ALICANTE. El desarrollo e integración de nuevos dispositivos y sensores para efectuar una medición más precisa del impacto de la actividad turística en el medio ambiente, así como el diseño de un sistema de captación de información de los destinos turísticos inteligentes y de los usuarios con el fin de facilitar la interacción con los distintos segmentos de turistas son los dos principales retos a los que se ofrecerán respuestas desde el diálogo tecnológico que impulsa la Agència Valenciana de la Innovació (AVI), en colaboración con el Instituto Valenciano de Tecnologías Turísticas (Invat·tur).
Representantes de la comunidad científica, centros tecnológicos, ayuntamientos y el empresariado que componen este grupo multidisciplinar han participado en la segunda sesión de trabajo con el objeto de proponer soluciones innovadoras a los grandes desafíos que han de afrontar los municipios que integran la Red de Destinos Turísticos Inteligentes de la Comunitat Valenciana (Red DTI-CV).
A través de dinámicas de grupo, las personas especialistas, coordinadas por el director del Instituto Tecnológico de Producto Infantil y Ocio (Aiju), Manuel Aragonés, han reordenado y priorizado los retos que ya se apuntaron en la reunión previa, que tuvo lugar en Benidorm, al tiempo que han planteado los primeros desarrollos tecnológicos para hacerles frente.
En este sentido, han insistido en la necesidad de diseñar sistemas que midan de forma eficaz la huella de carbono que genera la actividad turística, con el fin de abordar la incorporación de medidas que garanticen la sostenibilidad de dichos destinos.
Pero también han apostado por desarrollar un nuevo sistema de captación de información de los municipios y los propios usuarios que mejore la interacción y experiencia con los distintos tipos de turista. El objetivo, en definitiva, consiste en optimizar la experiencia de los usuarios, garantizando y mejorando, además, la accesibilidad de los colectivos con necesidades especiales.
Presidida por el vicepresidente ejecutivo de la AVI, Andrés García Reche, y el director de Inteligencia Turística de Invat·tur, Mario Villar, la reunión ha contado con una amplia representación de la Red de Destinos Turísticos de la Comunitat Valenciana: Aida García, del Ayuntamiento de Benidorm; Carlos Marco, del Ayuntamiento de Gandía; Luis Miguel Morant, del Ayuntamiento de l'Alfàs del Pi, y Lorena Zamora del Ayuntamiento de Alcoy.
De este equipo multidisciplinar también forman parte los científicos José Antonio Ivars, de la Universidad de Alicante; Jaume Llorens, de la Universitat Jaume I; Enrique Bigné, de la Universitat de València, y Laura Sebastià, de la Universidad Politécnica de València), además de los tecnólogos Fran Ricau, del Instituto Tecnológico de la Informática, y José Darío Such.
Con el aval de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) como empresas altamente innovadoras, el tejido productivo aporta tres representantes al grupo: Federico Fuster, de GF Hotels, Pablo Hernández, de Hoteles RH, y Francisco J. Rivera, del Gran Hotel de Peñíscola, que actúan en este foro en defensa del interés general. Asimismo, también participan en este diálogo tecnológico Leire Bilbao y Nuria Montes, de la Fundación Turismo Benidorm, y José Manuel Camarero, de Visit Valencia).
La Red de Destinos Inteligentes de la Comunitat Valenciana nace para crear sinergias entre los municipios, así como con empresas y entidades turísticas con el objetivo de facilitar la evolución de la planificación y gestión de los destinos turísticos y convertir la Comunitat Valenciana en un territorio turístico inteligente.
El Instituto Valenciano de Tecnologías Turísticas (Invat·tur), que depende de Turisme Comunitat Valenciana, es el organismo encargado de la coordinación de la Red, en la que se han integrado ya alrededor de medio centenar de entidades locales.