ALICANTE. Paulo Gazzaniga y el Tottenham Hotspurponían fin de mutuo acuerdo este jueves al contrato que les unía hasta junio de 2022, pasando el meta argentino a ser agente libre y a abrirse de par en par las puertas a que continúe defendiendo la camiseta del Elche, pues a nadie le escapa que esa es la voluntad compartida por ambas partes (otra cosa es que lleguen a un acuerdo).
Gazzaniga se incorporó al club franjiverde en calidad de cedido el último día del mercado de fichajes de invierno. Recaló en el Elche de la mano del director deportivo, Nico Rodríguez, para cubrir el hueco que dejaba el también argentino Diego Rodríguez 'El Ruso', que firmaba su baja horas antes, dos semanas después de haberlo solicitado al propietario, Christian Bragarnik, ante la falta de minutos y con la intención de regresar a Argentina.
Aunque parecía que Gazzaniga iba a gozar de pocas oportunidades (Edgar Badía no solo era uno de los mejores del equipo, también lo era de la categoría, no obstante ser un debutante), Fran Escribá lo eligió para defender la meta en el encuentro ante el Osasuna, el primero de los últimos ocho del curso en los que Gazzaniga terminó siendo titular. La decisión del técnico valenciano, que a su llegada tras la dimisión de Jorge Almirón había mantenido a Badía en la meta, levantó una enorme polvareda, pero el rendimiento del portero de Murphy sofocó rápido las críticas.
Ocho encuentros, de los que cerró dos con la portería a cero y encajó nueve goles en los seis restantes, han sido los principales números como portero franjiverde de Gazzaniga, que puede convertirse en uno de los primeros refuerzos del Elche 2021/22, una vez se concrete la continuidad de Escribá en el banquillo.
