ALICANTE. El Teatre Arniches contará con más de cuarenta espectáculos durante la primavera y el verano, hasta mediados de julio, cuando se tomará un descanso en la programación para preparar la temporada siguiente. Ocho obras de teatro, dos de danza, dos de circo y una de música en valenciano, además de otras muchas actividades como proyecciones cinematográficas y conferencias. Un calendario de citas culturales con las que Alicia Garijo, directora del teatro y a su vez responsable territorial del Instituto Valenciano de Cultura en Alicante, trata de consolidar su proyecto. "Hemos apostado por fomentar las nuevas dramaturgias, atraer a nuevos públicos y dar espacio a nuevos lenguajes", aseguraba la directora este miércoles durante la presentación de esta programación. Un proyecto de dirección artística que, según asegura, ha servido para ir incrementando la participación y la asistencia de la gente cada trimestre.
"El objetivo ha sido crear una identidad y una imagen de marca del Teatro Arniches que pudiera ser identificada fácilmente por el público con un producto cultural que fuese capaz de sorprender y emocionar", afirmaba Garijo. Y precisamente en ese camino ha consolidado su oferta de ocio familiar, uno de los contenidos que más éxito han venido acumulando y que quieren seguir consolidando. Cine y teatro para los más pequeños de la casa, con sesiones matinales en el fin de semana, a través del proyecto Som Menuts, pero también por medio de otras actividades entre semana, en colaboración con los centros educativos de la ciudad. "Es necesario inculcar el amor por la cultura, el cine y el teatro desde pequeños, porque son las generaciones que se convertirán en el público del futuro", explicaba la directora. Un público que tendrá que responder con su apoyo y participación en las iniciativas culturales que se ofrecen desde las distintas entidades públicas y privadas.
La temporada empieza fuerte con el programa habitual de la Filmoteca y con los eventos en colaboración con festivales como Abril en Danza y la Mostra Visible. Sin embargo, en cuanto al teatro, la primera representación que pisará sus tablas durante el mes de abril es Elisa y Marcela, el día 6, con la compañía A Panadería contando la historia de las dos primeras mujeres que consiguieron casarse, en 1901, a través del humor y el lenguaje corporal. Será el 16 de abril cuando llegará Lluis Homar, ahora director de la Compañía Nacional de Teatro Clásico, que aterriza en Alicante con el clásico Terra Baixa, en una versión que nada tiene que ver con lo habitual, donde él mismo interpreta los cuatro papeles protagonistas. Federico es la obra que abrirá el mes de mayo, atrapando a los espectadores con humor y música en directo, dando a conocer a un Federico García Lorca que pide un escenario ya que no tuvo su tumba.
El Teatro Nacional de Catalunya trae hasta la ciudad el espectáculo Kassandra el 10 de mayo. La historia de una mujer doblemente exiliada, porque se trata de una refugiada política, pero también de una refugiada de género. Un hombre que se convierte en mujer, que ofrece su cuerpo como esclava sexual y que habla en un basto inglés, con el que también logra comunicarse con el público. Pero la divertida y original obra en valenciano Non Solum, de Sergi López, será la comedia existencial que se representará el 25 de mayo y que precederá a la última obra del mes. Porque el 31 de mayo llegará el nuevo Tirant de la Compañía Nacional de Teatro Clásico con el que Paula Llorens, que adapta el gran clásico valenciano de Joan Martorell, Tirant Lo Blanc, dialoga con el presente apostando por la palabra y por el teatro físico. Se trata de la segunda producción del Instituto Valenciano de Cultura, que se suma al estreno de Sol Picó con Animal de séquia, que se representa en el Teatro Principal de Alicante en el marco del festival Abril en Danza.
La apuesta especial del Teatre Arniches por ofrecer un espacio de difusión y desarrollo creativo para los grupos musicales que cantan en valenciano se inició con Els Jovens, Tardor y La Marabunta durante la pasada temporada. Unas actuaciones que consiguieron llenar de público la sala principal y a las que tomará el testigo la banda El Diluvi, el 4 de mayo. Estos admiradores de Ovidi Montllor, que han versionado varios de sus temas en sus discos, cantan al amor y a la lucha que mueve el mundo. Un concierto en el que presentarán su último trabajo, con nuevas sonoridades e instrumentos.
Durante el parón del verano, desde mediados de julio hasta mediados de septiembre, el Teatre Arniches será el espacio donde tres jóvenes compañías trabajarán y ensayarán sus proyectos para estrenarlos en la siguiente temporada. Será a través de las ayudas y becas a la producción que otorga el Instituto Valenciano de Cultura y que han sido concedidas recientemente a Morgan Blasco, Joan Miguel Reig y La Trócola. "Una de las cosas más importantes que podemos hacer es la creación de sinergias con los colectivos de la ciudad para crear una industria cultural potente", afirmaba Garijo al respecto.