Darío GarcíaMientras el miembro de la institución más dovish (suave) espera que los tipos alcancen el 1,5% a finales de año, el más hawkish (agresivo) marca el objetivo en el 3%
MADRID. Ha empezado. Finalmente, la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) anunció el primer aumento de los tipos de interés al rango del 0,25% al 0,5%, iniciando el proceso de una serie de subidas para las próximas reuniones. Que según el propio Jerome Powell tendrán lugar en cada una de las seis que nos quedan durante 2022 hasta alcanzar la zona de 2% para finales de año. Las palabras exactas fueron: "Será apropiado seguir con las subidas continuadas en los tipos para estabilizar la inflación”.
Además las previsiones de los miembros de la FED detalladas en el 'Dot Plot' confirmaba dichas palabras. Pero lo más importante es que mientras el miembro más dovish (suave) espera que los tipos alcancen el 1,5% a finales de año, el más hawkish (agresivo) marca el objetivo en el 3%. Esto hizo que los mercados se movieran con una volatilidad muy agresiva. Está claro que las tensiones e incertidumbres provocadas por la guerra en Ucrania parecen haber impulsado incluso a los miembros más agresivos a ir más lento.
Powell apuntó que "con una inflación muy por encima del 2% y un mercado laboral fuerte, vemos apropiado elevar el rango objetivo para el tipo de los fondos federales en nuestra reunión a fines de este mes". El proceso de eliminar la política acomodaticia en las circunstancias actuales implicará tanto aumentos en el rango objetivo de la tasa de fondos federales como una reducción en el tamaño del balance de la FED", añadió. Aun así, en el comunicado del miércoles, sigue sin concretarse cuándo empezará la reducción de dicho balance. "Hemos progresado, y esperamos anunciar las medidas en una próxima reunión, quizá en mayo", es todo lo que alcanza a decir.
Es cierto que esto ya se sabía antes del comunicado de la institución, había suficiente información sobre la mesa de que la economía estadounidense estaba creciendo demasiado rápido y que la presión inflacionaria se ha vuelto casi insostenible.
Pero no nos olvidemos, tanto la inflación como la guerra en Ucrania no van a frenar a la economía de Estados Unidos. La FED espera que el PIB se sitúe en el 2,8% real -descontando la inflación... y ya veremos- en 2022, del 2,2% en 2023 y del 2% en 2024. En cualquier caso, la inflación este año superará el 4% y el 2,8% 'ya si eso' para 2023, según la media de los miembros del banco central estadounidense.
A pesar de este nefasto escenario que se avecina, el presidente arrancó con un nuevo discurso negacionista. En esta ocasión es el tema de una posible recesión. "La probabilidad de una recesión en los próximos años no es muy alta. Todas las señales apuntan a una economía muy fuerte, que no solo podrá soportar sino que florecerá en un entorno de tipos más duros".
Maravilloso. Ya hemos visto a Powell retractarse de su propias palabras en varias ocasiones con la pandemia, la inflación... Es el turno de la recesión y no hay dos sin tres. Vamos avisando.
Darío García es analista de XTB
