ALICANTE. Todo listo para la Gala de Comercio de 2017, que se desarrolla este martes en el Teatro Principal de Alicante, con el mismo procedimiento de contratación de la edición anterior y menos gasto. La Concejalía de Comercio y Hostelería, a partir de las indicaciones de los técnicos municipales, ha concertado su celebración mediante varios encargos directos, tramitados como contratos menores, en "un procedimiento ajustado a ley" que, además, habría supuesto un coste global inferior a los 18.000 euros, según precisó la actual edil del área, Gloria Vara (PSOE). En realidad, cerca de 4.000 euros menos de esa cifra límite prevista hasta ahora en la Ley de Contratación del Sector Público para los encargos sin concurso público. Según indicó Vara, "se ha actuado como se ha hecho siempre, siguiendo las indicaciones de los técnicos, que seguimos sosteniendo que es la fórmula correcta", insistió, en referencia a la causa por el supuesto fraccionamiento de contratos de la concejalía que ha derivado en el procesamiento del alcalde y exconcejal del área, Gabriel Echávarri, junto a su jefe de gabinete, Lalo Díez, y el asesor de ese departamento, Pedro de Gea.
En esta edición, el único desembolso conocido relacionado con el desarrollo del acto es el generado por la actuación del cómico Leo Harlem, por la contratación de un presentador de la propia gala y por el servicio de mantenimiento de la página web habilitada para la inscripción de las candidaturas y para formalizar las votaciones. Por el momento, no ha trascendido el coste individual de cada uno de esos servicios. Eso sí, a diferencia de lo que sucedió en 2016, en esta ocasión no se habría concertado ninguna campaña promocional específica sobre el evento, en el que el Ayuntamiento reconoce año tras año la labor de los comerciantes por su contribución a la mejora del sector en la ciudad.
Como publicó este diario, entre los 25 pagos bajo sospecha que dieron lugar a la apertura de diligencias del llamado caso Comercio sí figuró un primer bloque de cuatro contrataciones diferentes con conceptos relacionadas con la gala de entrega de premios de 2016 y con un gasto global que sí excedió los 18.000 euros. Se trataba de una factura de 11.756 euros por inserciones publicitarias en prensa escrita y radio sobre "premios comercio 2016"; de otra factura de 4.234 euros por el "desarrollo, alojamiento y mantenimiento de la web premios comercio 2016"; de una tercera factura de 14.632 euros por "gala premios comercio Cigarreras, imagen gráfica, presentación, actuaciones, etc... diciembre de 2016"; y de una cuarta factura de 1.729 euros por el "reparto de 5.000 trípticos zonas comerciales Premios Comercio 2016". Esas cuatro facturas se expidieron entre el 30 y el 31 de diciembre a la misma empresa: Publiasa, del grupo Vectalia. Las cuatro sumaban un importe total de 32.351 euros.
La propia Vara ya había avanzado, al poner en marcha la convocatoria de los premios de 2017, que el Ayuntamiento estudiaría la fórmula más adecuada para organizar la gala de ese año (retrasada hasta este 2018) y que se ajustaría a todos los requisitos legales. Como publicó este diario, Vara señaló entonces que sería "una contratación ajustada a derecho, como lo ha sido hasta ahora; si los técnicos consideran que la organización de la gala, la puesta en marcha de la página web en la que ya se pueden inscribir los comerciantes que lo deseen y la difusión del evento no constituye un mismo objeto, puede que se contraten por separado, y si no se supera el importe de los 18.000 euros, pues a lo mejor se decide no convocar ningún concurso", apuntó. "Se hará lo mejor para el interés público en función de lo que digan los técnicos y si se tiene que tramitar como contratos menores, que es un mecanismo legal, pues lo defenderemos, como lo venimos defendiendo hasta ahora", insistió, el pasado noviembre.
Según han venido manteniendo las defensas de al menos dos de los tres procesados (Díez y De Gea), prácticamente todas las ediciones precedentes de ese acto de entrega de reconocimientos a los minoristas se desarrollaron bajo el mismo procedimiento de contratación directa, sin que ningún técnico municipal transmitiese objeción alguna. No obstante, en sus declaraciones en el juzgado, tanto el exjefe de servicio, Diego Agulló, como la jefa de departamento, sostuvieron que ellos no habían intervenido en el proceso de 2016 y que no lo hubiesen tramitado de ese modo. En 2015, ya con el ahora extinto tripartito (PSOE, Guanyar y Compromís) en el poder, el Ayuntamiento optó por organizar la gala a través de la convocatoria de una subvención a la que concurrieron varias asociaciones de comerciantes locales. Finalmente, todas se agruparon en una única oferta y se hicieron cargo de su organización mediante esa subvención municipal, con la que contrataron los servicios del grupo Idex para su desarrollo.