ALICANTE. La Autoridad Portuaria debe exprimir las posibilidades de futuro de dos emplazamientos estratégicos de su ámbito de influencia. Por un lado, el barrio de Sangueta, en el que el Puerto es uno de los principales propietarios de suelo y que sigue pendiente de ordenar desde el punto de vista urbanístico a través de un Plan Especial en el que se regule qué usos pueden implantarse en ese ámbito. Y por otro, el entorno de Casa Mediterráneo, la bolsa de terrenos comprendida entre la trasera de la antigua estación de Benalúa y el barranco de las Ovejas.
Se trata, cuando menos, de los dos grandes espacios de oportunidades ya definidos en la fase de diagnóstico del Plan Estratégico del Puerto para el periodo 2018-2022 encomendado a la consultora madrileña Teirlog Ingeniería, que debería quedar finalizado a principios del próximo año.
Así se expuso este martes en las dos reuniones de trabajo convocadas por la Autoridad Portuaria para dar a conocer esa radiografía o estado de la cuestión a representantes institucionales (Ayuntamiento, Diputación, Cámara de Comercio, Coepa, Cepyme, Universidad de Alicante, colegios profesionales y centrales sindicales) y agentes económicos vinculados a la dársena (navieras, consignatarios, agentes logísticos y terminalistas, entre otros). En los dos encuentros, con una duración de cerca de dos horas cada uno, se delimitaron esos dos emplazamientos como principales fortalezas para potenciar tanto la integración Puerto-ciudad como para el desarrollo de líneas de negocio. Y, a partir de ahí, se cuestionó a todos los convocados para que presentasen posibles aportaciones sobre qué aspectos se deberían promover para que el Puerto mejorase en ambos aspectos.
Las fuentes consultadas precisaron que el debate fue extenso y las sugerencias, variadas. A grandes rasgos, sí hubo coincidencia -al menos por lo que concierne a los agentes institucionales- en la necesidad de mejorar la accesibilidad de todo el recinto portuario y en facilitar, incluso, la movilidad con ayuda de algún medio de transporte público que facilitase los desplazamientos hasta la terminal de cruceros, por ejemplo. Uno de los defensores de esa iniciativa fue el concejal de Urbanismo, Miguel Ángel Pavón (Guanyar), quien -como había llegado a sugerir el propio presidente de la Autoridad Portuaria, Juan Antonio Gisbert-, también abogó por favorecer una continuidad en todo el frente litoral desde el Postiguet hasta el barranco de las Ovejas, con un trazado que conectase zonas verdes preexistentes: La Explanada, Canalejas, Joan Fuster o el Parque del Mar.
Los representantes institucionales coinciden en revitalizar la zona de Panoramis y en reorientar el modelo de ocio de las zonas en las que existen concesiones
El alcalde, Gabriel Echávarri (PSOE), consideró anacrónico que Adif todavía mantuviese bajo su titularidad parte del suelo situado a espaldas de Casa Mediterráneo y apremió a aprovechar y revitalizar el entorno del centro comercial y de ocio de Panoramis, en el muelle de Poniente, como elemento tractor. De hecho, también hubo confluencia en la mayoría de las aportaciones sobre la necesidad de orientar hacia las familias el modelo de ocio de la zonas en las que existen concesiones, de modo que no se diese lugar a quejas vecinales o de los agentes económicos que conviven en el entorno, como los hoteles situados en el acceso al muelle de Levante.
Tanto el vicepresidente de la Diputación, Carlos Castillo, como el representante de CCOO incidieron en la importancia de atraer inversiones y en que se mantuviese la actividad industrial siempre que estuviese regulada desde el punto de vista ambiental. Y también se sugirió que se diese cabida algún aliciente de tipo cultural también como atractivo turístico. En esta línea, se planteó la posibilidad de que se diese algún tipo de uso museístico al antiguo edificio de Sanidad (tras la renuncia de la empresa Plusmarino a explotarlo como restaurante) o de que se potencie el hito histórico que colocó al Puerto como punto en el que se cerró la Guerra Civil, con la partida de los exiliados de la República a bordo del buque Stanbrook.
Por último, los representantes del equipo de Gobierno (fundamentalmente, Pavón y el edil de Presidencia, Natxo Bellido), abundaron en la importancia de que el plan estratégico del puerto se coordine con la redacción del Plan General Estructural y con el Plan Ciudad y se debatió sobre la necesidad de que la mejora de las infraestructuras contase con fondos públicos y privados.