ELCHE. El martes se cumplen tres meses desde que el Elche hacía oficial la contratación de Eder Sarabia como nuevo técnico de su primer equipo.
Aunque los resultados no se corresponden todavía con las buenas sensaciones que transmite el equipo, el exfutbolista bilbaíno (hijo del mítico Manu Sarabia) y hoy entrenador se va haciendo poco a poco su sitio en una plaza siempre exigente como es la del Martínez Valero y para Alicante Plaza repasa lo que está siendo el inicio de su nueva etapa en su carrera profesional.
- Pregunta: Tres meses ya y muy intensos...
- Respuesta: Muy intensos...
- P: ¿Qué tal a nivel personal y deportivo?
- R: Bueno, con mi mujer y mi hija asentándonos en la ciudad y lo mismo en el club y los jugadores. Ya conocía la importancia, la repercusión de la institución, pero hasta que no llevas un tiempo, no acabas de conocer bien a todos del todo. Y al revés también, lo mismo ellos con respecto a uno. Entonces, bueno, creo que muy positivo, muy positivo a nivel de todo lo que estamos sembrando y todo lo que ya vamos viendo. Eso sobre todo lo destacaría como muy intenso. Y luego, sobre todo también alimentando mucho esa ilusión con la que ya vinimos, pero que cada vez nos lo va confirmando más. Pues todo eso que vamos viviendo, toda esa gente con la que te vas cruzando, todos esos ánimos, lo feliz que estamos aquí, el potencial que vemos que tiene la plantilla, el potencial que vemos, que tenemos a nivel institucional, afición.
-P : ¿Qué vestuario te encontraste a tu llegada y qué vestuario tienes hoy?
- R: A ver, por Pedro Bigas ya sabía que había un gran vestuario, sano, con buena gente, con ganas de aprender, de trabajar, que es algo para mí muy importante para el modelo y nuestra manera de ver el fútbol. Y como los fichajes han seguido esa línea, en ese aspecto el vestuario sigue siendo así.
Pero a mi llegada también vi un vestuario un poco dolido por la responsabilidad sobre esas cosas que estuvieron detrás del bajón de la temporada pasada. Y era y es un vestuario con ganas de que le ayudemos, de que le transmitamos energía e irse haciendo más fuerte para con ello superar, por ejemplo, los golpes que recibe. Por tanto, es un grupo que tiene margen de mejora.
-P: Interesantísimo ha sido un año más el mercado de fichajes del Elche, sobre todo en el tramo final. ¿Cuánto está condicionando el hecho de que una buena parte de las incorporaciones llegasen la última semana?
- R: Influye, desde luego influye; no quiero excusarme en eso, pero desde luego que condiciona. Mira, el año del ascenso con el Andorra tuvimos prácticamente a todo el mundo desde el primer día de la pretemporada. Eso es algo que te permite no solo trabajar desde el primer momento en lo futbolístico, también a nivel mental, a nivel de rutinas, a nivel de darle importancia a las cosas, porque en el fútbol no solo el juego, hay muchísimas cosas que me gusta controlar o transmitir, darle importancia. Por ejemplo, tenía preparadas para la pretemporada pues ciertas dinámicas, ciertas cosas, reuniones, incluso una con familias y demás que vamos a hacer ahora porque hasta finales de agosto no hemos estado todos y Agustín Álvarez había hecho solo una primera parte de la pretemporada, David Affengruber estaba sin equipo, otros futbolistas tampoco estaba en dinámica de competir...
- P: Más los lesionados...
- R: Sí, pero dentro de eso, que ha sido una dificultad, también ha sido una oportunidad para que otros futbolistas hayan podido dar ese paso adelante, como el caso de Barzic. Es decir, que las cosas hay que verlas desde el lado positivo, dejando de lado las excusas y, bueno, si se van cumpliendo los plazos iremos sacando el máximo rendimiento de todos ellos, pronto conseguiremos dar un nivel alto de juego, rendimiento y resultados.
- P: ¿Cómo va ese porcentaje de convencimiento de la plantilla?
