ALICANTE. La forma en la que las empresas tratan de llegar a los consumidores y convencerles de las bondades de sus productos y servicios está en plena revolución digital. Y, en esa nueva tendencia, los influencers tienen un protagonismo inmenso. Los 'influyentes', como su propio nombre indica, son usuarios de redes sociales con grandes y fieles comunidades de seguidores sobre los que pueden tener una influencia. Y, en esa relación, las marcas y empresas se cuelan como intermediarias.
Estos usuarios de redes, cuyos potentes perfiles son una referencia de opinión, tendencias y hasta gustos para miles de personas, están desde hace ya algunos años en el centro de las estrategias publicitarias de muchas empresas. Y las que están presentes en la provincia de Alicante no son ajenas a ellas. Vincular un producto determinado o un servicio concreto a su imagen puede hacer que sus muchos seguidores lo vean como opción a la hora de buscar algo para sí mismos, por lo que esa relación ha ido creciendo y retroalimentándose por todas las partes.
En este ecosistema de influencers que destacan en las redes sociales, y empresas que los buscan para trabajar con ellos, Alicante está ganando cada vez una mayor cuota de mercado. La capital de la Costa Blanca se establece como referencia a nivel nacional, tras las grandes urbes españolas, de una tendencia publicitaria y empresarial a la que cada vez se suman más agentes, desde los propios influencers que crean nuevos nichos hasta empresas que los buscan y, entre ellos, agencias que actúan como intermediarias.
Una de las influencers ubicada en Alicante con mayor tirón en las redes sociales es Isabel Delima. Es conocida por su perfil Vida Fit y Activa, en el que congrega a más de 192.000 personas con su contenido de gastronomía saludable, nutrición y estilo de vida. "Al principio ni me lo planteaba, simplemente fue fluyendo de manera natural y, cuando vi que mi perfil tenía potencia y le gustaba a la gente, le puse realmente todo mi esfuerzo y energía", cuenta Delima sobre su transición de usuaria corriente a referente digital de opinión.
"La clave está en generar contenido interesante: parece fácil, pero hay muchísimo trabajo, tiempo y dedicación detrás de cada publicación", cuenta. "No es solo cuestión de seguidores y likes", asegura Aarón Fernández, conocido influencer y blogger alicantino que se mueve en el mundo de la moda. En su caso, tal como cuenta a Alicante Plaza, su faceta como diseñador de moda y la concurrencia en distintos certámenes y concursos del sector le ayudó a crecer en popularidad además de, por supuesto, "trabajar duro y convertirse en experto en un sector".
Para otras personas, como nos cuenta la también influencer de moda y lifestyle Ana Guardiola, "ser influencer es algo que no decide una misma". "En 2014 tenía ocho seguidores y me apasionaba el mundo de la moda y la fotografía. Subía fotografías con looks y ayudaba a la gente a encontrarlos", cuenta, además de destacar una de las facetas por las que tantas empresas confían en los influencers: "En las redes sociales se puede conocer a gente maravillosa y ayudarles en muchos aspectos, desde un vestido para su graduación a un restaurante para comer bien".
En el mundo de los influencers, muchas empresas dedican tiempo y recursos a buscar los perfiles que más se ajustan a su público y objetivos. Las propias empresas, o agencias de comunicación en su nombre, son las que suelen llamar a la puerta de los influencers para ofrecerles trabajar para ellas. Aunque, tal y como cuenta Aarón Fernández, también hay algunos que buscan a las empresas para las que les gustaría trabajar.
"Hay muchos productos y firmas en el mercado a los que me gustaría acceder", admite Fernández, que además de recibir propuestas también otea el mercado en busca de aquellas compañías con las que más se identifica. "Muchas marcas aceptan mis condiciones cuando les escribo porque les gusta mi perfil", sostiene, que está muy definido por el "marcado lifestyle" de su contenido y la respuesta de su público, que puede llegar a convencer a las empresas.
También Ana Guardiola admite, pese a que en su caso cuenta que hasta ahora siempre han sido las empresas las que han tenido la iniciativa de contactarle a ella, que no descarta dar el primer paso y acudir a una marca con la que se sienta "identificada" para proponerles una colaboración.
Algo en lo que coinciden Isabel Delima, Aarón Fernández y Ana Guardiola es en el soporte que más les ayuda a desarrollar sus carreras digitales: Instagram. "Tengo presencia en todas las redes sociales, pero Instagram es mi plataforma favorita y tiene un potencial al alza impresionante", afirma la responsable del canal Vida Fit y Activa. "Llegué a tener un blog de moda y lo cerré cuando empecé a ganar presencia en Instagram: la interacción es mucho más rápida y la posibilidad de actualizar muchísimo más fácil", opina Guardiola.
