CASTELLÓ. La segunda jornada del XXXVII Congreso AEAS que se celebra en Castelló ha acogido una sesión especial dedicada a la I+D+i con una mesa redonda que, bajo el lema Innovación en el sector del agua ¿hacia dónde vamos?, ha abordado cuestiones como la innovación en el abastecimiento urbano, si esta sigue modas o marca tendencias, si innovación y regulación van de la mano o los objetivos por los que una empresa dedicada al agua decide lanzarse a proyectos de I+D+i.
La mesa ha estado moderada por Jaime Flores, coordinador de I+D+i de AEAS, que ha destacado que el área de la entidad ha llegado a recopilar 229 proyectos de innovación e investigación de operadores, entidades y empresas del agua en el inventario correspondiente al periodo 2021-2023, en el que han participado quince entidades del sector. Así, ha destacado que la mayor parte de estos proyectos, que suman 732 millones en inversión, se han realizado con fondos propios de las empresas y apenas un 19% han sido subvencionados.
En la mesa redonda han participado José Guillermo Berlanga (director de innovación de Facsa), Yolanda Ballesteros (gestora de innovación de Socamex), Eduardo Ayesa (del centro tecnológico CEIT), Andrea López (técnica en I+D+i de Nilsa) y Javier Claros (responsable de innovación de Ciclagua).
El debate se ha abierto con la pregunta de si la I+D+i de las empresas y entidades del sector del agua deciden impulsar proyectos siguiendo modas o si se realizan para marcar tendencias. Una pregunta a la que los participantes en el congreso han respondido de forma mayoritaria: "Nos adelantamos".
"Estoy bastante de acuerdo con la respuesta mayoritaria, pienso que nos adelantamos a las necesidades y sí tomamos la delantera", ha indicado Ballesteros, abriendo el debate. En este sentido, ha destacado la importancia de abordar proyectos en materia de economía circular y se ha referido a la iniciativa para implementar una biorrefinería de residuos sólidos urbanos y lodos "pionera en Europa a escala industrial".
En este punto, José Guillermo Berlanga, director de innovación de Facsa, ha apuntado que en muchos casos los proyectos persiguen ambos objetivos. "Un caso claro es lo que pasa con el hidrógeno verde en nuestro sector en un momento de crisis hídrica", ha manifestado.
Berlanga se ha referido a la pregunta abierta que José Claramonte, director general de la compañía, lanzó en su ponencia inaugural al abordar "los nuevos usos del agua que están apareciendo y a los que hay que darles cobertura". Así, apuntó al uso de agua para proyectos de hidrógeno verde: "Habrá que ver si estas nuevas formas de generación de energía verde tienen que ser con agua dulce o con otro tipo de agua".
En este sentido, el director de Innovación de Facsa ha manifestado que el sector está profundizando y comenzando a entrar en muchos proyectos en este ámbito. "Sabemos que cuando lleguen las plantas de hidrógeno la gestión del agua va a ser relevante, pero también podemos ser un actor importante en nuevas tecnologías de producción de hidrógeno que se vayan a desarrollar", ha destacado.
Así, ha explicado que Facsa está participando en dos proyectos para estudiar cómo ser más eficientes en el uso del agua destinada a estas futuras plantas de hidrógeno verde. En concreto ha hablado del proyecto H2VAL para desarrollar "un electrolizador de origen valenciano que sea más eficiente". También, el proyecto Hacdos, que tiene como objetivo diseñar, producir y validar paneles solares fotocatalíticos económicos para la producción de hidrógeno a partir de aguas residuales.
La mesa de debate también ha abordado cuestiones que implican a las entidades y organismos públicos. Así, se ha lanzado la cuestión acerca de por qué investigan los organismos públicos. Una temática que ha sido respondida de manera mayoritaria: "Porque la regulación aprieta y/o para optimizar costes y procesos".
Para Andrea López, de la sociedad pública Nilsa, la principal causa para investigar es la "necesidad de servicio público para aumentar la excelencia y reducir costes". Por su parte, Eduardo Ayesa, del CEIT, ha reivindicado "el conocimiento que se adquiere participando en estos proyectos de I+D+i".
En cuanto a los motivos para embarcarse en proyectos de I+D+i en la empresa privada, la respuesta mayoritaria ha remarcado el interés por ser pioneros y generar patentes. Aunque, por ejemplo, el director de innovación de Facsa ha querido destacar que en la empresa privada "también creemos que los proyectos son una forma de capturar conocimiento para toda la organización". "Hay una parte de la investigación que está relacionada con la regulación (con el cumplimiento de nuevas normativas o legislación) para poder anticiparnos, pero la empresa también innova para diferenciarse", ha destacado.
En el cierre del debate, Jaime Flores ha manifestado que, en base a todos los proyectos recogidos en el grupo de AEAS, así como por el debate planteado: "Creemos que vamos hacia una I+D+i que va a atender las necesidades reales". "Como sector, tenemos una responsabilidad compartida, cada grupo tiene sus objetivos, pero parece que la innovación no va a funcionar si no estamos todos engrasados", ha concluido.