SAN PERTERSBURGO (EFE). De la falta de contundencia a una pegada de récord, un desgaste menor, la fortaleza de Unai Simón, Álvaro Morata a puertas de la historia y el aviso del Mundial, son cinco focos de los cuartos del final de la Eurocopa que España disputa ante Suiza.
1 - DE LA SEQUÍA A LA PEGADA
Junto al lateral derecho, vacío que ha ocupado a base de experiencia César Azpilicueta, la falta de contundencia en los últimos metros apareció como principal problema de España en la Eurocopa. Se acostumbró a empatar un grupo de jugadores que perdonaba ocasiones que premiasen el dominio de cada partido. Se desataron ante Eslovaquia con cinco goles y superaron un récord ante Croacia en los octavos de final con otra manita.
Nunca una selección en una fase final de un gran torneo había firmado diez goles en dos partidos. Lo hace España para demostrar que es imprevisible y escapa al análisis. Sus bases son sólidas y la definición mejoró cuando en cuanto aumento la confianza. Permite encarar con un grado mayor de tranquilidad el duelo de cuartos. Suiza encajó goles en todos sus partidos de Eurocopa y su portero, Yann Sonner, es el más goleado con ocho tantos encajados.
2. LA FORTALEZA DE UNAI
Una eliminación de España ante Croacia por el gol que abrió el partido, la cesión de Pedri y el mal control de Unai Simón, habría marcado la carrera del portero vasco. De nada habrían servido las paradas posteriores. El debate de la portería se habría reabierto y su nombre se habría sumado a aquellos que quedaron estigmatizados por errores que se recuerdan más que sus aciertos en las grandes citas: Arconada, Zubizarreta, Molina.
La realidad fue bien distinta. Unai se hundió unos minutos en los que la jugada no paró de darle vueltas en su cabeza pero aplicó a la perfección la "memoria de pez" que defendió Luis Enrique. Nada bueno se puede sacar a corto plazo del análisis continuo del error. Su fortaleza le llevó a ganar seguridad con un blocaje a un centro lateral y cumpliendo con el acometido de salir con rapidez en un despeje por la línea defensiva adelantada. Se desquitó a lo grande, con dos paradas salvadoras que le erigen protagonista, vuelven a enterrar la duda y dan una lección de un portero que se ha convertido en indiscutible en la selección.
3 - UN DESGASTE MENOR
Las dos selecciones han disputado el mismo número de minutos en el torneo, 390, pero Luis Enrique los ha repartido más entre sus jugadores que Vladimir Petkovic. Solo dos jugadores de campo lo jugaron todo en la Roja, Pedri y Laporte; el doble en Suiza que añorará a uno de ellos, Xhaka, su gran referente.
Luis Enrique no ha repetido once en toda su etapa como seleccionador. No iba a ser menos en una Eurocopa con tantos encuentros comprimidos en unas semanas. De sus 21 jugadores de campo convocados ya han tenido minutos 20. Sorprende la baja participación de Thiago Alcántara (43 minutos), pero el técnico asturiano ha demostrado, como ocurrió con Gayá ante Croacia, que confía en todos y cualquier puede ser titular. Suiza dio minutos a 19 jugadores de campo, pero seis de ellos de forma testimonial. El núcleo duro de trece futbolistas acumulan todo el desgaste en sus piernas.
4 - MORATA A LAS PUERTAS DE LA HISTORIA
Instalado en una montaña rusa de sentimientos, Morata encontró el premio a su gran desgaste físico de cada partido en la labor que menos brilla un 9, con el gol en la prórroga que puso rumbo a los cuartos de final. El tanto, un golazo con gran control y definición, sirvió de reivindicación personal a un futbolista siempre cuestionado.
De la crítica. Del meme. Del silbido de su propia afición en una Eurocopa. Del insulto y amenazas en redes. Morata, pasa a la oportunidad de dejar su nombre en un récord. Tras igualar a Fernando Torres, con un gol se convertirá en el jugador español con más tantos en las Eurocopas. Ni Villa, ni Raúl, ni Morientes. Nadie superó los cinco del delantero madrileño, que se quiere hacer un hueco en la historia.
5 - EL CRECIMIENTO DE PEDRI
Las estadísticas en numerosas ocasiones no reflejan la importancia de un jugador. Ocurre con Pedri en su primera gran cita con la selección española. Pocos reparan en la responsabilidad que asume con 18 años. Eso no figura en las cero asistencias y cero goles que ha aportado desde la figura intocable en la que se ha convertido para Luis Enrique.
Apenas lidera una clasificación en la selección, la de kilómetros recorridos, con 46.9 en cuatro partidos en los que siempre estuvo en el terreno de juego. Al inicio de la Eurocopa con timidez, mostrando respeto al riesgo, jugando en exceso hacia atrás o de forma lateral, pero siendo siempre el jugador al que buscar cuando había que inventar. Desatado en los dos últimos encuentros, encontrando espacios para filtrar pases, dar sentido siempre a la posesión y dejar gestos de gran calidad.