DOLORES. La startup de Dolores, Flores con Flow, es el proyecto de una tienda online de flores preservadas para particulares y empresas del mundo de la decoración. La firma es la primera de España que sirve el producto sin componer, para que sea el cliente el que lo arregle a su gusto. Además, disponen de un amplio catálogo de más de treinta referencias. Las responsables de esta firma son las emprendedoras María Martínez Ferrández y Mar Guillamó.
Ahora, según cuenta a este diario Martínez, al catálogo de referencias, van a sumar nuevos productos, como la venta de jarrones "ya que los clientes los estaban reclamando" y además, "para continuar con la economía circular también vamos a poner a la venta unos bancos de madera que la reusamos de restos de las obras, maderas que ya no se usan y que nosotras le damos una segunda vida".
Desde que pusieron en marcha su startup, sus creadoras aseguran que están recibiendo muchos pedidos y sugerencias. "Estamos teniendo muy buena acogida en las redes sociales y las influencers o bloggers nos están publicando mucho".
Las flores preservadas son "plantas naturales que se cortan en el momento óptimo y reciben un tratamiento que conserva su aspecto, su textura y su color durante más tiempo", ha explicado Guillamó. Su uso es eminentemente ornamental y está en boga gracias a "blogueras, organizadores de bodas, interioristas o para eventos, hoteles y centros sanitarios".
Asimismo, este producto está incluido en el sector de la decoración doméstica, que ha registrado un aumento considerable de ventas a causa de la pandemia de coronavirus, ya que "la gente ha permanecido encerrada en casa y ha invertido en la remodelación y mejora de sus domicilios".
Precisamente su procedencia, ambas socias trabajan en el sector inmobiliario, fue la que les proporcionó el impulso necesario para abrir el negocio. "Buscando por internet, descubrimos que era muy difícil encontrar el material que necesitábamos para adornar pisos piloto, por ejemplo", ha relatado Martínez. Hasta ahora, las empresas que sirven este producto "se dedican a la composición de ramos" pero nadie ofrecía "la materia prima en bruto".
Además, ha continuado la empresaria, apenas se podía acceder a los cuatro elementos más típicos, "eucalipto, lavanda, avena y trigo" y, por ese motivo, decidieron ampliar su muestrario a una treintena de especies "todas de flora silvestre", que irán ampliando posteriormente.
La sostenibilidad y el respeto al medio ambiente es una de las principales características de las flores preservadas, ya que "no consumen agua, no necesitan cuidados como los de las flores naturales, son de larga duración y reutilizables, y reducen la huella de carbono", el indicador ambiental que refleja la emisión de gases de efecto invernadero en la atmósfera.
Por ese mismo motivo, decidieron establecer la sede física de la mercantil en Dolores, un pequeño municipio de la comarca alicantina de la Vega Baja, "como vía de estímulo del comercio local".
Tras la idea inicial, en la que descubrieron un nicho de negocio, ha señalado Martínez, realizaron un plan de empresa en el que valoraron la inversión y estimaron los beneficios para certificar la viabilidad de la empresa, que han abierto esta semana.
A su juicio, las flores preservadas dan respuesta a todas las necesidades del interiorismo y la ornamentación tanto en domicilios particulares como en empresas.
"Su larga duración permite reutilizarlas constantemente en diferentes composiciones", ha indicado Martínez, lo que también mejora, ha continuado, "su amortización".
Además, según Guillamó, son un elemento que se puede utilizar sin problemas en los centros sanitarios ya que, al contrario que en el caso de las flores naturales, no contienen sustancias alérgenas ni atraen a insectos y parásitos.