, con perdón, con el teclado, de pensar. José Luis Ábalos. Silvie Vartan. La crisis de representatividad de la democracia liberal. La desigualdad. La abstención. El amor y el odio. La guerra cultural. El precariado de bici y patinete. La red. El desplome de la clase media. La verdadera alternativa estructural al populismo post-capitalista y por ahí seguido. Señor, en tus manos encomendamos nuestro espíritu.

Rodrigo Rato, que estudió en Berkeley, California y como su padre elitista hasta en la cárcel, se evita a sí mismo: Luis Bárcenas. El contable del timador. Paul Newman y Robert Redford. El Golpe. Vicente Climent, maestro de periodistas y mucho más, nos informa en ES.diario que uno de los De Rosa, se postula para alcaldable en el cap i casal. El del negocio Hospital de la Ribera made in USA, Alberto, no. Ni tampoco Carmen, la hermana que dirige la sede del PPCV casadista: el Ateneo Mercantil de València. Es -sorpresa- Fernando. Sí, el que le dio las llaves con 23 años de la sede del PP de la Avenida del Oeste de València a Paco Camps. Volver a empezar. Garci. Daos fraternalmente la paz.

EU Alacant dividida a muerte entre la secta simonista -Kasi Meritos del planeta Neonatitlan- y los comunistas Cantueso Oro de Miguel Ángel Pavón. Xavier López, de Podem Alacant, no emite. Francia arde. Barcala apaga los barrios y más chulo que un 8, inunda, inaugura una plantà masiva de belenes. Aunque el mundo está paralizado, desde el tráfico, las compras y la mismísima Navidad esperando que se despeje la incógnita del candidato o candidata de los socialistas alicantinos. Si sale barba San Nicolás. Y si no, la Purísima Concepción. La izquierda aborigen es la primera improvisación de Arkano en la terraza de su casa de vinagre helada en La Colmena. Alicante Distrito Digital.

Elsa Belmonte y Nerea Martínez van preguntando a quién y cómo le han regalado el chiringuito navideño de Papa Noel. Seguro que el teniente fiscal José Llor lo investigará a fondo. Incluso preguntando al alcalde. Natxo Bellido, otro constitucionalista perdido e indulgente, le perdona lo de los 5 euros por la foto con Santa Claus. Manuel Alcaraz es, también, mas virginal y mariano confeso hasta la beatitud papal y eterna que Barcala, pero menos inmaculado que el que suscribe. Y como es sabido, la constitucionalista Santísima Trinidad de la alicantinidad bien entendida bendice -y abre el Camino- a Alacraz para ser alcaldable por Iniciativa. Hospitalidad es nuestra forma de ser mediterráneos.

Resuena el agua en el Pozo Hondo. Rescoldos. Recogemos la ropa de los juncos antes del rocío. El viento trae frio. El olor del horno de arriba. Nuestras dos hijas Andrea y Glorita ríen, gritan a las estrellas y saltan tirándose agua, media Russafa, renos, pedradas y canciones de navidad. Echamos de menos a Ingrid y a Olga. La Fuente Larga se ilumina. Miquel González, mi nunca bien ponderado ni bien pagado Herr Direcktor de Alicante Plaza, me susurra a lo bestia, verdaderamente enfadado: “Son ya casi las seis. Y, querido, hoy librabas”. No. No saldrá este artículo dedicado a mi amor. Inma De la Concepción.