Vista rural de la pedanía de La Camapaneta, en Orihuela. Foto: AP
ORIHUELA. El Síndic de Greuges reclama al Ayuntamiento de Orihuela medidas para controlar el volumen de tráfico y ruido generado por la salida y entrada de vehículos frigoríficos en La Campaneta. En concreto, varios residentes de la calle Vega Baja de La Campaneta, elevaron esta queja al Síndic de Greuges en 2017, después de contactar con el Ayuntamiento y no obtener respuesta en un principio.
En su argumentación explican que la entrada y salida de vehículos pesados del complejo agroalimentario “La Redonda de los Huertos” y los ruidos generados por el intenso tráfico y el estacionamiento de vehículos frigoríficos en funcionamiento junto a las viviendas, provoca molestias a quienes residen en el área.
La queja de uno de estos oriolanos llegó en febrero de 2017 hasta el Síndic de Greuges, y está aún pendiente de resolución y de conocer de qué forma actuará el Ayuntamiento oriolano, si procede, para aplacar esas molestias. La sindicatura pone en énfasis, además, que la existencia de un colegio público en las proximidades del complejo agroalimentario al que acuden diariamente gran cantidad de camiones, justifica la necesidad de adoptar todas las medidas que sean necesarias para incrementar al máximo posible la seguridad vial en la zona.
El Ayuntamiento de Orihuela respondió en su momento al Síndic de Greuges, después de que fuera admitida a trámite la queja, enviando una comunicación suscrita por el Intendente-Jefe de la Policía Local y un informe redactado por el Inspector B05, en el que se detallaban diversas propuestas para minimizar las molestias.
La única medida que ha tomado el Ayuntamiento de Orihuela hasta el momento, según afirman los afectados, "ha sido prohibir el estacionamiento de vehículos en el lado de la calle Vega Baja que da al citado complejo agroalimentario, con lo cual se ha perjudicado a los vecinos, al limitarles las posibilidades de aparcamiento".
No obstante, los vecinos presentaron alegaciones a esta propuesta argumentando que las soluciones propuestas eran demasiado complejas y proponiendo que, para mejorar la seguridad de los vecinos y los viandantes cerraran las puertas de la empresa cuando estuviera en marcha el colegio público más cercano e impidieran que los camiones estacionaran en las zonas más cercanas a las viviendas, evitando las consiguientes molestias por ruidos.
En este sentido, solicitan que la empresa, además traslade la báscula de pesaje y el muelle de carga y descarga a la parte anterior del recinto para evitar el trasiego de vehículos por la calle Vega Baja. Con ello, aseguran, los de pequeño tonelaje podrían acceder a la parte posterior del recinto por un camino paralelo a la calle Vega Baja, Vereda o Camino de la Palmera, que comunica directamente dicha parte posterior del recinto con la CV91. Desde la CV91 podrían acceder los de mayor tonelaje.
En cuanto a los ruidos, el Síndic de Greuges recomienda al Ayuntamiento de Orihuela a controlar la emisión y recuerda textualmente que "las molestias acústicas, como ya ha tenido ocasión de afirmar el Tribunal Constitucional, en sus Sentencias de 23 de febrero de 2004 y 24 de mayo de 2001, generan perniciosas consecuencias para la salud de las personas, afectando gravemente a su calidad de vida".
El Síndic de Greuges, así, en mayo de 2018 pidió al Ayuntamiento de Orihuela que adopte todas las medidas que sean necesarias para reducir al máximo posible los ruidos y las molestias acústicas generadas por el intenso tráfico de camiones y que garantice al máximo la seguridad vial de los escolares que acuden al colegio público de La Campaneta, valorando pormenorizadamente cada una de las propuestas de solución planteadas por el autor de la queja aquí detalladas y contestando en tiempo y forma a sus escritos.
El Síndic dio de margen hasta junio para que el Ayuntamiento de Orihuela considera oportuno poner en marcha estas soluciones o no, pero aún no han respondido a la petición.
