Gira y gira la noria

Leo las noticias de actualidad política y no se me ocurre sobre qué escribir, normalmente un titular me suele inspirar una columna de opinión pero en esta ocasión no es así.

No sé si será culpa mía, que me estoy desinflando como esa clase social que está emergiendo a la que algunos politólogos llaman “precariado”, excluidos y desanimados del ámbito político, laboral y social o si siendo positiva es que no encuentro noticias nuevas sobre las que opinar porque la legislatura nos ofrece temas de ida y vuelta que giran y giran pero no terminan de cuajar. Temas que ya se anunciaron, hace meses y que siguen dando vueltas por el hemiciclo, por las comisiones de investigación, por los medios de comunicación y que no están acabados ni gestionados, ni solucionados.

Pongamos el ejemplo de la exhumación de Franco, que ya en periodo vacacional, parecía que había mucha prisa y en agosto con extremada urgencia se aprobó el Decreto para la exhumación, pero a fecha de hoy seguimos sin saber dónde va a acabar el muerto.

Si nos vamos a educación, ya tuve ocasión de hablar del tema, (https://alicanteplaza.es/hasta-las-narices) sobre la propuesta educativa nueva del Gobierno donde se vuelve a dar otra vuelta de tuerca a temas como la educación religiosa, y su peso en el curriculum, la supresión de las reválidas y ahora se añade el invento de aprobar el Bachiller sin superarlo completamente. Esta devaluación continuada de la exigencia curricular no debe ser fortuita, parece intencionada cien por cien, pero no alcanzo a ver las ventajas de motivar la pereza, la falta de esfuerzo y la ausencia de constancia. Salvo que queramos tener unos jóvenes cada vez menos formados, más manejables y sin capacidad para la crítica. 

La otra noticia de la semana es la referida a la huelga de jueces y fiscales con motivos sobrados para reclamar más recursos para conseguir una justicia más ágil y para reivindicar una modificación de la forma de elegir a los miembros del Consejo General del Poder Judicial evitando el pasteleo. Pero tampoco es algo nuevo, ya ocurrió en mayo de este año y viene produciéndose desde el año 2009 fecha en la que se produjo la primera huelga de este colectivo sin que hasta la fecha se haya solucionado. Lo que sí ha resultado noticioso ha sido la renuncia de Marchena, el que iba a ser Presidente del órgano de gobierno de los Jueces después de que saliera a la opinión pública su futuro nombramiento, cuando dicha elección corresponde a los Vocales y no a las cúpulas del PP y del PSOE. También nos ha entretenido la semana los mensajitos del senador Cosidó a un buen grupo de compis del Senado para comunicarles que el PP controlaba “por detrás la Sala del Tribunal Supremo” y se queda tan pancho. No sólo el poder político sigue controlando el Gobierno del Poder Judicial sino que además no disimulan lo más mínimo. Ya puede Casado espabilar y pedir la dimisión de este bocazas. Después de este capítulo resulta que ahora el PP solicita que los Vocales judiciales del Consejo se elijan entre ellos, que es lo que exactamente dice la Constitución y que no se cumple desde 1985 pero no tengo muchas esperanzas en que esta propuesta prospere, no se olvide que hasta hace muy poquito estaba el PP en el Gobierno y no lo cambió, así que seguiremos todavía con el aireado episodio unas semanas más.

La otra vieja noticia es la referida a los famosos Presupuestos Generales del Estado, que si se aprueban, que si se prorrogan, que si hay elecciones adelantadas. La última fecha que se ha conocido como posible para unas elecciones generales es la de mayo de 2019. Coincidiría elecciones europeas, autonómicas y municipales además de las posibles nacionales, “menudo festín” democrático nos vamos a dar. 

Bueno, les dejo que me voy a la “capi” a un acto de conmemoración de los 40 años de la Constitución Española que se celebra en el Congreso de los Diputados, a ver si me encuentro con Rufián y le digo cuatro cosas.