VALÈNCIA. El 31 de octubre es la fecha límite del Gobierno valenciano para presentar el proyecto de Ley de Presupuestos de la Generalitat para 2025 y trasladarlos a Les Corts para su tramitación. Una jornada tradicional que, aunque ha sufrido en ocasiones algún pequeño retraso (ocurrió con el Govern del Botànic), siempre se ha saldado -salvo la excepción de la prórroga de 1989- con la aprobación final en Les Corts.
En esta ocasión, las dificultades son para el PP liderado por Carlos Mazón, que necesita los votos de Vox en la cámara para sacar adelante las cuentas. Una posibilidad que se encuentra abierta pero, a tenor de las reacciones del partido de Santiago Abascal en las últimas semanas, ni mucho menos asegurada.
Es más, para medir la temperatura de la negociación no habrá que esperar al momento de la llegada de los presupuestos a Les Corts, donde deberán superar primero las enmiendas a la totalidad; el proceso de ajustes en comisión y el pleno final con votación conjunta a la ley. Vox ya ha advertido que desea conocer el proyecto antes de que se presente para comenzar las negociaciones, algo a lo que el PP no está dispuesto, tal y como informó este diario.
¿Significa esto que si en los próximos días el Consell no comparte la información con Vox ya estarían rotas de forma definitiva? No necesariamente, si bien fuentes del partido de Abascal consideran que esta postura sería entendida como una actitud "hostil" por parte de los populares que denotaría "poca voluntad de negociación".
En este sentido, desde Vox señalan que su objetivo, en cualquier caso, será el de seguir los cauces parlamentarios habituales y presentar las enmiendas que consideren. Según la respuesta que reciban por parte del PP respecto a sus iniciativas, existirán mayores o menos posibilidades de que el Consell de Mazón consiga luz verde de los 'voxistas' en el conjunto de los presupuestos.
Cabe recordar que el pasado mes de julio, Santiago Abascal anunció la ruptura de su partido con el PP en los cinco gobiernos autonómicos conjuntos que compartían debido a su desacuerdo con las posiciones sobre migración del líder popular, Alberto Núñez Feijóo. De hecho, los principales puntos de fricción en Les Corts entre ambas formaciones a la hora de aprobar propuestas de resolución en el Debate de Política General fueron también sobre este tema, que para los 'voxistas' se ha convertido en una línea roja.
Así, el pensamiento general en la cámara es que podría existir acuerdo entre las dos formaciones para la aprobación de los presupuestos de la Generalitat para 2025, si bien todo parece depender de la línea estratégica que pretenda trazar Abascal dentro del escenario político nacional. Desde las estructuras territoriales de Vox, aseguran que su posición será escuchada por la dirección en Madrid, y desvían al PP la responsabilidad de que salgan o no adelante las cuentas en función de sus posiciones respecto a las propuestas que plantee Vox.