- R: (Risas) Más, más, la verdad que más. Estamos en un porcentaje muy, muy alto. Cerca de conseguir ese equilibrio de los partidos que evite que se descontrolen demasiado, sean un correcalles, pero sin perder la verticalidad que es algo que en una reunión que tuvimos el otro día me decía Carlos Clerc que le había gustado. Cada vez demostramos más capacidad de atraer, de generar espacios, de salir combinando o más directo, generar ocasiones, peligro y que nuestros aficionados disfruten. Todavía nos falta el refuerzo del resultado, eso sí.
- P: ¿El vestuario es una familia?
- R: Sí, sí, lo que te he comentado un poco antes. Son muy buena gente, los capitanes, los veteranos, los fichajes, chicos que se han ido incorporando del filial... Cuando te incorporas a un grupo así todo es más fácil, empezando por el adaptarte, por el día a día, pero también representa un potencial que nos acerca a la
posibilidad de conseguir cosas muy bonitas.
- P: Al hilo de esto que comentas, tras el partido con el Granada elogiaste a ‘Cris’ Salvador y Mourad, futbolistas que habían estado un poco en el disparadero durante el mercado y que rindieron bien en los minutos que tuvieron en la segunda mitad, pero apuntabas a su profesionalidad…
-R: Sí, a ver, estuvieron en una situación como la que describes, pero una vez se cierra el mercado son uno más para mí, tienen las mismas posibilidades de jugar que cualquier otro. En ese sentido te puedo decir que nunca me dejo llevar por nombres o trayectoria, sino por los méritos en el corto y medio plazo. Y ahí, pues Cristian (Salvador) ya venía haciéndolos en las últimas semanas y por eso cuando tuvo la oportunidad de jugar el otro día.
-R: Es que apenas había jugado 400 minutos en partido oficial con el Elche en su primera temporada...
-R: Sí, pero conmigo trabaja muy bien y ante la lesión de Febas le ha llegado la oportunidad. El fútbol es eso también, estar preparado, ser profesional, estar mentalmente listo porque de un día para otro todo puede cambiar para uno. Destaqué a Cristian (Salvador) y a Mourad porque al final sus casos son un ejemplo y un incentivo para el resto.
-P: Este verano, entre que era el último en la rotación y luego llega Sory Kaba la conclusión que extrajimos es que no contabas con él...
- R: A Mourad lo sufrí cuando jugaba en el Andorra y antes de que fuera al Burgos lo quise fichar y lo conocéis tan bien como yo: sabéis lo constante que es, su compromiso. En eso es un ejemplo para sus compañeros, pero también como te decía en lo de que la oportunidad llega, en su caso al jugar con dos delanteros. Yo no soy de cambiar porque uno esté mal para castigar o por señalar y demás. Muchas veces mis cambios vienen porque haya gente que no está jugando que se hace acreedora durante la semana de hacerlo.
Como entrenador tengo que tomar decisiones, lo cual no significa que un futbolista sea mejor o peor. Y te digo que me da igual si se llama de una manera u otra o que sea del filial… si realmente rinde, compite, nos da lo que creemos que nos puede dar o que nos tiene que dar yo cuento con él.
- P: Antes de ir con lo de los dos delanteros, por tus palabras entiendo que hay futbolistas que pueden valer para Andorra, pero no para el Elche. Y no me refiero a razones económicas, más bien de exigencia, objetivos y entorno...
- R: Sí, siempre digo que un futbolista no es la pieza de repuesto de un motor, que la colocas y funciona. Ahora en el fútbol se tienen mucho más en cuenta esas cuestiones cuando se ficha, pero antes solo se decidía sobre la base de los datos del juego. También hay que ver la adaptación, el idioma, la presión, la exigencia como bien dices... En el Elche hemos trabajado este verano teniendo en cuenta todos esos parámetros y por eso hay que ir dando cierto tiempo a algunos jugadores para que puedan ir adaptándose, para poder dar lo mejor de sí mismos, está claro. Al final. cuando estás ahí, delante de 15.000 espectadores, que sabes que no puedes fallar, cuando tienes que ir a Zaragoza, a Cádiz y ganar...
- P: ¿Esa es la mentalidad del Elche de Sarabia?
