BENIDORM. La Agència Valenciana del Turisme presentó este miércoles en Invattur (Benidorm) los cuatro modelos de espacios naturales inteligentes, con los que dan un salto más en la apuesta por las nuevas tecnologías en lugares de interés turístico. Así, destacaron la importancia que tienen las nuevas aplicaciones tecnológicas no solo en las playas, como ya se hiciera hace un año, si no en otros destinos menos concurridos y alegados del turismo de masas, como son la montaña o las islas.
En este sentido, aclararon que los ejes que vertebran estos proyectos también están promovidos desde un punto de vista seguro, sostenible y accesible. Es una forma de mejorar la calidad y la experiencia del destino a través de aplicaciones innovadoras.
Para ello hay una serie de elementos clave que transforman el lugar donde se aplica. De ahí la importancia de la conectividad, ahora con la implantación del 5G, así como dispositivos que permitan el uso de estas herramientas. Pero el verdadero reflejo para saber si merece la pena invertir en ello está en el retorno de los datos que aportan, por este motivo todo tiene que confluir en una plataforma, tal y como indicaron los expertos que han creado este estudio.
Como consecuencia del análisis de distintas propuestas, han creado cuatro modelos que pueden ser modificados en cada uno de los espacios en los que se aplique en base a otras tantas características específicas del entorno.
En primer lugar estaría la isla natural inteligente, donde cabría la instalación de boyas de última generación, con el fin de conocer la calidad del agua, su temperatura, monitorizar las embarcaciones o controlar los accesos restringidos, o por ejemplo mejorar las tareas de rescate con drones de salvamento.
También contarían con sensores que describan la calidad del aire, paneles asistentes en las playas... Además, serviría de utilidad para los turistas en tiempo real, ya que recabaría la información de cuánta gente hay en el arenal, y con la experiencia histórica podrían crear una estadística que generara los picos de más bañistas. Algo que además tendría una aplicación de seguridad, ya que también podría localizar a personas.
Como se decía, también tiene en cuenta la accesibilidad de este espacio. Por ello contempla aplicaciones para invidentes, como una guía de audio convencional, indicador de direcciones o señalización acústica.
En segundo lugar estaría el modelo para una playa natural inteligente, que como se recordará, está indicada para aquellas que no tienen grandes afluencias. Muchas de las herramientas comentadas anteriormente también tendrían su aplicación similar en estos lugares, pero además entrarían en juego por ejemplo los sensores ultravioleta, que permiten medir el tiempo de exposición al sol aconsejable, así como el riesgo que conlleva ese día en concreto.
Asimismo, estaría la opción de colocar boyas batimetrías, que da a conocer la calidad de agua en profundidad, la concentración de oxígeno, o la concentración de bacterias o algas, entre otras aplicaciones.
A continuación, los expertos explicaron el modelo para los espacios de interior, donde también tendrían en cuenta las necesidades para los ciclistas y senderistas. De este modo, está el desarrollo de apps para avisos de emergencias, rutas guiadas o su gamificación. En cuanto a la movilidad eléctrica, contarían entre otros asuntos, con puntos de recarga y el alquiler y suministro de bicicletas.
También en especial para este tipo de destinos estarían pensados los sensores de caminos, con información cognitiva, datos de rutas personalizadas y geoposicionamiento. Al mismo tiempo, incluyen aspectos como la realidad aumentada, para la interpretación del paisaje, visión del patrimonio histórico y recreación histórica. Como en el caso anterior, también detallarían información en este caso, de presencia de insectos.
Por último, presentaron el modelo de espacio de montaña inteligente, que tiene una aplicación parecida a la anterior, pero con cámaras de control para conocer la información volumétrica, la densidad de ocupación y espacios protegidos. Asimismo, los drones de vigilancia tendrían un componente importante con la detención temprana de incendios.