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ALICANTE. La apuesta por la digitalización ha impulsado una nueva red asistencial que ya asomaba antes de la pandemia, pero que ahora se ha terminado consolidando sin obstáculos. Lo cuenta Daniel Terol.
La pandemia del coronavirus SARS-CoV-2 ha supuesto una auténtica prueba de resistencia para el sistema sanitario de España que, como el resto del mundo, ha tenido que enfrentarse a un virus desconocido, de síntomas desconcertantes, al que se sumaba el desconocimiento en el abordaje de los tratamientos adecuados y las altas cifras de pacientes infectados en muy poco tiempo. La colaboración público-privada de todas las entidades del ámbito de la salud ha sido imprescindible en ese arduo trabajo asistencial. De esta forma, tras atravesar un momento histórico como este, se ha generado un verdadero punto de inflexión para el modelo sanitario.
La crisis que se está viviendo supone, así, un indudable efecto negativo para la sociedad, pero también ha servido como acelerador de procesos como la investigación y, además, ha puesto de manifiesto la necesidad de contar con más medios y recursos en todas las vertientes del sistema. Del mismo modo que se ha acelerado la transformación digital como vía de escape para tratar de alcanzar la normalidad en las relaciones sociolaborales, también ha supuesto un revulsivo para el sector sanitario. La apuesta por la digitalización ha impulsado una nueva red asistencial —a través de chats, videollamadas y múltiples canales— que ya asomaba antes de la pandemia, pero que ahora se ha terminado consolidando sin obstáculos.
La revista Plaza analiza la hoja de ruta que debe seguir el sector y habla con los principales agentes implicados en ella. Es el caso de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche, que cita la especialización académica y profesional como eje de su proyecto. Por su parte, el Grupo Farmaquivir, que ha liderado la producción de mascarillas en los momentos más duros, hace un llamamiento a los poderes públicos para unir esfuerzos en la producción nacional. Además, las aseguradoras Asisa, Sanitas y SegurCaixa Adeslas desgranan sus iniciativas asistenciales. Por último, los grupos médicos de referencia en la provincia con sus centros hospitalarios —como son HLA Vistahermosa, QuirónSalud, Vithas, Hospital Clínica Benidorm, Ribera Salud, IMED Hospitales—, hacen balance del trabajo realizado durante la pandemia y exponen sus proyectos de futuro.
Con más de cien años de vida, Carmencita ha pasado de vender carteritas de azafrán a abordar todo tipo de especias y de nuevos productos y facturar casi cien millones de euros y protagoniza la portada de abril de la revista Plaza. Además, en este número conocemos cómo se gestó el proyecto Valenta, posicionado como el movimiento de fútbol femenino más importante de España... y mucho más
