VALÈNCIA. Tras más de dos semanas de la dana que asoló l'Horta Sud y tres pedanías de València ciudad -La Torre, Castellar-l'Oliveral y Forn d'Alcedo- el conjunto de las administraciones ya han empezado a articular los primeros paquetes de ayudas. Así, tanto el Gobierno central, Generalitat Valenciana como, en el ámbito local, el Ayuntamiento de València, han aprobado sus primeras líneas de ayuda y exenciones fiscales, a las que podrán sumarse otras medidas en el futuro.
En ese marco, la ciudad de València ha dado luz verde a una partida de 5 millones de euros para sufragar los gastos derivados de las inundaciones este año, además de prever una partida de 10 millones ampliables en el presupuesto de 2025. Pero además, ha proyectado la aplicación de exenciones fiscales como la bonificación del ICIO a las obras de reconstrucción, la exención de tasas como las de vado, terrazas, quioscos y mercadillos y prevé la ampliación del plazo de pago de tributos hasta el 5 de febrero próximo.
Sin embargo, el consistorio ha detectado una serie de lagunas en los reales decretos aprobados por el Gobierno que podrían mejorarse para restar mayor carga impositiva sobre las personas afectadas. Así, por ejemplo, el Ejecutivo central ha previsto la exención del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), pero solo para aquellas familias que hayan tenido que ser realojadas en otras viviendas o locales. Esto, señala el gobierno local que dirige María José Catalá, dejaría fuera aquellas familias que no han sido realojadas porque la tipología de su vivienda consta de plantas superiores que les permite seguir habitándola.
Por ello, en la moción de medidas fiscales aprobadas por el Ayuntamiento de València, se recoge un punto para instar al Gobierno a "flexibilizar los requisitos para acogerse a la exención en el IBI [...] entre ellos, no condicionar la exención al realojamiento total o parcial de las personas en otra vivienda distinta, al ser frecuentes las viviendas de al menos dos alturas en las que se ha inundado y dañado la planta baja mientras las familias afectadas permanecen en la planta vivienda".
Además, la exención prevista por el Ejecutivo central tanto para el IBI como para el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), hace referencia a la cuota del ejercicio 2024. En ese sentido, el gobierno local ha instado al Gobierno que revise este apartado para ampliar dichos beneficios fiscales "también para el año 2025, compensando al Ayuntamiento por la disminución que se produzca en los ingresos locales vía Presupuestos Generales del Estado".
Y no sólo eso, sino que el Gobierno central permita, algo que no está contemplado ahora mismo, la exención del Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica, tanto para este año como para el ejercicio próximo, dado que el temporal ha afectado a numerosos coches de las tres pedanías afectadas.
Por otra parte, este viernes el portavoz del gobierno municipal, Juan Carlos Caballero, anunció que el ejecutivo local también ha instado al Gobierno "para que incluya en las ayudas que tienen que ver con el ámbito laboral y económico a la totalidad de la ciudad de València, municipio afectado" por la dana. "Las pedanías de La Torre, Forn d'Alcedo y Castellar-l'Oliveral se han visto azotadas gravemente por esta DANA, pero sus efectos económicos están afectando a toda la ciudad: al comercio, a los trabajadores autónomos, a las pymes, a los polígonos industriales y a los trabajadores", señaló al respecto.
"Valencia es el área de influencia del área metropolitana y no podemos hacer que, tras los efectos devastadores de esta DANA, se cree una depresión económica en la ciudad. Tenemos que salir cuanto antes a apoyar a los autónomos, a las pymes, a los hosteleros, a los empresarios, para que puedan reactivar la actividad económica y que no se vean afectados más trabajadores de la cuenta, para que puedan seguir trabajando", expuso caballero, para considerar necesrio reactivar "toda la economía en la ciudad de València" para ayudar también "al área metropolitana a levantarse cuanto antes, para que no haya ningún comercio que tenga que echar la persiana o para que no haya ningún trabajador que se quede en situación de desamparo".