- R: No lo dudes, nuestra mentalidad va a ser todos los días ir a por el rival, atacar, quitarle el balón, intentar ser dominadores del partido y por eso necesitamos jugadores que estén preparados para esa filosofía de juego y ese nivel de exigencia.
- P: Se te venía a reprochar un poco que no tienes plan B y ante el Granada sorprendiste jugando con tres centrales, dos carrileros, dos delanteros. ¿Tiene Sarabia plan B y es ese cambio de sistema o no?
- R: El plan B no es el sistema en sí, son las variantes dentro del mismo. El otro día jugamos con tres centrales y dos carrileros y tal vez se piensa más en ello como plan B, pero la realidad es que desde la primera jornada nunca hemos jugado exactamente igual porque los rivales tampoco eran los mismos. Por ejemplo, cuando hemos jugado 1-4-3-3 ha habido partidos que igualábamos a los dos centrales con el punta y con el extremo y otros en los que hemos orientado el punta a los dos centrales y el extremo opuesto saltaba entre el lateral y el central. Otras veces nos hemos igualado al hombre en todo el campo, otras librado con uno atrás.
El fútbol tiene infinidad de variantes y dependiendo de qué partidos y qué rivales pues, por ejemplo, podemos elegir un sistema con dos delanteros, dos interiores, un pivote, tres centrales y dos carrileros y que uno de ellos por ejemplo sea Josan, que es extremo y te puede llevar la pelota rápido a los últimos metros a sacar más centros y aprovechar la presencia de más jugadores de ataque. Pero es que a esa lectura previa nuestra de cómo podemos hacerle daño al rival y de cómo puede este hacérnoslo, le sigue la de los propios jugadores dentro del campo. Cuando tengo a un delantero como Sory Kaba o como Mourad, pues evidentemente puedo tener más alternativas de jugarle directo que si ese delantero es Óscar Plano o Agustín Álvarez, pero con estos puedo aprovechar otros recursos, los espacios que generan.
Pero es que a mí me gusta simplificar aún más las situaciones, es decir, no voy tanto a sistema y once contra once, como a situaciones. Por ejemplo, contra estos dos delanteros qué prefiero, ¿cerrar con tres o con dos centrales y el pivote un poco más cerca?
- P: Has hablado de la banda derecha personalizando en Josan, pero no de la izquierda...
- R: Porque al final la otra es verdad que el juego de Salinas es más como lateral. Ah, te digo que que está ofreciendo un rendimiento espectacular, llegando por fuera, metiéndole una marcha más al juego con su velocidad; le falta tener más calma en los metros finales para poner centros más precisos. Y en el 1-4-3-3 también entrando por dentro nos da mucho en las situaciones defensivas, en los contraataques. Estoy muy contento con él.
- P: Lo de entrar por dentro lo hace muy bien Clerc...
- R: Sí, sí es que Carlos (Clerc) puede jugar hasta casi de tercer central y si se asocia con el pivote, con el criterio que tiene puede filtrar por dentro. Bueno, es que no vamos a descubrirle ahora. Con Beccacece dio un paso adelante muy importante y por eso también lo queremos tener entre nosotros cuanto antes, como a todos los lesionados, todos nos harán más poderosos.
- P: Te preguntaba por la banda izquierda en el tema del sistema de tres centrales y dos carrileros porque me cuesta ver ahí a Yago Santiago y ahora lo recuperas...
- R: Como te digo, depende del partido porque, por ejemplo, no siempre hemos sido un equipo simétrico, acuérdate en Albacete con Óscar (Plano) en la derecha...
- P: Sí y lo acusamos...
-R: Vale, es verdad que nos pudo faltar algo en ataque por la derecha, pero porque también nos dio mucho en otras situaciones. Dependiendo del rival, de la situación, pues juegas asimétrico con solo un futbolista abierto en banda o simétrico con dos jugadores más abiertos en banda o el caso de antes de los carrileros. Son las riquezas que tiene el fútbol y que hacen que tanto nos guste.
- P: El Mirandés no es el Granada, pero sí que es verdad que por estructura se asemeja un tanto al Granada con cinco atrás, dos mediocentros y demás. ¿Puede ser interesante jugar con tres centrales y dos carrileros?
