El asesoramiento, la principal herramienta para acertar con la inversión en ideas disruptivas

BENIDORM. "No todas las ideas disruptivas son grandes oportunidades de inversión", así avisaba el responsable del canal intermediario para Iberia de Morgan Stanley Investment Management, Ignacio Vispo. BBVA junto a Alicante Plaza celebraron el pasado miércoles un evento en el hotel Meliá Villaitana de Benidorm para analizar las oportunidades de inversión, entre las que se trataron los proyectos de futuro, que ya son el presente y que necesitan del asesoramiento para acertar.

Además de Vispo, el panel de expertos lo completaba el director de Banca Privada de la Territorial Este de BBVA, Joaquin Raga, y el responsable de estrategia de Banca Privada de BBVA, Álvaro Manteca. El foro contó con la presencia del presidente de Ediciones Plaza, Enrique Lucas, que puso en valor la experiencia de BBVA en banca privada e inversiones financieras, e intervino al directora del Centro Banca de Clientes BBVA en Benidorm, Vanessa Mira, que señaló la transversalidad de los proyectos de vanguardia que irrumpirán también en la ciudad para mejorarla. 

Según los expertos, una de las premisas que hay que tener en cuenta es si la disrupción puede generar una idea de inversión o acabar siendo simplemente un beneficio para la sociedad. Vispo hizo mención a una de las temáticas actuales que están analizando: la economía del espacio Mientras otra empieza a despegar: el espacio. "Está todavía en una etapa de inicio, no sabemos todavía cuáles van a  ser todas las oportunidades de inversión, pero va a afectar muchos sectores", señaló Vispo durante su intervención.

Además, explicó que en Morgan Stanley Investment Management tienen equipos dedicados a analizar estos proyectos que parecen venir del futuro para conocer la idoneidad de invertir en ellos. Por ello, reseñó la importancia de que los interesados se dejen asesorar para ver qué tipo de inversiones son más adecuadas a ellos y evitar ciertos errores. Así, advirtió que "no vale la pena pagar cualquier precio por las ideas disruptivas solo por el hecho de serlo".

El director de Banca Privada de la Territorial Este de BBVA identificó cuatro megatendencias: sostenibilidad; disrupción tecnológica; consumo y nuevos estilos de vida y cambios demográficos y sociales. Con respecto a la sostenibilidad, afirmando que el mercado terminará expulsando a aquellas empresas que no apliquen medidas en este sentido. Al mismo tiempo, manifestó las diferentes actuaciones que realizan en pro del medio ambiente, que entre otras cuestiones, analiza el impacto que pueden tener las inversiones en este área. Para Raga, es importante que los clientes tengan una visión más a largo plazo de sus inversiones para que maduren. Con todo, dijo que una de claves para el éxito en el asesoramiento está en la motivación de los profesionales, algo que, dijo, reina en BBVA. 

Raga admitió que el usuario cada vez es más exigente y por ello, les obliga a escucharles más y "darle una oferta de valor adaptada a sus necesidades" al tiempo que tratan de reducir los riesgos "innecesarios y que, a veces, corren sin saberlo". "Nos caracteriza un diálogo constante con ellos", afirmó Raga, que explicó que trabajan de la mano de su servicio de estudio, lo que les da "una ventaja competitiva" que les "permite ser proactivos". 

Una de las apuestas más decididas por BBVA ha estado en la digitalización de los servicios. Pero el trabajo a través de la pantalla "no implica pérdida de cercanía", dijo Raga, quien señaló que es el usuario el que decide cómo relacionarse con ellos. La pandemia por su parte puso en alza esta herramienta, sobre todo en confinamiento. Lo  que habían avanzado antes de la crisis sanitaria les "permitió no dejar a ningún cliente atrás. Dimos toda solución cuando los mercados empezaron a caer". Así, expresó su satisfacción y orgullo del trabajo de esos meses porque la "inmensa mayoría de los casos no se salieron del mercado, que es lo que les pedía el cuerpo".

Optimismo sobre el futuro cercano

"En el tercer trimestre, está previsto que España crezca cerca de 15 veces más que China", así de tajante se mostró Álvaro Manteca en su repaso de la situación económica actual y lo que se prevé para 2022. Una charla que imprimió optimismo a los presentes a pesar de las dificultades que hay a simple vista, como son las elevadas presiones inflacionistas, los cuellos de botella en la oferta, la escasez de materias primas y de semiconductores, los retrasos en los tiempos de entrega, la crisis energética en Europa y los problemas del sector inmobiliario en China. Toda una serie de riesgos que dejan un panorama no tan cómodo al
previo de la pandemia.

Sin embargo, el experto señaló que "el estancamiento de la economía es poco probable". Para ello, indicó que la economía no se ha abierto del todo. Además, se prevé que para el 2022 el riesgo de contagios por covid-19 sea mucho más bajo. "Si es verdad que vamos a controlar la pandemia, se va a producir la reactivación del consumo". Manteca explicó que la gente volverá a viajar, salir a cenar y a hacer otras actividades que se realizaban con normalidad antes de la crisis sanitaria. También se retomará el consumo de bienes, vaticina el responsable de estrategia de Banca Privada de BBVA: "Estos cuellos de botella son transitorios, en algún momento las empresas volverán a su capacidad productiva normal". Por lo que se prevé que el año que viene aumente el consumo.

Y la inversión también crecerá. "Los inventarios de las empresas están bajo mínimos, van a tener que invertir para reponerlos. Si sube la inversión y el consumo, solo falta el gasto público", dijo Manteca. En este asunto, mencionó que se espera que sea poco probable que vuelva la austeridad de los gobiernos, "tenemos programas de gasto que empiezan a llegar, como los fondos de Next Generation de Europa".

Por lo tanto, "si sube el consumo, la inversión empresarial y el gasto público, significa que vamos a tener un crecimiento sólido para 2022 y 2023. Nos quedan dos años de crecimiento por encima de nuestro potencial de largo plazo de las economías mundiales".

A todo esto, cree que la inflación irá desapareciendo el año que viene, pero seguirá por encima de lo que se marcaba antes de la pandemia, más cerca del 2% que del 1%, que fue la norma de la pasada década. En este sentido, remarcó que los precios del gas natural "responden a circunstancias puntuales que se tendrán que normalizar después del invierno", mientras que para la inflación energética estima que "está cerca de llegar a su punto máximo". Con todo, aseguró que "por encima de la covid-19, el principal riesgo que puede estropear el escenario positivo es la inflación. Si el primer semestre de 2022 no empiezan a normalizarse los precios, la cosa no pinta bien".