ALICANTE. Se avecinaba movida la mañana del lunes en el Hércules y los pronósticos se cumplieron con creces.
Con el técnico más cuestionado que nunca y el equipo, tras la undécima derrota a cinco puntos más el 'golaverage' del cuarto, la sesión de recuperación programada por Luis García Tevenet se llevaba a cabo en el Estadio de Atletismo y no en el Rico Pérez como estaba inicialmente previsto.
Un entrenamiento de caras largas y al que asistían atentamente Dani Barroso y Javi Portillo:
Poco después hacía acto de presencia Juan Carlos Ramírez, que aparcaba su coche en un patio de caballos del Rico Pérez al que llegaban tras poner fin al entrenamiento técnico y jugadores.
Y luego todos a la sala de prensa donde el empresario vasco confirmaba en su cargo al entrenador sevillano y todos los actores implicados escenificaban su unión y convencimiento en que a falta de once jornadas para el final de la liga regular, el equipo puede alcanzar las posiciones de play off.