ALICANTE. Francisco Rodríguez no despejaba este viernes la incógnita sobre si introducirá en su once más cambios de aquellos a los que le obligan las lesiones y sanciones, pudiendo incluso variar su apuesta táctica, de cara a la cita ante el Barça de este domingo (16:15 horas).
El preparador almeriense del Elche confirmaba las bajas del central Pedro Bigas y del lateral Helibelton Palacios por lesión (el primero por una sobrecarga y el segundo por no tener todavía el alta competitiva tras dejar atrás una rotura muscular) y que mantiene las dudas del pivote Iván Marcone (por un golpe) y del mediapunta Javier Pastore (también en vías de alcanzar el alta competitiva después de una lesión muscular).
"Va a haber cambios por los sancionados y lesionados, pero tampoco voy a hacer una revolución", decía Francisco, pero también apuntaba que habrá que "oxigenar un poco al equipo, hay gente que en el día a día está apostando muy fuerte". El técnico franjiverde, que tras la derrota ante el Levante incidió mucho en "los errores individuales", era precisamente interpelado por el lateral Johan Mojica, protagonista negativo en dos de los tres goles encajados en el Ciutat de València, ante la posibilidad de que pierda la titularidad, pero Francisco no solo recordaba "lo mucho que le ha dado al equipo" y "su importancia" dentro de él, es que llegaba a contemplar la posibilidad de jugar "este domingo o en el futuro" con un doble lateral en la banda izquierda, echando mano al mismo tiempo del colombiano y del uruguayo Lucas Olaza, por el que reconocía haber apostado "mucho" para su incorporación en el pasado mercado de invierno, "en función del nivel que ofrezcan nuestros extremos".
"Yo quiero puntos antes que jugar bien"
Si el Elche de hoy no es el que se enfrentó al Barça en diciembre, tampoco el conjunto azulgrana se parece mucho, pues atraviesa su mejor momento de la temporada, tanto a nivel de juego como resultados. Precisamente a esto último aludía el entrenador franjiverde, apuntando que le recuerda "al Barça de hace muchos años" y que, en consecuencia, "la situación y el plan de partido va a ser diferente" al de la primera vuelta en el Camp Nou donde su equipo llegó a ser mejor en algunas fases del segundo tiempo.
"No cometer pérdidas, ser comprometidos a nivel colectivo, apretar espacios para que no nos hagan daño cuando tengan el balón y usar nuestras armas cuando lo tengamos nosotros", era los ingredientes de su receta que desvelaba Francisco para el encuentro del domingo en el que daba por hecho que el Barça les va a someter con el esférico, pero no firma el empate: "Cuando te enfrentas a un rival como este si consigues empatar, en principio, has de estar satisfecho, pero acordaros del día del Bernabéu", recordaba el técnico.
Francisco perdía una vez más no perder la perspectiva, recordando que pese a la ventaja que tienen en la tabla respecto a la zona de peligro, van a sufrir porque los de arriba están muy fuertes y es muy difícil ganar para los equipos de la parte baja.
Por cierto, el almeriense le restaba importancia a que como consecuencia del lleno que se avecina en el Martínez Valero este domingo pueda haber mayor presencia de aficionados azulgranas que franjiverdes: "Es normal, son un equipo muy grande a nivel mundial y si se llena el campo es por eso, pero nosotros tenemos muy claro quien es nuestra gente y si estamos unidos al cien por cien podremos conseguir un buen resultado".