También Aarón Fernandez coincide en centrar su estrategia en Instagram, "por el efecto visual que produce y por la rapidez de subir una foto y directamente que lo vea todo el mundo", aunque también destaca los beneficios de participar en otras plataformas: "Twitter permite una comunicación más rápida, y Facebook es la comunidad donde más amigos y familiares directos pueden encontrarse, que son a los que más se puede influenciar, y eso las marcas lo saben".
Instagram ha sido uno de los principales responsables de que hoy en día ser influencer pueda considerarse una profesión de la que vivir. "Cuesta llegar al punto en el que se rentabiliza todo ese trabajo, pero si se hace bien se puede sin duda vivir de esto", nos cuenta Delima, que a través de sus perfiles y plataformas trabaja con empresas de belleza, hostelería y moda, aunque sigue teniendo en las empresas de healthy lifestyle su campo de especialización.
"Es difícil vivir de esto: hay mucha oferta y demanda de influencers y siempre van antes los de las capitales que los de ciudades pequeñas, por lo que es importante moverse por agencias y tener un buen representante. Si ofreces calidad y buena imagen y además te conviertes en líder de opinión de lo que haces, puedes ganar adecuadamente y compaginarlo con tu trabajo diario", cuenta Aarón Fernández.
En el caso de Ana Guardiola, a la que su especialización como influencer de moda incluso le ha permitido montar su propia tienda online, detecta que hay "muchas ventajas, pero no todas son retribuidas". Pese a los ejemplos de grandes influencers que han llegado incluso a salir en rankings de grandes fortunas a nivel mundial, como Chiara Ferragni, no todas las personas que se mueven en este ecosistema logran vivir de ello, aunque sí aprovechan para dar a conocer sus negocios personales, en lo que Guardiola ha notado "apoyo de sus seguidoras", responsables de "hacer posible despegar" su proyecto
En todo este ecosistema relacional entre empresas e influencers, la figura de las agencias ha ido ganando peso poco a poco. Empresas como ComunicAlicante se han especializado en actuar como bisagra entre marcas e influencers en Alicante, aprovechando sus conocimientos en el sector de la comunicación, la publicidad, el marketing e internet para hacer grande este nicho también a nivel local.
"Ayudamos a las empresas a encontrar el tipo de influencer que necesitan", cuenta Iván J. Muñoz, responsable de la agencia. "Cada producto y cada servicio tienen un público objetivo, por lo que el simple hecho de tener muchos seguidores no es suficiente para que la promoción sea la que la empresa busca", afirma. En este ámbito, en el que los influencers no solo trabajan por intercambio (publicar contenido a cambio de acceder gratuitamente al producto o servicio) sino que cobran tarifas y tienen ciertas exigencias concretas, tener los contactos adecuados es clave: "Buscamos, seleccionamos y contactamos con los perfiles que pensamos que más se ajustan a lo que quiere promocionar cada cliente, en función del público al que quieran llegar y de los recursos que puedan destinar para ello".
"Los influencers no son el futuro, son el presente", sostiene el fundador de ComunicAlicante. "Las empresas ya han abierto los ojos y se han dado cuenta del potencial de estas campañas, pero no basta con una foto bonita o un puñado de seguidores. Al igual que los influencers tienen mucho trabajo detrás, las agencias que trabajamos día a día con ellos tenemos que afinar cada vez más el tiro para que las campañas realmente cumplan con los objetivos que nos marcamos", afirma Muñoz. Entre los clientes de la agencia destacan grandes empresas como la cadena nacional de hamburgueserías Goiko Grill, recientemente destacada en el Top Ten de marcas con más interacciones en redes sociales, y para la que ComunicAlicante gestiona la comunicación de los locales de Alicante, València o Murcia, así como el grupo hotelero Magic Costa Blanca. Pequeñas y medianas empresas también empiezan a demandar acciones de este tipo para aumentar su visibilidad.
Alicante, pese a que no se puede comparar en volumen a grandes ciudades españolas en el ámbito de los influencers, poco a poco va viendo cómo se teje una nutrida red de perfiles potentes y empresas que cuentan con ellos para promocionarse. Un sector en pleno auge del que cada vez más personas viven y que, en el panorama digital, ayuda a muchas marcas y perfiles profesionales a darse a conocer.