Foto: EP/Marta FernándezVALÈNCIA. El PP liderado por Alberto Núñez Feijóo ofreció este viernes una réplica compacta de rechazo al ofrecimiento realizado esta misma semana por el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, respecto a la posibilidad de negociar bilateralmente -es decir uno a uno- la reforma del sistema de financiación con las Comunidades Autónomas (CCAA).
Tal y como informó este diario, el movimiento del jefe del Gobierno, que incluye las reuniones individuales con los diferentes presidentes autonómicos, conllevaba un riesgo de división dentro de las filas populares, debido a que los 14 territorios que gobiernan poseen sus propias necesidades y particularidades que exigen ser satisfechas. Así, la oferta trataba de exportar la concesión realizada a Cataluña -tras la negociación PSOE (PSC) y ERC para la investidura de Salvador Illa- de una financiación singular a otras autonomías, lo que buscaba trasladar la pelota al tejado de los populares para que se pronunciaran sobre sus deseos para el futuro sistema en un marco de negociación bilateral.
Una posibilidad que podía resultar incómoda para el PP, que este viernes iba a celebrar precisamente un encuentro de sus responsables institucionales autonómicos para mostrar su oposición al cupo catalán. De hecho, la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, había pedido a sus homólogos que, directamente, rechazaran sentarse a la mesa con Sánchez. Una posición que provocó cierto revuelo interno al considerar que la dirigente estaba marcando -o al menos condicionando- la respuesta que debía proferir el líder nacional del PP, Núñez Feijóo. No obstante, la dirigente sí abrió este viernes la puerta a reunirse con Sánchez mientras no se aborde la financiación.
No obstante, la sensación de que la reacción unitaria de la formación popular exhibida este viernes ha conjurado en cierta medida la maniobra táctica de Sánchez. Así, la respuesta de Feijóo y sus 'barones' giró en torno al rechazo de una negociación bilateral sobre la financiación, al considerar que es una cuestión que afecta a todos los territorios, a la vez que se exigía que se abordara el debate en los "foros multilaterales" como la Conferencia de Presidentes o el Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF).
"Renunciamos expresamente a caer en una bilateralidad tramposa en lo que se refiere al sistema de financiación de los servicios públicos de todos los españoles", subrayó Feijóo, quien acusó a Sánchez de "someter los intereses generales a diferentes subastas". "Nosotros no vamos a participar de ellas", sentenció.
Esto no significa que los presidentes autonómicos del PP no vayan a reunirse con Sánchez de forma individual si este lo propone. Sobre esto, la dirección nacional del partido ya informó el jueves que los responsables institucionales serán los que tengan la decisión de aceptar o no el encuentro. Ahora bien, lo que ayer se explicitó es que en ningún caso iniciarán una negociación bilateral sobre la reforma del sistema de financiación.
Por su parte, el presidente de la Generalitat y líder del PPCV, Carlos Mazón, salió satisfecho del encuentro al encontrar un respaldo público por parte de Feijóo y el partido respecto al fondo de nivelación que viene reclamando en los últimos meses. Una herramienta, que debería incluirse en los próximos Presupuestos Generales del Estado, pensada para compensar a las autonomías que se encuentran infrafinanciadas hasta que se produzca la reforma del sistema que, cabe recordar, se encuentra caducado desde 2014 sin que los sucesivos gobiernos de PP y PSOE hayan encontrado la fórmula -ni las ganas- para reformarlo.
De esta manera, en su intervención, Mazón agradeció el apoyo para este fondo "urgente, necesario e irrenunciable" que implica reconocer que la Comunitat Valenciana es la peor financiada. Además, el presidente de la Generalitat instó a los socialistas a "recapacitar y pedir perdón" por haberse negado a dicho fondo, en referencia a la última Proposición No de Ley (PNL) aprobada en Les Corts sólo con el apoyo de Compromís.
Ahora bien, el asunto que no apareció en la cumbre de presidentes populares fue la condonación de la deuda; otra de las ofertas planteadas por el Gobierno de España y para lo que deberían haberse iniciado reuniones del Ministerio de Hacienda con las distintas autonomías. Un asunto sobre el que existían posiciones encontradas dentro del PP, pero sobre el que no se extrajo ninguna conclusión en el encuentro de este viernes.
