La edil de Memoria Histórica, María José Espuch, preside la comisión no permanente creada para ejecutar la Ley. Foto: RAFA MOLINA ALICANTE. Los tres partidos que comparten responsabilidades de gobierno en el Ayuntamiento de Alicante (PSOE, Guanyar y Compromís) lograron este viernes el respaldo de Ciudadanos (C's) para borrar cualquier vestigio de distinción o reconocimiento institucional que la ciudad haya concedido al general Francisco Franco Bahamonde en aplicación de la Ley de Memoria Histórica. Salvo sorpresa improbable, el acuerdo se reeditará en el pleno del próximo jueves 24 de noviembre, en lo que se traduce al menos como un tímido acercamiento entre los bloques tripartito-C's ante la necesaria negociación de los presupuestos municipales de 2017. Según las fuentes consultadas, esas cuentas ya estarían cerradas, a expensas de últimos retoques en manos de Alcaldía, para ser sometidas al escrutinio y criba del Ministerio de Hacienda (el ayuntamiento está intervenido tras haber solicitado más de 70 millones en los planes de pago a proveedores habilitados por el Gobierno), antes de tratar de captar el respaldo de los grupos de la oposición para su aprobación en Junta de Gobierno y pleno.
La entente tripartito-C's se produjo en la comisión permanente de Asuntos Sociales y Culturales. Los votos de los cuatro grupos permitieron que prosperase la propuesta de acuerdo emanada de la comisión mixta creada hace un año para actualizar la nomenclatura de vías asociadas con la sublevación militar, la guerra civil o la represión de la dictadura. La primera parte del trabajo de esa comisión se llevó a la práctica en la Junta de Gobierno de este martes, cuando PSOE, Guanyar y Compromís ratificaron los nuevos nombres propuestos para 45 vías de las 115 estudiadas. El acuerdo no estuvo exento de polémica, ya que tanto PP como C's habían reclamado que se sometiese a la votación del pleno. El tripartito obvió esa petición, ya que la ordenanza que regula la rotulación de calles establece que el órgano competente para acordar nuevos nombres es la Junta de Gobierno. El PP ya ha anunciado que impugnará esa decisión.
El acuerdo sobre la retirada de las distinciones constituye un tímido acercamiento ante la próxima negociación de los presupuestos municipales
El escenario cambia por lo que respecta a la segunda parte del trabajo de esa comisión mixta: el que atañe a los reconocimientos y distinciones. La retirada de esos honores, como ocurre con su concesión, requiere necesariamente de un acuerdo plenario. A priori, saldrá adelante con los votos favorables de C's y de la exconcejal de Guanyar, Nerea Belmonte. El PP y el exconcejal de C's, Fernando Sepulcre, se abstuvieron.
¿Qué implica la propuesta? En concreto, el acuerdo comprende la anulación de todas las distinciones otorgadas a Franco que continúen en vigor, como la concesión del título de Alcalde Honorario Perpetuo (de 1964) y la de Hijo Adoptivo de Alicante (de 1940). Esta última, según la propuesta, ya fue acordada en 2009 a partir de una iniciativa promovida por el PSOE apoyada por el PP. Sin embargo, no consta que se le haya dado cumplimiento en el libro de Honores y Distinciones del Ayuntamiento. Además, se plantea la retirada de otros reconocimientos a la 17 División del Ejército de Ocupación, al barón von Knobloch (cónsul de la Alemania nazi en Alicante), al señor Carls (vicealmirante de la marina de guerra de la Alemania nazi); a la Centuria de Falange Española Tradicionalista y de las JONS Ramón Laguna; a Federico Silva Muñoz (ministro de Obra Pública; y a Fernando Suárez de Tandil y Angulo (conde de Vallellano). Todo, según la propuesta, de acuerdo a lo previsto en la Ley de Memoria Histórica y a los criterios objetivos pactados en la comisión mixta creada para su aplicación.
Guanyar Alacant emplazó, además, este viernes, a la Subdelegación del Gobierno a hacer cumplir esa misma Ley para evitar los actos de exaltación franquista que, aseguran, se vienen sucediendo tradicionalmente cada 20 de noviembre en la Residencia Juvenil La Florida por parte de grupos de extrema derecha.
A priori, el pleno del próximo jueves también avalará otra de las propuestas en las que venían trabajando de forma coordinada las concejalías de Servicios y Medio Ambiente para tratar de mejorar la imagen de la ciudad. Se trata de la ordenanza de Limpieza, que quedó aprobada este viernes en la comisión de Servicios con el respaldo de todos los grupos políticos y la abstención del exconcejal de C's, Fernando Sepulcre.
Los dos grupos mayoritarios de la oposición, PP y C's, que habían presentando enmiendas a la propuesta del tripartito acabaron bloqueándose recíprocamente, de modo que el texto que pasará a pleno será el planteado por PSOE, Guanyar y Compromís. Una de las principales novedades del nuevo texto es el aumento de la cuantía de las sanciones -que pasarán desde los actuales 50 hasta 200 euros por los incumplimientos leves y de 150 a 750 euros por los graves- para los ciudadanos que orinen en la vía pública, que no recojan los excrementos de sus mascotas o que depositen basura fuera de hora o fuera de los contenedores.