- R: Con el Granada teníamos un poco dudas porque la jornada anterior contra el Deportivo habían jugado ya con cinco atrás, pero tenían las ausencias de los internacionales. Al final, entre lo que intuímos que podían hacer ellos y lo que entendíamos que nos convenía a nosotros, que también teníamos bajas, nos decantamos por el 1-3-5-2.
¿Este domingo? Pues podría ser: línea de cinco contra línea de cinco; los carrileros se pueden emparejar.
- P: Te pregunto por dos nombres propios, el del David Affengruber, un líder ante el Granada, y Gerard Hernández, la gran sorpresa del último día de mercado.
- R: Pues David (Affengruber) está en esa adaptación que decía antes, pues venía casi tres meses sin competir, pero como es un tío súper profesional pues ha estado entrenando por su cuenta, preparándose y por eso seguramente ha podido dar un rendimiento tan alto tan pronto. Y respecto a esa personalidad de la que hizo gala el otro día, como me defiendo bien en inglés hablo con él, pero le he pedido a Bambo (Diaby) que le enseñe nueve o diez palabras claves en castellano que le permitan comunicarse de manera más fluida con sus compañeros.
Es un jugador que nos va a dar mucho, porque tiene muy buenas condiciones defensivas, entiende bien el juego y viene con ganas de aprender. Además, es muy válido en línea de tres en el medio, también en la derecha e incluso de lateral derecho casi cerrando de tres en momentos determinados.
- P: ¿Y Gerard? A este lo conocías...
- R: Sí, Gerard era un tema que ya tenía controlado, lo había hablado con Héctor (Fernández), mi agente, que ve mucho fútbol de divisiones inferiores.
Venía de ser campeón en el Europeo, no había jugado la primera jornada en el Villarreal B. Es un futbolista con unas condiciones tremendas y, aunque tiene cosas que aprender, hacerse a la exigencia de la categoría, queremos sacarle todo lo que tiene. Nos ayuda junto a Cristian Salvador, Aleix Febas y John Chetauya a ser muy fuertes en esa posición de pivote.
- P: Levantó un poco de polvareda en el entorno ese comentario que hiciste tras el encuentro ante el Huesca respecto a la poca paciencia de algunos aficionados...
- R: Yo lo único que quería es que esos aficionados que pitaban tuvieran presente que, por ejemplo, la jugada del gol de Yago Santiago al Córdoba no es algo fácil de hacer en el minuto 2.
- P: Sí, esa acción entiendo que fue para ti la culminación de tu idea... y pides paciencia...
- R: En los primeros minutos tienes que intentar hacer cosas diferentes a las que luego vas a perseguir, hay que provocarle: jugar largo para que haya espacio dentro o jugar por dentro para que haya espacio por fuera... El gol de Yago es más fácil conseguirlo en el minuto 30 como lo hicimos. Son cosas que me encantaría poder explicarlas al aficionado para que la gente las entienda. Por qué las hacemos y para que la gente vea que luego muchas de esas cosas no pasan por casualidad, sino que vienen por esa preparación que estamos diciendo.
Entiendo que el aficionado quiere lo mejor para su equipo y lo mejor para él es que gane. Pero debe tener presente que nosotros somos los primeros en exigirnos, los primeros en ponerle pasión. El otro día, el 99% del público nos demostró que está con nosotros, que a poco que le demos lo vamos a tener ahí. Contra el Granada fueron los que nos ayudaron a pasar ese mal momento de los dos goles encajados. Estoy seguro que será un ambientazo que se repetirá y, como digo en rueda de prensa, mi sueño no es el ascenso con el Elche, mi sueño es ver este estadio con 25.000 personas vibrando, sintiéndose orgullosas de su equipo y disfrutando. Si eso lo conseguimos, el ascenso será su consecuencia.
- P: La última: ¿Bien con la bici?
- R: (Risas) Este sábado tenía anotada en la agenda la Gran Fondo Alberto Contador en Oliva, pero, claro, no he podido participar. He salido algunos días a hacer la Garganta de Crevillente, bueno, todo el interior de Alicante, Benidorm ya me lo voy conociendo bien.