ELCHE. La ciudad se está expandiendo hacia Crevillent. Aunque estos últimos años se han ido desbloqueando algunos sectores urbanísticos que han tardado hasta dos décadas en activarse, en las últimas semanas el urbanismo comercial está tomando aire precisamente en la Avinguda de Crevillent, en la Nacional-340. Si bien hace unos días Inurban activó la maquinaria para urbanizar un sector de 140.000 metros cuadrados en el sector E-10, detrás de Sprinter, ahora han hecho lo mismo los propietarios del sector E-32, prácticamente anexo al anterior, aunque notoriamente más pequeño, con unos 36.000 metros cuadrados. En total, más de 176.000 m2 de suelo comercial que tomará forma en los próximos años.
Sobre el sector E-10, el objetivo del Plan de Parcial presentado es impulsar el uso comercial demandado en la zona, conectando de forma directa con las infraestructuras y servicios urbanos previstos y de alrededor. El sector consolidaría la zona, completando un paisaje antropizado y cuya única zona natural se encuentra en el Barranc dels Arcs. Con el ordenamiento planteado, se obtienen parcelas para un uso comercial de mayor superficie que el que permite el actual Plan General, generando sobre los diferentes volúmenes diferentes alturas edificatorias procurando una tipología más flexible. Serán cuatro manzanas: tres de ellas dotacionales y la gran manzana de uso lucrativo de 57.565 metros cuadrados de edificabilidad. La máxima permitida y con una plantemamiento abierto que permite más opciones a las firmas que se instalen. Se podrán levantar naves de hasta 15 metros de altura.
Asimismo, se intentará mantener en la medida de los posible las edificaciones existentes que no participen de la actuación. También se propone una red viaria principal que rodea a la manzana para las empresas. En total, serán cinco tipos de viales diferentes, todos ellos con aparcamiento, cuyas dimensiones varían desde los 18,00 a los 27,65 metros de ancho. Teniendo en cuenta la envergadura de la intervención, se crearán 576 plazas para aparcamiento. Además, este gran sector tendrá un área adscrita de 15.000 m2 de zona verde, y otras tres zonas verdes integradas alrededor de la gran manzana, que suman 11.076 m2.
Por último, aún es pronto para conocer qué se instalará porque acaba de arrancar el trámite urbanístico y queda pendiente ejecutar la reparcelación de la 30 de propietarios, así como la propia urbanización. No obstante, el proyecto está diseñado para que sea una gran compañía la que se instale, ya que la división original en en tres manzanas obligaba a la creación de naves de escasas dimensiones, lo que no favorece el desarrollo de actividades que requieren grandes superficies edificatorias, ya que se considera a este sector como un lugar idóneo para la implantación de grandes superficies, teniendo en cuenta la escasez de parcelas de este tamaño en el municipio.
En cuanto al sector E-32, el viernes se aprobó en la Junta de Gobierno su exposición pública para realizar cambios en las claves urbanísticas, ya que actualmente es un sector de unos 36.000 metros cuadrados con un suelo industrial abierto. Se pretende combinarlo con otra Clave —el tipo de suelo— que permita los usos comerciales compatibles con los industriales. En este caso, sale a consulta pública el Documento Inicial Estratégico. Es otro sector cuyo ordenamiento se encargó a Fuster Arquitectos hace años, y de él se destacaba que es una manzana con diseño flexible que con el cambio de la Clave permitirá múltiples usos, desde oficinas, hasta hoteles, establecimientos para espectáculos o una propia superficie comercial.
En definitiva, un importante desarrollo urbanístico y comercial que entra ahora en trámites y que cabe esperar que vaya tomando forma en los próximos años con nuevas y potentes superficies que van expandiendo la ciudad hacia Crevillent. Antes que estos dos nuevos sectores, uno que ya está urbanizado y listo para las implantaciones, a priori una de ellas es el sector E-29 de casi 60.000 metros cuadrados junto al centro comercial de El Sauce, en el que se prevé que se instale Conforama. Un desarrollo que se va acercando también al apeadero del AVE inaugurado a principios de año.