El otro día, justo hace una semana, El Confidencial publicó una imagen desgarradora de un bou embolat en Oropesa (Orpesa) del Mar que salió a una especie de ruedo con fuego en los cuernos y sangre en el alma. Se estampó agonizante contra un toril y ya no sé si sobrevivió a la epopeya, negra, de este festejo que tiene un plus añadido: alberga un concurso nacional de emboladores. Entre el público, niños y menores de edad en estado de celebración, quien sabe si de éxtasis, de la barbarie, de esa cosa negra que de cuando en cuando corroe y subvierte nuestro territorio, la Comunidad Valenciana, de forma muy espacial; acto seguido está Cataluña, muy especialmente en Terres de L'Ebre. La imagen dio la vuelta a España a través de las redes sociales.
Concurso nacional. En Oropesa gobierna una alcaldesa/reliquia de C's , Araceli Moya, tras un pacto con PP y Vox. Hay un acuerdo para que a los dos años tome la vara de mando el PP. Los embolats se anuncian en la web municipal como uno de los reclamos turísticos de las fiestas patronales. El rito, supongo que ancestral, simbiotizado en tortura. La tortura, entronada en rito. Pasan las décadas, aumenta la conciencia medioambiental y animalista en todo el país, pero hay lugares, o no-lugares, en los que el tiempo se detiene: con un gran espesez de tiempo y espacio. Con decrepitud. Con regusto sádico.
Hace un par de semanas en Agost hubo protestas de la Asociación Feralgost para pedir el final de los festejos taurinos callejeros en esta localidad alicantina, capital importante de la cerámica y la alfarería. Celebraron la XIII edición de “Bous Agost” que incluye los embolats. Me pongo a pensar si antes de la XIII edición no había ediciones, o es que las mismas se instauraron y reglaron entonces. No tengo cuerpo de buscar. En Agost gobierna por mayoría absolutísima el popular Juan José Castelló Molina. Las tierras del Vinalopó también se tiñen de rito; de negra lujuria. De pena negra. ¿Y que han hecho los bichos para merecer eso?, se puede preguntar cualquier ciudadano de a pie. ¿Es ético o estético que las administraciones públicas fomenten este tipo de orgías, este pan y circo neo-romano teñido de pasión y muerte? ¿No hay una norma autonómica que ponga coto al desmán? Por lo visto no. Y si la hubiera, se deja a la interpretación discrecional de los ayuntamientos, como se acaba de dejar al libre albedrío de bares y restaurantes la decisión de permitir fumar en las terrazas. En la anterior legislatura, el segundo Botánico, hubo un conato de abrir el debate a cargo de Compromís, de Aitana Más, a costa del índice de fallecidos en los festejos....pasando de puntillas el maltrato de los astados. Conato. Sombras nada más y mucha agua de borraja.
Me pasa el foto-periodista ilicitano Pablo Miranzo unas imágenes de “Bous a la Mar” en Dénia, otro clásico. Pablo es un quijote, uno de los mejores en denunciar situaciones de explotación de todo tipo y color, sea poniendo el grito en el cielo por las condiciones de vida de los magrebíes en los viveros de Almería, sea con las mujeres mineras de Bolivia. Es, por elevación, nuestro Sebastiao Salgado de andar por casa. La imagen que abre está crónica es del pasado 7 de julio. Una imagen precisa, bella y disruptiva al mismo tiempo. La belleza del mal y de las flores convulsas. Y ese toro enamorado de la luna descontextualizado; como una naturaleza muerta. Pablo se aplica parcialmente en un mirada esteticista para rabiar con algo que no le convence.
En Dénia gobierna el socialista Vicent Grimalt con el apoyo de Compromís. Supongo, estoy convencido, de que estas líneas le sonarán a sánscrito en tanto en cuanto confrontan con una de las estampas más típicas, quien sabe si veneradas, de la localidad turística de la Marina Alta. Toros arrojados al mar, nadando como delfines. Como mitos greco-romanos luchando contra los elementos: literatura asequible y de urgencia. Platero y yo. Y La Niña del Exorcista.
Pablo: “Yo estuve el pasado domingo, y el lunes me aseguran que se murió un toro”. Ya ocurrió en 2002, me documento. Estrés y un poco/mucho de jauría humana. Gracias por las fotos, doctor Miranzo. Domingo amargo: ¿A quien le importan las salvajadas que se cometen con los toros con la de millones y millones de personas que mueren por hambre y guerras en el mundo, o que se pudren en fronteras malditas (Colombia/Panamá) persiguiendo la nada? Toros acojonados en plazas improvisadas, calles, puertos...Festejos identitarios, ¡ay¡
CODA: Compromís se desangra ( el nacionalista Enric Morera al Senado desbancando a Carles Mulet, que es un poco menos nacionalista) con réplica 7, en la escala de Richter, en Elche y varios municipios más. El Bloc (Més) contra Iniciativa y viceversa. Nada nuevo bajo el sol. Todo por la pasta. Y por el aquí mando yo. Despojos. Todos buscando hueco: el ex jefe de Gabinete de Cs en la Diputación, con Julia Parra, se va de asesor de Vox a Orihuela. Del caño al coño. Cada oveja con su pareja. Cierra en Alicante la Galería Aural de Begoña M. Deltell, la última de Filipinas: se apaga, de momento, una célula esencial de la cultura. Triste.