El presupuesto de Alicante tendrá que esperar: habrá alegaciones de sindicatos y vecinos

ALICANTE. La entrada en vigor del presupuesto del Ayuntamiento de Alicante para 2021 tendrá que esperar como mínimo un mes más, hasta mediados de marzo. La propuesta de planificación económica trazada por el equipo de gobierno (PP y Cs), que ahora permanece en exposición al público durante 15 días tras su aprobación inicial de este martes, quedará sujeta a la presentación de alegaciones por parte de secciones sindicales y de vecinos, según confirmaron este jueves fuentes consultadas. Una circunstancia que supondrá que las cuentas tengan que volver a pleno para su aprobación definitiva, en cuanto se resuelva la admisión o el rechazo de esas propuestas.

Todo, a la espera de que también puedan presentarlas alguno de los dos grupos políticos que ejercen funciones de oposición y que votaron en contra de la propuesta: Unides Podem y Compromís. Las dos formaciones todavía meditan opciones, tras admitir que, a diferencia de otros colectivos sociales, "al menos, los grupos políticos sí hemos tenido la oportunidad de plantear propuestas durante la fase de negociación previa", según apuntó el portavoz de la coalición valencianista, Natxo Bellido. "En Compromís, siempre hemos pensado que la fase de alegaciones está prevista para los que no han tenido la posibilidad de participar en la confección de las cuentas, pero todavía no descartamos que vayamos a presentarlas", añadió.

Así, en principio, entre quienes ya han confirmado su pretensión de formular objeciones figura el Sindicato de Empleados Públicos (SEP), que volverá a reclamar la provisión de fondos que resulta necesaria para el desarrollo de la carrera profesional. Representantes del SEP indicaron que, hasta 2020, se había previsto una partida de 200.000 euros, que no llegó a ejecutarse, por lo que anticiparon su intención de reclamar su ampliación. 

Además, también reivindicarán consignación económica para la cobertura de plazas que siguen sin cubrirse. Entre ellas, se apunta la necesidad existente en el área de Deportes, en la que faltarían conserjes, dado que, según aseguran, existen "instalaciones que se han tenido que cerrar por falta de personal no pudiendo dar un buen servicio al ciudadano" incluso teniendo en cuenta el descenso de la demanda registrado como consecuencia de la crisis sanitaria. En esta línea, sus representantes añadieron que también faltan monitores en las piscinas y en los pabellones.

Las cuentas tendrán que volver a pleno para su aprobación definitiva en el plazo próximo de un mes

Igualmente, apuntaron que también resultan necesarios auxiliares de servicios, en colegios, en centros sociales y en juntas de
distrito, por ejemplo, además de auxiliares administrativos. De igual modo, indicaron que no se han convocado plazas para contratar bomberos, policías y agentes de movilidad "desde antes de 2008".

La Junta de Personal, en la que se agrupan el conjunto de sindicatos representados en el Ayuntamiento, todavía no ha sopesado la posibilidad de presentar alegaciones, como ha venido siendo habitual al menos en los últimos tres años. Fuentes consultadas indicaron que se ha previsto una reunión para el próximo miércoles en la que podría plantearse esa cuestión, pese a que las registradas en años anteriores "fueron desestimadas casi de forma automática", añadieron.

Entre el movimiento vecinal, sí se da por seguro el registro de alegaciones a título individual, sin que haya trascendido todavía ninguna decisión por parte de ninguna asociación concreta para formularlas como colectivo. En esas reclamaciones figurarían propuestas para que se tuviese en cuenta la ejecución de determinados proyectos en barrios como el PAU 2,  o para que se encauzasen canales de participación en la confección de las cuentas, a la vista de que no se ha convocado a las Juntas de Distrito para que tuviesen la oportunidad de plantear sugerencias.

Por lo pronto, fuentes municipales confirmaron este jueves que sí se pretende convocar el Consejo Social de la Ciudad para realizar una presentación del presupuesto durante la primera semana del mes de marzo. Se trata de un trámite habitual que sí se cumplimentó durante la primera mitad del pasado mandato e incluso en el año 2019, durante el primer año de Gobierno del PP en solitario. Se da la circunstancia de que el grupo municipal de Unides Podem ha registrado una iniciativa para su debate en el pleno ordinario de febrero por la que reclamaba la convocatoria del Consejo Social en un plazo de quince días a partir de la aprobación de la propuesta.