Foto: PEPE OLIVARES.BENIDORM. El Instituto Tecnológico Hotelero ha nombrado recientemente al empresario de Benidorm, Javier García Cuenca, como presidente del organismo. Lo compatibilizará con su vicepresidencia de la cadena hotelera Magic Costa Blanca y de la patronal en la Comunitat (Hosbec). Es licenciado en Gestión Comercial y Marketing por ESIC y Executive MBA por el Instituto de Empresa. Ahora, afronta un nuevo reto que se encamina a promover soluciones a los establecimientos a través de la vía tecnológica para mejorar la competitividad, la rentabilidad, calidad, eficiencia y sostenibilidad de las empresas vinculadas a la industria hotelera y turística.
- ¿Por qué presidir el ITH?
Me llamó el presidente Jorge Marichal de CEHAT y me ofreció la oportunidad de presidir el ITH. En toda mi trayectoria profesional me ha encantado la innovación, los proyectos de tecnología y recientemente soy una persona bastante conversa en todo el tema de sosteniblidad, que no lo fui en su día. Pensé que era una gran oportunidad en un momento crítico para el sector, pero que también iba a haber muchos fondos de la Unión Europea para hacer cosas para que el sector sea más competitivo y salgamos más reforzados de esta dura crisis. Además, en el ITH hay un gran equipo y me apetecía mucho trabajar con personas de la capacidad intelectual de Álvaro Carrillo, que es el director del ITH.
- ¿Qué necesitan los hoteles en el ámbito tecnológico para mejorar la experiencia de los clientes, los trabajadores...?
En el mundo se está demostrando que tener una mentalidad de innovación es clave. Las empresas de hoy en día no solo pueden pensar en tener un modelo de negocio y ejecutarlo durante décadas como en su día Coca Cola. Las más valiosas del mundo, como Apple o Tesla, están continuamente explorando las oportunidades que hay en el entorno y aprovechándolas para cambiar el mundo, digamos. Esa mentalidad en el sector es muy necesaria.
Si queremos tener un país con destinos turísticos inteligentes y con una calidad de empleo alta, la apuesta tiene que ser clara por la innovación
España es el líder mundial en turismo según el Foro Económico Mundial y para mantener ese liderazgo, viendo lo que está pasando, vamos a tener que ser empresas buscando esas oportunidades y que tengamos esa mentalidad de innovación. Donde más la hay, es donde más prosperidad se genera, no solo para los accionistas, también para los empleados, para el sector y para la sociedad. Si queremos tener un país con destinos turísticos inteligentes y con una calidad de empleo alta, baja estacionalidad, etc. la apuesta tiene que ser clara por la innovación.
Foto: PEPE OLIVARES.- Con la pandemia, se ha demostrado que la implementación de la tecnología en los hoteles puede ayudar a seguir con la actividad. ¿Qué medidas han tomado en Magic?
La verdad es que este mundo es un poco una distopía para todos. Estamos en un momento complicado para la movilidad o el turismo. Lo que sí que es positivo es que nadie duda de la recuperación de sus hábitos, sus vidas y que el turismo volverá a renacer. Hemos trabajado para adaptarnos, pero no nos gustaría que muchas de ellas siguieran después de vacunarnos. Una vez que se ha visto que el nivel de contagio por contacto es muy bajo, estamos invirtiendo mucho en la renovación del aire, comunicarla, tener sensores que le digan al cliente que pueden estar tranquilos en espacios interiores, en ascensores...
- ¿Qué cambiarían?
Es muy importante que Sanidad en las comunidades autónomas se pongan al día porque seguimos con mucha normativa que incluso es contraproducente. Por ejemplo, en bufés, donde se estaba vigilando el mínimo contacto . Al final es igual que una experiencia en Mercadona, y lo que estamos haciendo con esta normativa es generar colas. Además de dar un servicio mucho peor, en mesa con movimiento de personas... La recuperación de los bufés creo que es clara.
- Gran parte de su planta hotelera la tiene en Benidorm, ¿cómo ve Benidorm en innovación?
Benidorm está siendo ahora uno de los destinos tractores de esa transformación. Se está haciendo una renovación importante de la escena urbana y una apuesta importante de un modelo más sostenible, peatonalizado, con una movilidad desde el punto de vista de la eficiencia energética más eficiente y más sostenible. Se está convirtiendo en una ciudad moderna, recuperando la vanguardia que en su día tuvo con su urbanismo vertical que ha sido denostado pero luego se ha demostrado que es el modelo más eficiente y sostenible por el impacto que genera en el planeta y nuestro entorno. Apuestas de colaboración público-privada como Visit Benidorm, como Destino Turístico Inteligente...
- ¿Así que los empresarios se sienten acompañados por el Ayuntamiento?
Sí, en estos últimos años... Antiguamente podemos decir que los empresarios con la renovación de los hoteles iba tirando de esa transformación, pero ahora la administración está haciendo su trabajo y estamos muy animados en seguir invirtiendo gracias al trabajo que está haciendo la administración local.
Foto: PEPE OLIVARES.- Siendo hotelero de Benidorm y con el peso que tiene el turismo en la ciudad, ¿qué es lo que ha llamado la atención de este año de pandemia? Hay colas para pedir comida, las calles están vacías...
