SAN VICENTE. El cuatripartito de San Vicente continúa. Mantendrá su composición actual, al menos por el momento, aunque queda seriamente tocado por lo que respecta a las relaciones entre los socios. Los portavoces de Guanyar y de Sí se Puede, Mariló Jordá y David Navarro, han confirmado este miércoles su continuidad en el equipo de Gobierno pese al envite planteado por el alcalde, Jesús Villar (PSOE), a cuenta de la construcción de un nuevo pabellón deportivo. En una comparecencia pública, tanto Jordá como Navarro han defendido que "nosotros no nos vamos a ir, en todo caso nos tendrán que echar" y han sostenido que, a su juicio, habría sido el grupo socialista, con Villar al frente, quien realmente ha incumplido el acuerdo de gobierno suscrito tras las municipales de mayo de 2015.
¿De qué modo? En primer lugar, porque en ese acuerdo quedaba claro que las competencias sobre Infraestructuras y Urbanismo no podían quedar en manos del mismo partido que ostentase la Alcaldía. En este caso, el PSOE. Y, según los líderes de los dos partidos, ese requisito se habría visto vulnerado, después de que Villar hubiese ordenado la licitación de las obras de ese pabellón de manera directa, pese al rechazo de la propia Jorda, que es la que dirige la Concejalía de Urbanismo.
Pero no sólo eso. Guanyar y Sí se Puede consideran también que el PSOE habría pasado por encima de las condiciones del pacto al eliminar el gabinete de comunicación municipal a través de una decisión adoptada de manera unilateral, cuando su creación fue un compromiso contemplado en el pacto a cuatro bandas (PSOE, Guanyar, Compromís y Sí se Puede) para garantizar una comunicación eficaz de la acción de gobierno.
Los líderes de Guanyar y Sí se Puede han añadido, además, que los dos partidos no están en contra de la construcción del nuevo complejo deportivo, pero sí se oponen a que se ejecute de acuerdo con el anteproyecto que ha decidido impulsar el PSOE. "Esa una instalación que se ha elegido de manera mayoritaria a través de un proceso de participación pública que ha sido todo un hito en San Vicente, a la hora de confeccionar los presupuestos", ha insistido Jordá. Sin embargo, ha matizado que en ese proceso se apostó por un edificio de una única altura con un coste estimado de entre 2,5 y 5 millones de euros "y el que el alcalde ha decidido sacar a licitación mediante un decreto es por un presupuesto de 6,5 millones, lo que puede generar problemas presupuestarios para el Ayuntamiento". "Además, según Jordá, ese nuevo proyecto contempla una segunda planta para la instalación de un gimnasio, que se pretende gestionar en régimen de concesión, y que competirá con los gimnasios preexistentes en el municipio". Todo, además, al margen del gimnasio que ya funciona en el velódromo municipal, situado prácticamente frente al emplazamiento en el que se prevé construir el nuevo pabellón, "y que pasará a ser de gestión pública en cuanto expire su concesión actual", ha explicado Jordá.
Al margen de explicitar su diferencia de criterio con el PSOE, el portavoz de Sí se Puede, David Navarro, ha comunicado que su grupo había renunciado a las competencias sobre Recursos Humanos y Contratación que habían mantenido tras la expulsión de su ya exedil y ahora concejal no adscrita, Auxi Zambrano. Navarro ha justificado su decisión al argumentar que, en realidad, no se les había tenido en cuenta, puesto que la licitación del pabellón era una responsabilidad de la Concejalía de Contratación y se ha acordado a través de un decreto de Alcaldía.
Como informó Alicante Plaza, el alcalde acordó el martes esa licitación tras argüir que Guanyar y Sí se Puede no habían tenido en cuenta la decisión mayoritaria adoptada en el seno del equipo de Gobierno. Villar insistió en que PSOE y Compromís, que suman ocho concejales frente a los seis de Guanyar y Sí se Puede, estaban a favor de la licitación en cumplimiento de lo previsto en e proceso de participación pública. Además, detalló que se había dividido la obra en dos fases para no comprometer la estabilidad presupuestaria del Ayuntamiento. El primer edil explicó que la eliminación del gabinete de comunicación se debía a que su funcionamiento no había cumplido las expectativas.