Benidorm ha ha hecho un esfuerzo por ser seguro. Creo que ha antepuesto claramente la seguridad y una prueba de ello son las playas. Se ha sacrificado un poco el aforo para darle a las personas seguridad. Las empresas seguimos esa apuesta clara también. Aquí se está viendo la demagogia de muchos cuando hablan en contra del sector turístico. Hablan de sectores alternativos, de empleos maravillosos...
me gustaría que todas esas personas que atacaban al turismo ayuden a los que estaban en la cola de Cáritas
Pues me gustaría que todas esas personas que atacaban al turismo, que ayuden a todas las que estaban en la cola de Cáritas, o le digan a las que están perdiendo sus empleos o están en un ERTE a ver cómo van a vivir. Me gustaría saber si los que han estado trabajando en los hoteles y queremos que sigan muchos años más qué empleo tienen para ellos pensado estos altos gurús y cerebros. Si van a trabajar en la investigación de la biotecnología avanzada, en la robótica o en la ingeniería nuclear o en qué. Se está viendo que el impacto de un mundo sin turismo es muy duro y que ese cambio está más en la imaginación de algunos que en la realidad. Lo que queremos es hacer un sector más competitivo, con un empleo de mayor calidad y que sea más capaz de hacer más feliz a los que nos visitan.
- ¿Cómo ha afectado a nivel económico a los hoteles?
La crisis está siendo durísima para todos. Las personas que más lo están sufriendo son los que han perdido su empleo, algunos incluso han perdido su casa. A esta gente hay que recuperarla cuando antes. Las empresas estamos sufriendo también muchísimo. La crisis ha demostrado que las cadenas vacacionales están siendo más resilientes. Porque si miras ahora cuáles son las ayudas en el registro de la SEPI, que son rescates que realiza el Estado con préstamos que la banca no daría, casi todo son cadenas urbanas. Y vacacionales yo te diría que no hay ninguna. Ha habido del sector de agencias de viajes, líneas aéreas y hotelería urbana básicamente. Las cadenas hoteleras vacacionales están resistiendo mejor, pero no significa que lo puedan hacer sine die y hasta la eternidad. Las pérdidas son muy importantes y la recuperación está siendo mucho más lenta.
- ¿Por qué?
Sinceramente, la Unión Europea no está a la altura en estos momentos de lo que se esperaba de ella. No puede ser que Reino Unido haga un brexit y sea capaz de tener a la mitad de la población vacunada y en la UE no lleguemos al 10%. La vacunación es recuperar nuestras vidas, nuestros negocios, los empleos, a las personas que amamos, volverlas a abrazar. Y eso es fundamental. Yo creo que es importante que las administraciones públicas piensen en ayudas directas a las empresas. España está a la cola de todos estos planes de rescate. Recientemente Hosbec ha pedido un plan de rescate que no llega al 0,7% del presupuesto de la Generalitat para salvar a todo el sector alojativo turístico de toda la Comunitat Valenciana.
Foto: PEPE OLIVARES.- Viendo el ritmo de vacunación y las reservas de Semana Santa, ¿cree que en verano habrá cierta normalidad? ¿De qué depende?
La solución más económica es la vacunación. El precio de una vacuna es despreciable para el daño que causa el virus todos los días en nuestras vidas y en la economía, y a nivel humano, sanitario... Mientras tanto, Europa no ha estado a la altura en la lucha contra el virus, hemos visto como Asia y Oceanía lo han hecho muy bien, pero aquí no. Ni siquiera en Estados Unidos. No tenemos tecnologías, no hay aplicaciones para los móviles que te permitan trazar los contactos, el nivel de test que ha habido durante la pandemia ha sido muy bajo.
- ¿Es partidario del pasaporte sanitario?
Por supuesto. Mientras no estemos todos vacunados, la única esperanza que nos queda es el pasaporte sanitario para que la gente pueda tener movilidad, pero movilidad segura. Hay que empezar a dar movilidad a aquellas personas que tengan un test, que estén vacunadas o que hayan pasado recientemente la infección. Y para eso necesitamos un pasaporte sanitario cuanto antes. Nos permite quitar muchos de los problemas que hay hoy. Lo otro es mucho peor, no tenemos libertad, no nos podemos mover, no aseguramos la vida de las personas que queremos, que están a tu alrededor y además estamos hundiendo la economía, el empleo y todo el país. Por no permitir una movilidad controlada con tecnología.
- Para terminar, ¿tienen alguna previsión de cuándo se podrá recuperar la economía de las empresas y todos los empleos turísticos?
Salvo que cambien mucho las cosas, no será este año cuando empiece a haber algo de actividad. Sin duda alguna, será un año similar al 2020. Si Europa hace el pasaporte sanitario y se empieza a aumentar el ritmo de vacunación, quizá a final de año podamos empezar a recuperar algo de nuestra actividad. Y una recuperación completa, prácticamente todos los estudios están hablando 2023 en adelante. Yo sigo creyendo que va a haber un efecto descorche, que cuando haya una movilidad segura mucha gente va a salir de golpe, pero también el virus ha dejado secuelas económicas en las finanzas de muchas familias. Hay quienes han ahorrado más, pero las hay que lo han perdido casi todo. Eso se va a notar en el número de personas que van a viajar. Si no hay ayudas directas, va a haber una crisis muy grave.
- ¿Hay alguna previsión de cómo va a ir el verano?
Si me hubieses preguntado hace unos meses te hubiera dicho que esperábamos un verano intermedio, entre el 2020 y el 2019. Ahora mismo estamos esperando un verano peor o igual que el 2020. No hay movilidad entre comunidades, no sabemos si la va haber porque no tenemos ninguna previsión. El Reino Unido hasta final de junio no va a venir, dudamos muchos que puedan venir hasta septiembre u octubre con este ritmo de vacunación. Esperamos un verano terrible, sinceramente.
Foto: PEPE OLIVARES.
